SANTO DOMINGO, República Dominicana.La Asociación de Empresas e Industrias Herrera (ANEIH) advirtió con inquietud las indicaciones que considera plantea el Fondo Monetario Internacional (FMI) de forma sutil en su reciente informe, en el cual señala los riesgos y desafíos que para la política y estabilidad económica del país implica el porcentaje de la deuda pública consolidada con relación al PIB.

Conforme al presidente de la ANEIH, Leonel Castellanos Duarte, la deuda consolidada del sector público que reconoce el gobierno se sitúa en un 50.4% en relación al PIB, en tanto que para el FMI alcanza ya el 53.1%.

“Los niveles alcanzados por la deuda pública ya resultan insostenibles para mantener la estabilidad económica, particularmente porque el país no cuenta con una política fiscal racional que dirija su curso de forma equilibrada”, apuntó.

A su juicio, el propio Fondo valida la necesidad de una gestión fiscal creíble especialmente si los déficits se toman un mayor tiempo para reducirse.

“En la ANEIH nos sentimos preocupados por este creciente endeudamiento y consideramos que urge ponerle cuidado antes de que sea tarde, viabilizando un acuerdo concertado entre todos los sectores sociales, en el seno del Consejo Económico y Social, para lograr una reforma fiscal de consenso, que trascienda la gestión administrativa, y se constituya en un instrumento de desarrollo amparado por un compromiso del Gobierno de sanear el gasto”, enfatizó el dirigente empresarial.

Añadió que el sector empresarial valora los ingentes esfuerzos de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), y el buen desempeño que ha tenido de los últimos años en procura de mejorar los niveles de recaudaciones, pero entiende que el país no debe seguir aplazando las reformas económicas, sobre todo la fiscal, y aprovechar que la economía mantiene un buen nivel de crecimiento, aunque haya empezado a mostrar evidentes de señales de ralentización.  

“Desde la Asociación de Empresas Herrera reiteramos nuestro apoyo a las iniciativas de desarrollo de la DGII, y consideramos que es preciso orientarnos por la línea de pensamiento de una reforma que permita poner un freno a los déficits públicos, y no esperar una crisis o que se instalen nuevas autoridades en el tren administrativo gubernamental”, acotó finalmente.