Bruselas, 19 ene (EFE).- Los regímenes comerciales de la Unión Europea (UE) para las economías en desarrollo, regulados bajo el Sistema de Preferencias Generalizadas (SPG), que permite a estos países un acceso privilegiado al mercado europeo, han supuesto desde 2014 un impacto positivo en las regiones que entran en el programa.

Así lo señala un informe conjunto de la Comisión Europea (CE) y el Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) publicado hoy en el que se analiza el impacto del SPG en sus tres modalidades, que otorga a decenas de países diferentes accesos al mercado comunitario como incentivo para la creación de empleo y la reducción de la pobreza.

Desde la entrada en vigor del SPG en 2014, las exportaciones de los países que se ven beneficiados por la reducción de aranceles en su comercio con la UE han aumentado en casi un 25 %, hasta un importe anual de casi 63.000 millones de euros en 2016.

Los países de la categoría de SPG estándar, entre los que se encuentran India, Kenia o Nigeria, exportaron más de 31.600 millones de euros en 2016 bajo un sistema preferencial que reduce los derechos en un 66 % de categorías de productos.

Por su parte, los territorios bajo el SPG+, también conocido como régimen especial de estímulo del desarrollo sostenible y la gobernanza, exportaron casi 7.500 millones de euros durante 2016 gracias a una serie de eliminaciones de aranceles en dos tercios de los productos.

En esta categoría entran diez países, entre los que están Bolivia, Paraguay o Filipinas, que se han comprometido a aplicar veintisiete convenios internacionales sobre derechos humanos y laborales, protección del medio ambiente y buena gobernanza.

Por último, en el régimen "Todo menos armas" se eliminan los derechos de aduana para casi todos los productos procedentes de 49 países menos desarrollados, como Haití, Afganistán, Bangladesh y 34 de los 54 países del continente africano.

Este bloque exportó productos a la UE por valor de 23.500 millones de euros en 2016 y el informe señala que son precisamente los más beneficiados del sistema de reducciones, ya que sus exportaciones han aumentado en casi un 40 % desde 2014, cuando estuvieron valoradas en 17.000 millones de euros.

La alta representante para la Política Exterior de la UE, Federica Mogherini, señaló en un comunicado que el SPG "complementa el compromiso político de la Unión Europea con sus socios" y aseguró que ha contribuido a fortalecer la protección de los derechos humanos y la sociedad civil en los países dentro del sistema.

Aun celebrando victorias como el acceso de Paraguay a la lista de los países más comprometidos con la protección de especies en peligro de extinción, el informe advierte también de aspectos en los que hay margen de mejora.

"En algunos países sigue habiendo ámbitos que son motivo de gran preocupación en cuanto a los derechos humanos y a la sostenibilidad. A este respecto, nuestros regímenes comerciales son un mecanismo de presión que puede conducir a un cambio, y debemos redoblar nuestros esfuerzos conjuntos", afirmó Mogherini. EFE