SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La vicepresidenta de la Asociación de Industrias de la República Dominicana (AIRD), Circe Almánzar, al presentar el incumplimiento de las metas del 2do Congreso Industrial en materia de generación de empleos, exportación, competitividad, inversión extranjera directa e infraestructuras, advirtió que la corrupción constituye un factor preocupante para el desarrollo económico del país.
Mencionó los casos de corrupción pública y la impunidad como elementos que debilitan no solo la institucionalidad, sino también que obstaculizan el desarrollo productivo.
Sobre la reciente sanción del gobierno de los Estados Unidos al senador y secretario del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Félix Bautista, la empresaria consideró que es un indicativo de que el sistema judicial dominicano debería ser más eficiente.
‘‘Señales como esta debe alertarnos de cualquier proceso que deba iniciar en nuestro país. Nosotros tenemos un grado de impunidad muy grande que se transmite en el hecho de que no hemos tenido prácticamente ninguna condena significativa en materia de corrupción pública. Si hemos tenido condenas por casos de corrupción privada. […] No hemos enviado buenas señales a la población de una justicia eficiente’’, adujo Almánzar este miércoles durante la jornada de evaluación del último congreso industrial en la que se mencionó que no se alcanzó la meta del Índice Global de Competitividad en los últimos siete años.
En voz de Almánzar ‘‘es momento de que la República Dominicana demuestre que los aparatos judiciales en nuestro país funcionan, porque si no vamos a estar corrompiendo toda la institucionalidad del país. Un país sin instituciones fuertes, es un país que no progresa".
Explicó que la debilidad institucional penetra todos los sectores productivos, la competitividad, la empleomanía y el uso de los recursos de manera más eficiente. ‘‘Una corrupción a nivel de todas las instituciones del Estado también permea en el sector privado’’, enunció.
La representante de los industriales señaló que el sistema productivo es incapaz de crecer de manera sostenido si sus avances se basan en el incumplimiento de las leyes.
‘‘Nuestro país ha estado creciendo sobre la base, primero, de sectores de servicios, y de recursos externos que no necesariamente van a venir todo el tiempo. Si bien para la República Dominicana han sido de gran ayuda las remesas y haber accedido a financiamiento externo, no es menos cierto que se agotan esos canales. Precisamente el crecimiento que hemos tenido en nuestro país se debe a que hemos contado con esos recursos, pero que llega un momento en que si no fortalecemos nuestro aparato productivo no vamos a tenerlo’’, adujo.
Almánzar contextualizó que los países para desarrollarse deben apostar a su industria, empleo, desarrollo productivo, ‘‘pero sobre todo a su valor agregado nacional’’.
En ese sentido, el representante del Gobierno en el Consejo Nacional de Competitividad, Rafael Paz, defendió que la economía dominicana creció de manera ‘‘muy robusta’’. Citó mejoras en sectores turismo, agrícola y consumo.
Incumplimiento de las metas de desarrollo industrial
Sin embargo, durante la presentación de seguimiento de los indicadores del segundo Congreso Industrial, que planteaba metas a cumplir entre 2001 y 2017, se demostró el incumplimiento de la meta del 2do Congreso Industrial en materia de generación de empleos, exportación, competitividad, inversión extranjera directa ni infraestructuras.
Para el mercado laboral, la meta era generar 30 mil nuevos empleos en la industria manufacturera para el año pasado; no obstante, para lograr esa meta se registró una brecha de 276 mil 209 puestos de trabajo.
Con respecto a las exportaciones, en el pasado congreso del sector, se propuso incrementarlas a US$20 mil millones, partiendo de que en el 2011 representaron US$8 mil 362 millones, mas al año pasado apenas se logró US$10 mil 121 millones, para un incremento de menos de US$2,000 millones en unos siete años.
De acuerdo con los datos presentados en el Congreso, la industria presentó un ligero crecimiento, pero a un ritmo inferior al esperado. La mera establecía una expansión de 35% acumulado del 2011 al 2017.
Sobre el Índice Global de Competitividad, las estadísticas que presentó el sector privado muestra que al 2015 el Índice debió ser de 4.1, sin embargo, hasta 2017 la cifra fue de 3.9.
Similar sucedió con el Índice de Infraestructura, cuya meta al 2015 era de 3.9 y actualmente llega al 3.3.