SANTO DOMINGO, República Dominicana.- En el marco del Foro Zack 2017 sobre Financiamiento Climático, se llevó a cabo el panel Financiamiento en educación y cambio climático, con la finalidad de conocer e identificar nuevas oportunidades económicas para continuar expandiendo el tema en el país.
En el panel participaron Clara Ariza, representante del Instituto de las Naciones Unidas para la Formación y la Investigación (Unitar); Franklin Tejeda, de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco); Andrés de la Mercedes, director ejecutivo del Instituto Nacional de Formación y Capacitación del Magisterio (Inafocam), y Salvador Nieto, de la Comisión Centroamericana de Ambiente y Desarrollo (CCAD).
También, Carlos Lépiz, en representación de la Comunidad Educativa de Centroamérica y República Dominicana (Secc-Sica), y Daniel Abreu, punto focal del programa de Naciones Unidas de Aprendizaje sobre Cambio Climático (UN CC: Learn).
Los panelistas coincidieron en que la educación sobre cambio climático está en un buen momento, porque se han invertido importantes recursos en hacerla posible. Asimismo, no negaron que se necesita aunar más esfuerzos para lograr que todos los individuos del mundo puedan ser sensibilizados sobre el tema.
La representante Unitar resaltó la necesidad de ampliar los linderos de la enseñanza climática y de motivar que ese aprendizaje se aplique en el diario vivir: “Este es un tema de todas y todos y veremos el éxito materializado en su totalidad cuando todos apliquen las enseñanzas en el modo de vida y consumo”.
En ese mismo sentido el representante de la CCAD reforzó ese planteamiento, resaltando que “la educación es la principal arma contra el cambio climático”.
En tanto, el director ejecutivo de Inafocam resaltó que a la fecha República Dominicana ha graduado 3,200 docentes que fueron preparados para enseñar en las aulas sobre los temas relacionados con el cambio climático.
“La meta es llegar a unos 10 mil docentes en los próximos tres años, pero necesitamos explorar nuevas y mayores fuentes de ingreso para lograrlo, porque si los profesores aprenden, los estudiantes serán instruidos y podremos estrechar la brecha del conocimiento y la sensibilización sobre el tema”, expresó el funcionario.
Concluyeron que es el momento de empezar a idear más proyectos sobre educación y cambio climático y de identificar las instituciones de cooperación internacional que se puedan interesar y aportar a esa causa.