(Revista Forbes, México/Acento.com.do).- El problema sigue siendo el mismo. ¿Cómo alimentar de energía a toda una región, aprovechando mejor y cada vez menos los combustibles fósiles, sacando el máximo provecho a las fuentes de energía alternas?
Centroamérica está en una disyuntiva: busca dejar de depender del petróleo y sus derivados, pero al mismo tiempo alcanzar mejores niveles de producción en energías limpias. Varios proyectos están en marcha; tal vez entre ellos esté la respuesta para dotar de electricidad a los países del Istmo.
Crece la inversión verde
El Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) dio a conocer una inversión por 360 mdd para 2014. Los recursos serán dirigidos al sector de energías renovables para la región, lo que representa 25% de la cartera de préstamos de la entidad en el año.
Según datos del Sistema de Integración Económica Centroamericana (SIECA), con el apoyo de la Cooperación Internacional en Centroamérica se han ejecutado cerca de 300 proyectos de energía renovable, que comprenden energía solar, pequeñas centrales hidroeléctricas, energía eólica y bioenergía, entre otras.
Durante 2013 se aprobaron cinco proyectos de generación de energía limpia, por un monto total de 167 mdd, lo que permite proveer a la región de 106 MW adicionales de energía para el beneficio de más de 2.9 millones de usuarios.
Futuros socios
El Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) considera que el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) y los gobiernos de Corea, China y Japón serán socios en el financiamiento de la Fundación Banco Ambiental (Funban), brazo operativo del BanCO2, la primera institución financiera dedicada a mitigar el cambio climático y promover las emisiones cero de carbono.
Los recursos que el Minae pretende destinar a través de la Funban para acelerar su meta de carbono neutralidad, ascienden a 16 mdd; con ello se llevarán a cabo proyectos con los que se espera alcanzar la meta de compensar 37% de las emisiones de co2 para el año 2021, como la construcción de viviendas amigables con el medioambiente, créditos para la compra de paneles solares, sistemas de iluminación led y sistemas de refrigeración más eficientes para las casas habitación, cambio de la flota vehicular por automotores híbridos y para implementar programas para fomentar prácticas de agricultura sostenible.
El proyecto consiste en la construcción de una línea de transmisión eléctrica de 614 km entre Colombia y Panamá; desde la subestación Panamá ii (provincia de Panamá) hasta la subestación Cerromatoso (Departamento de Córdoba en Colombia), como complemento fundamental para la consolidación de la visión de integración regional.
El tendido eléctrico tendrá una capacidad de transporte de energía de hasta 400 megavatios; fue desarrollado con la tecnología conocida como transmisión de energía en corriente directa, la cual representa grandes beneficios desde el punto de vista técnico, económico y ambiental.
La gran red regional
La infraestructura del Sistema de Interconexión Eléctrica para América Central (SIEPAC), proyecto que consiste en la ejecución del Primer Sistema de Transmisión Eléctrica Regional que reforzará la red eléctrica de América Central, consiste en el diseño, la ingeniería y la construcción de una línea de transmisión eléctrica de 1,790 km de longitud de 230 kilovatios (kV) y 28 bahías de acceso en 15 subestaciones, a través de seis países de Centroamérica: Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá. Con la red ya instalada, la región dispondrá de una capacidad confiable y segura de transporte de energía de hasta 300 megawatts (MW).
Con un monto del proyecto de 6.51 millones de dólares (mdd), los cuales han sido aportados por los países a través del financiamiento de la banca multilateral, el SIEPAC tiene como propósito lograr la creación y puesta en marcha de un mercado eléctrico mayorista centroamericano denominado Mercado Eléctrico Regional (MER).
México y Guatemala se conectan
El Proyecto de Interconexión Eléctrica Guatemala-México fue concebido por la voluntad política de los gobiernos de ambos países y aunque se trata de una iniciativa bilateral, tiene un impacto directo en el MER.
Este programa consta de una red de transmisión eléctrica de 103 km, de los cuales 32 están en México y 71 en Guatemala (400 kV), un banco de transformación trifásico 225 megavolts-amperes (MVA), 400/230/13.8 kV y un banco de reactores de 50 megavolts-amperes- reactivos (MVAR); además, se contempló la expansión de dos subestaciones, una localizada en Tapachula, Chiapas, México, y la otra en Los Brillantes, en Retalhuleu, Guatemala. Esta labor permite efectuar transacciones de energía entres ambos países hasta por 200 mw, promoviendo la integración del sistema eléctrico de México con el de América Central.
