La Junta Central Electoral acaba de firmar un contrato con la empresa Deloitte & Touche S.A, para la realización de una auditoría forense al sistema de voto automatizado utilizado en las pasadas primarias del 6 de octubre, y que previsiblemente será utilizado en las elecciones municipales de febrero y en las elecciones congresuales y presidenciales de mayo del 2020.

¿Tiene relevancia confirmar que las primarias se realizaron sin que se utilizara un algoritmo que cambió los resultados de los votos en el caso del Partido de la Liberación Dominicana? Parece que sí, pese a que ese partido se dividió precisamente por los resultados de las primarias y la no satisfacción de una parte del PLD con los resultados.

En primer lugar está en juego, aún, la credibilidad de la Junta Central Electoral, y en segundo lugar está vivo el cuestionamiento al voto automatizado. La JCE emitió los resultados finales y proclamó candidatos presidenciales y de muchas otras posiciones en el PLD y en el PRM. Pero hay partidos que reniegan del sistema de voto automatizado. La JCE hizo una gran inversión en compra de equipos, y es casi seguro que volveremos al sistema de voto automatizado, pese a que haya políticos que sospechan de ese sistema.

Las elecciones de febrero y mayo están en la expectativa colectiva. Todo el mundo empuja hacia ese proceso electoral, y más que dejar satisfecho a los quejosos, la JCE debe también mostrar su disposición a la transparencia. Aunque se inviertan 300 mil dólares, y otro monto adicional en caso de que se extendiera el plazo de la auditoría, es correcto que se haga esta auditoría forense, por el bien del proceso electoral y de la democracia dominicana.