SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La dirigente empresarial y abogada Marisol Vicens catalogó este jueves como “precipitado” y “dañino” para el interés nacional el acuerdo que pactó el Ministerio Público con la constructora brasileña Odebrecht, y reclamó que sean sancionados quienes resulten implicados en la recepción de sobornos por parte de la constructora.
Sostuvo que con el acuerdo anunciado por la Procuraduría General de la República se pretende garantizar que la compañía brasileña termine las plantas de Punta Catalina y rehabilitarla como suplidora del Estado, en violación de la Ley de Compras y Contrataciones Públicas.
La directiva del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) fue enfática en el sentido de que la compañía brasileña “no puede estar habilitada como contratista del Estado”, según las leyes dominicanas, tras haber admitido que pagó US$92 millones para obtener la concesión de obras en la República Dominicana.
“Particularmente entiendo que el acuerdo fue precipitado… vemos que hay una intención de buscar una solución para que Odebrecht pueda seguir construyendo las plantas de Punta Catalina, en vez de una preocupación por ir más allá” en las investigaciones, adujo.
Señaló que se trata de un caso “muy delicado, porque es la obra más grande que ha hecho el país en los últimos años, y precisamente ya se sabe que tiene que haber habido corrupción, porque Odebrecht misma confesó que todas sus obras las conseguía a base de este sistema” de sobornos.
“Entonces este acuerdo, el hecho de que haya buscado habilitarla nuevamente, en violación a la Ley, desde ya es dañino”, manifestó Vicens al participar como expositora en el panel “Los 20 deseos de ANJE”, que auspició la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE).
“Este caso tiene que tener un solución, que haya firmeza y sanciones para todos los implicados, no solamente los que se quieran exponer; pero lamentablemente hasta el momento estamos viendo una actitud todavía muy tímida departe de las autoridades”
Mencionó el caso de Perú, país donde el Estado decidió no volver a contratar a la constructora, entre otras sanciones drásticas adoptadas a raíz del escándalo. “Esperamos que lo que está ocurriendo en otros países pueda hacernos ver a nosotros cómo es que se debe manejar este caso”, apuntó.
“Todos lo sabíamos”
Marisol Vicens dijo que fueron las consecuencias que han tenido en Estados Unidos y otros países dela región las investigaciones en torno al sistema de corrupción y sobornos de Odebrecht las que “forzaron” a las autoridades dominicanas a tomar cartas en el caso.
Aseguró que era un secreto a voces que el emporio brasileño ganaba licitaciones para la construcción de proyectos mediante prácticas ilícitas. “Aquí de alguna manera todos los que estamos en este salón sabíamos que el hecho de que Odebrecht fuera la favorita de la corona, no era una casualidad”, comentó.
La expresidenta de ANJE apuntó que el de Odebrecht es un caso emblemático, que debe marcar un antes y un después en la lucha contra la impunidad.
Indicó que el escándalo pone al país en un momento crucial, “donde tiene que haber un antes y un después” en materia de la justicia y la continua impunidad ante hechos de corrupción, que ha sido “fatal” en términos institucionales.
Vicens comparó la investigación, en este sentido, con la crisis bancaria del año 2003, y el proceso judicial que condujo a sanciones penales contra varios empresarios.
“Esperamos que así como el año en el 2003 fue el año hubo sanciones importantes por la quiebra de entidades bancarias dentro del sector privado, pues que ahora haya también sanciones a todos los responsables de la corrupción pública”.
Mediante el acuerdo anunciado por el procurador Jean Alain Rodríguez -cuyos detalles aún se desconocen-, Odebrecht aceptra retribuir al Estado US$184 millones, una suma equivalente al doble de los sobornos que confesó haber pagado en el país, tal como dispone la Ley 448-06 sobre Soborno en el Comercio y la Inversión.