SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El peso del llamado “oro negro” en la economía inclina de un solo lado la balanza comercial con Venezuela, que en el pasado año reflejó un saldo negativo de US$800.9 millones para la República Dominicana, a pesar del sostenido aumento de las exportaciones nacionales a ese mercado.
Según un reporte de la Oficina Nacional de Estadística (ONE), en el 2014 las importaciones del país sudamericano alcanzaron los US$920.73 millones, mientras que la RD colocó productos allí por US$119.82 millones.
Se destaca que el 98.52% de los bienes que se compraron a Venezuela fueron “combustibles, petróleo crudo o reconstituido y productos derivados de su destilación”.
En tanto, la RD exportó pastas alimenticias, azúcares, artículos de confitería, fundición, hierro y acero, harina de trigo o de morcajo, materias plásticas y manufacturas de estas materias, productos farmacéuticos, entre otros.
“Es decir, que a pesar de (representar) un monto menor, las exportaciones a Venezuela están mucho más diversificadas que las importaciones” provenientes de ese mercado de Sudamérica, señala la ONE.
Intercambio desigual
Las cifras oficiales revelan que el pasado año las exportaciones representaron apenas el 13.01% de todo lo que se importó de Venezuela en ese lapso. “Esto quiere decir, que por cada US$1.00 exportado hacia Venezuela, se importó US$7.68 al país”, no obstante el hecho de que esta brecha se redujo en un 46.32%, con relación al 2013.
A pesar del déficit acumulado en el intercambio bilateral, en los últimos tres años “nuestras exportaciones han mantenido un crecimiento anual sostenido, mientras que las importaciones se han reducido para el mismo ciclo”. Esto se refleja –reseña la ONE- en la reducción de un 21.55% y un 1.39%, respectivamente, del saldo comercial y del intercambio comercial durante el pasado año.
Según el Ministerio de Hacienda, el petróleo venezolano suple alrededor de un 23% de la demanda de crudo y productos derivados de la República Dominicana. Buena parte de ese volumen se adquiere a tasas preferenciales y bajo condiciones de pago a largo plazo, de hasta 23 años, a través del Acuerdo de Cooperación Energética Petrocaribe que involucra de 18 naciones de Centroamérica y el Caribe.