CARACAS, Venezuela (EFE).- El presidente de Fedecámaras, la principal patronal de Venezuela, Jorge Roig, dijo este jueves que, según la información que maneja, el inventario de productos básicos para el abastecimiento del país cubre 45 días como "máximo".
"Las informaciones que tenemos directamente es que hay inventario para 45 días máximo, esa no es ninguna buena noticia", dijo Roig durante una entrevista que ofreció al circuito radial privado Unión Radio en la que señaló que la situación se agrava por las "compras nerviosas" que hacen en la actualidad los venezolanos.
"Esas compras nerviosas hacen que ninguna economía del mundo pueda reaccionar porque estás comprando más de lo que necesitas y la oferta no está preparada", agregó y señaló que ese nerviosismo se mantendrá mientras los compradores crean que no van a conseguir los productos a corto, mediano o largo plazo.
El pasado lunes Roig había indicado que entre dos y tres meses se podría aliviar la situación de desabastecimiento en el país. Señaló que "es verdad que en enero siempre ha habido escasez de inventarios, eso lo puede decir cualquier comerciante y empresario, pues muchas empresas dan vacaciones colectivas y la gente se incorpora más tarde de lo que se debe incorporar al nuevo año".
Asimismo, destacó que "las compras en diciembre fueron mayores ya que "la gente, como refugio a su liquidez, prefería tener bienes y servicios, que dinero en el banco".
"Si el gobierno se le ocurriera la buena noticia de hacer todas las cosas bien, dar divisas, cambiar un poco los controles, sincerar los precios, si hiciera toda esa tarea, aun así, antes de tres meses no podrían verse los productos en los anaqueles", señaló hoy.
Además, informó que desde noviembre pasado no se realizan subastas de divisas en el marco del sistema de control de cambio por lo que las empresas no están recibiendo los dólares para la importación de productos y materia prima.
Pese a esta supuesta inacción del Gobierno, Roig indicó que siguen en desarrollo las llamadas "mesas de trabajo" entre el Ejecutivo y las empresas privadas y apuntó que en 2015 se han producido reuniones con algunos sectores productivos privados.
"Eso está muy bien (las mesas de trabajo) pero eso no va a resolver el problema concretamente, eso a lo mejor es un pañito de agua caliente a este país que no aguanta más colchas de retazos", reclamó. Agregó que entre las medidas urgentes que, a su juicio, debe tomar el Ejecutivo se cuenta la devaluación de la moneda y el aumento de los precios de la gasolina.