SANTO DOMINGO, República Dominicana-. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) informó este miércoles que los problemas derivados del manejo inapropiado de los recursos suelo y agua en la República Dominicana han provocado sedimentación de la infraestructura hidráulica, reducción de la oferta de agua dulce, salinización, erosión de las playas y reducción en la productividad agrícola.
Carmelo Gallardo, representante del organismo en el país, señaló que la combinación de la expansión poblacional, la urbanización y el crecimiento económico del país limita la disponibilidad de agua para el 70% de la población que habita en zonas urbanas, y a la vez, afecta el abastecimiento de agua para agricultura y uso doméstico rural.
Estos datos fueron revelados durante el lanzamiento del proyecto “Catalizando un programa multi-sectorial de apoyo al manejo de Aguas y Suelos frente a la amenaza de cambio climático en la República Dominicana”, que será ejecutado por los ministerios de Agricultura y de Medio Ambiente y Recursos Naturales, con asistencia técnica de la FAO y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), durante un período de 18 meses y a un monto de 323 mil dólares.
De acuerdo con Francisco Dominguez Brito, Ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, el mayor compromiso que tiene el gobierno dominicano en este momento es garantizar la seguridad hídrica en las próximas décadas para la República Dominicana.
“Este compromiso ha sido expresado por el presidente Medina al establecer el Cuatrienio del Agua como su prioridad, designando este año como Año de Desarrollo Agroforestal e implementando proyectos muy concretos tendentes a garantizar una seguridad hídrica de cara al futuro”, aseguró el funcionario.
Mientras que el viceministro de Extensión del Ministerio de Agricultura, Leandro Mercedes, dijo que este proyecto permitirá restringir el uso de prácticas no sostenibles para evitar la destrucción de manglares, establecer una infraestructura de recuperación de aguas servidas, domésticas y de regadío que garanticen la producción de alimentos y permitan conquistar la soberanía y la seguridad alimentaria.
El representante del IICA Frank Lam, dijo que los agricultores son actores esenciales a la hora de garantizar la sostenibilidad del recurso suelo y agua, por lo que se requiere que implementen buenas prácticas que les permitan una mayor producción utilizando menos agua.
La iniciativa responde a una solicitud de asistencia técnica de los ministerios de Medio Ambiente y de Agricultura y de gremios de productores, preocupados por la situación de degradación y escasez que afecta a los suelos y las aguas en el país.
Entre las acciones del proyecto están el entrenamiento para técnicos extensionistas del Ministerio de Agricultura, la ejecución de un Plan de Acción Nacional actualizado con el apoyo de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (UNCCD) y fortalecimiento del Grupo Técnico Inter-Institucional.
En el acto de apertura del proyecto participaron además Alessandro Legrottaglie, representante del Banco Mundial; José Alarcón Mella, director Ejecutivo de la Mesa del Agua y Vera Boerger, oficial de Suelos y Aguas de la Oficina Subregional de la FAO.