Este enlace en el que México suministra a Guatemala 120 MW, opera desde el 2009 mediante un contrato de suministro; adicionalmente, otros 80 MW pueden ser operados en mercados alternos, y aunque la fecha de vencimiento del contrato llegó a su término el 30 de abril de 2013, se encuentra en un periodo de prórroga de dos años, el cual se establece en las condiciones originales. Este plazo, que entró de forma automática, fue establecido en esta modalidad para que coincida con el inicio del año estacional de Mercado Mayorista de Electricidad de Guatemala y para poder cumplir con la regulación del subsector eléctrico mexicano. La operación y el despacho obedecen a las normas del Administrador del Mercado Mayorista de Guatemala (AMM). Así, la energía solamente ingresa cuando el valor horario de la misma es más bajo que la energía de Guatemala, lo que representa seguridad en el manejo del riesgo. La expansión del servicio eléctrico en Guatemala requiere de una inversión en capital privado de 400 mdd.
El gas toma fuerza en República Dominicana
El gas natural como alternativa de combustible para generar energía en la región toma cada vez más fuerza. Actualmente el mercado está creciendo; pero en Centroamérica aún no existe un proyecto en firme para una terminal, se encuentran en República Dominicana o en Sudamérica. Sin embargo, hay planes de una planta en Panamá luego que se ganara un licitación para proveer energía.
Según Ricauter “Catín” Vásquez, director ejecutivo de General Electric, existe la necesidad de un lugar para almacenar, despachar y redistribuir gas. El país que ponga la terminal va a beneficiarse de las economías de escala, mientras que a los países que sean despachados en buques más chicos les subirá el costo.
Una empresa que tiene la mirada puesta en el proyecto es la estadounidense aes, que actualmente busca optimizar el uso del terminal de GNL de AES Andrés, ubicado en República Dominicana, el cual es parte de sus operaciones en la Unidad Estratégica de Negocio de México, Centroamérica y el Caribe.
La empresa, además, cuenta con un gasoducto de 34 kilómetros, lo que le permitiría a aes desarrollar un nuevo mercado de gas natural a nivel regional.
La empresa aes recientemente firmó un acuerdo para venta de 8% de participación accionaria en sus negocios en República Dominicana con el Grupo Estrella-Linda por 96 mdd. Esta transacción, programada para concluirse durante el cuarto trimestre de 2014, apoyaría los planes de expansión que incluyen la mejora de la planta de DPP, la cual produce gas de ciclo abierto con 236 mw de potencia instalada y con potencial de expansión a 358 MW en modo ciclo combinado.
La solución más viable
Schneider, compañía especializada en el manejo de la energía, trabaja en el segmento de red eléctrica como proveedor de soluciones a la industria y a las empresas de energía, mediante esquemas que permitan hacer un uso eficiente de esa energía, mejorar el sistema eléctrico que se tenga instalado actualmente en cualquier corporación, industria o país.
Esto puede ejemplificarse en los sistemas eólicos, en donde si bien no son fabricantes de la turbina, son especialistas en gestionar el manejo de la energía desde que sale la turbina, hasta que se recibe la energía en su casa.
La empresa cuenta con varios proyectos en El Salvador, así como uno bastante ambicioso en Costa Rica, en el sector fotovoltaico; en Nicaragua también realizan inversiones en el área fotovoltaica y eólica, al igual que en Panamá.
Hablar de crecimiento, señala Villa, es difícil, ya que no sólo se depende de las inversiones, sino de un marco regulatorio adecuado, entre otras cosas, pero al menos se espera un crecimiento del 30%, en lo que son sistemas de control de las redes eléctricas.
Para el 2050 se espera que se duplique el consumo de energía, por lo que el reto que tiene Schneider es disminuir a la mitad la emisión de carbón. Se trata de una empresa que busca utilizar menos de planeta pero producir más.
