SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Además de la tradicional expansión del gasto público que conlleva la celebración de elecciones en la República Dominicana, otra variable importante de la economía que preocupa a la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE) es la sobrevaloración de los ingresos fiscales que se advierte en el presupuesto del 2016.

“Nos preocupa que hay una sobreestimación de los ingresos, tal como pasó este año (2015), que hubo una baja sustancial, porque si el presupuesto está hecho con una presión tributaria de un 15%, y estamos tal vez en un 13.9% o 14.1%, no es verdad que vamos a brincar así tan rápido”.

Osvaldo Oller Bolaños, presidente de la entidad, explicó que a esto se añade el incremento adicional del gasto gubernamental que se prevé sobre todo en el primer semestre del año, como resultado de las elecciones generales de mayo, a las que concurre como candidato el presidente Danilo Medina.

“En los últimos tres períodos electorales presidenciales se ha duplicado en términos absolutos el gasto corriente, el déficit en el presupuesto; entonces nos preocupa que esté sobrestimado (el ingreso) y nos preocupa lo del gasto”, apuntó el empresario.

Indicó que ante la falta de una Ley de Responsabilidad Fiscal u otros controles eficaces de los recursos del Estado, ANJE va a estar observando la evolución del gasto gubernamental durante el venidero período de campaña.

“Nosotros como asociación vamos a estar monitoreando el gasto público, por lo menos en el primer semestre” del año, manifestó Oller Bolaños en declaraciones al periódico Acento.

Corrupción versus inversiones

Oller Bolaños sostuvo que un punto prioritario en la agenda nacional es la implementación de una reforma profunda del cuestionado Poder Judicial, que contribuya a fortalecer la seguridad jurídica y recuperar el crecimiento de los flujos de inversión extranjera.

“Con eso buscamos que venga más inversión extranjera directa (IED). Estamos viendo cómo han ido bajando los indicadores de IED, porque es que las diferentes empresas temen entrar a un país donde hay descontrol de despilfarro, de la corrupción, donde no saben qué va a pasar con la justicia”, expresó.

El ejecutivo de la organización empresarial precisó que el sistema judicial requiere de reformas estructurales que garanticen su independencia y autonomía ante los demás poderes del Estado, incluyendo cambios en el esquema de elección de los jueces.

“Se han hecho varias reformas, pero vemos que los casos de corrupción no son sancionados, la percepción externa y local te dice que hay problemas en el sistema judicial (…) entonces tenemos que abocarnos a una serie de reformas nuevas y asegurarnos que realmente tengamos los jueces adecuados” en las diversas áreas del Poder Judicial, manifestó.

Según las expectativas de ANJE, otras reformas estructurales e institucionales que han sido postergadas y aguardan porque la clase política y los demás sectores se sienten este año a discutirlas son: la reforma del Código de Trabajo, las leyes Electoral y de Partidos y Agrupaciones Políticas, así como el Pacto Fiscal, que deberá abordarse tras la suscripción del Pacto Eléctrico.