Innovación y luminiscencia
Sylvania es una empresa líder en el campo de la iluminación, dedicada principalmente a la tecnología led, que ilumina mejor y ahorra energía. “Tenemos alternativas desde fluorescentes que han estado presentes en el mercado por mucho tiempo”, indicó Tiago Pereira de Queiroz, director general para Centroamérica y el Caribe de Sylvania.
Actualmente esta compañía ha desarrollado productos sustitutos de la tecnología fluorescente, básicamente con el objetivo de tener tecnologías amigables con el medioambiente. En el caso de la tecnología led, por ejemplo, no usa mercurio, por lo tanto no contamina el ambiente y es 100% reciclable.
En materia de su participación en el sector energético, ha desarrollado luminarias que trabajan con paneles solares, las cuales no requieren energía eléctrica para su funcionamiento, pues usan la energía solar como medio de alimentación; además, está en proceso de desarrollar una luminaria que adicionalmente utiliza un pequeño motor eólico, “de tal manera que la luminaria estará encendida en las horas de la noche ya sea por acumulación de energía solar o de la energía eólica que se haya generado durante el día; para el cliente final reporta un gran beneficio económico en cuanto a inversión y mantenimiento, ya que optimiza costos y rendimiento, al no necesitar breakers ni cables para encenderse”, señaló Pereira de Queiroz.
AES presiona el interruptor y “alumbra” su chequera
La compañía de energía AES Corporation planea invertir en México 1,000 mdd en los próximos años para duplicar su capacidad de generación de electricidad. Además, buscará ingresar al nuevo mercado mayorista de energía del país.
Juan Ignacio Rubiolo, jefe de la unidad mexicana de aes, dijo en entrevista que la firma espera beneficiarse de la amplia reforma energética aprobada en agosto pasado y crecer más allá de sus tres plantas en el país latinoamericano, que generan en conjunto 1,050 megavatios.
“Tenemos el objetivo de duplicar la capacidad que tenemos en México”, dijo Rubiolo, y señaló que el enfoque de la empresa está en plantas que funcionan con gas natural.
AES genera y distribuye electricidad en una veintena de países; el año pasado obtuvo ingresos por 15,900 mdd.
Rubiolo dijo que la compañía también busca entrar al nuevo mercado mayorista de electricidad en México, que se encuentra dando los toques finales a las llamadas leyes secundarias de una reforma energética que pone fin al monopolio que durante décadas mantuvo la estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Se espera que comience la implementación efectiva de las modificaciones legislativas realizadas durante los últimos casi dos años.
Rubiolo dijo que aes sigue de cerca la creación de un nuevo operador independiente del sistema eléctrico, así como el acceso a datos técnicos y las normas de transparencia.
El directivo agregó que el ritmo de crecimiento de generación de electricidad después de la reforma dependerá, en gran medida, del acceso al gas natural.
“Nos gustaría estar más seguros en la forma en que van a permitir a los inversionistas privados tener acceso a gas y a la capacidad de los gasoductos”, concluyó.
Alianza eléctrica
En fecha reciente, el mandatario nicaragüense Daniel Ortega se reunió con empresarios brasileños para la formalización oficial de un acuerdo mediante el cual se da inicio a la construcción de la planta Hidroeléctrica Tumarín.
Esta hidroeléctrica, la más grande construida en la historia de Nicaragua, de 253 megavatios, iniciará su construcción en el primer trimestre de 2015 y entrará en operaciones en 2019. Por su parte, el Ministerio de Energía y Minas, señaló que esta obra permitirá al país exportar más energía hacia Centroamérica.
La inversión requerida para esta planta, ubicada en Río Grande de Matagalpa, Nicaragua, asciende a los 1,100 mdd, y su construcción que dará empleo directo a 5,000 trabajadores, estará a cargo de la estatal brasileña Electrobras y el conglomerado Queiroz Galvao.
Actualmente Nicaragua genera 55% de su energía a partir de fuentes renovables, además se prepara un Plan de Expansión Energética que proyecta generar 90% de electricidad a partir de fuentes renovables para 2020. Se espera que no sea la única alianza energética que tenga con algún otro país, pues la construcción de un posible canal ha despertado el interés por estrechar alianzas de algunos países, entre ellos México, quien se muestra muy activo con el país nicaragüense.