SANTIAGO, República Dominicana.-El corte de decenas de árboles históricos del Parque Juan Pablo Duarte de Santiago de los Caballeros, hecho por la Alcaldía sin autorización del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, sigue dando de qué hablar.
La información oficial es que las autoridades municipales de Santiago solicitaron a Medio Ambiente permiso para cortar 11 árboles en el parque Duarte, pero antes que llegara la autorización, las brigadas derribaron 35 árboles, de los 58 que censaron los técnicos de la Universidad ISA en un estudio fitosanitario del 2013.
Los datos obtenidos por Acento.com.do, dan cuenta de que en la evaluación técnica de la Universidad ISA se hicieron las recomendaciones de lugar para el proceso de remozamiento del parque Duarte, pero los contratistas de la administración del alcalde Gilberto Serulle y sus funcionarios actuaron en sentido contrario a las sugerencias técnicas.
“Hemos identificado que se eliminaron 35 árboles de los 58 contabilizados en el estudio antes de la tala. De esos 58 árboles, solo 2 estaban en condición de ser removidos por su estado crítico, 7 para remplazar por otras especies de igual valor ambiental”
En la oficina local de Medio Ambiente y Recursos Naturales, donde Yluminada Ortega, recibió la solicitud del permiso, el lunes 09 de marzo del 2015, a las 11: 42 minutos de la mañana, la cual no ha sido formalmente respondida aún, también aceptaron un cheque del Ayuntamiento como pago de los impuestos correspondientes por ese trámite, confirmó el arquitecto Marcos Gómez.
“Hemos identificado que se eliminaron 35 árboles de los 58 contabilizados en el estudio antes de la tala. De esos 58 árboles, solo 2 estaban en condición de ser removidos por su estado crítico, 7 para remplazar por otras especies de igual valor ambiental”, se establece en un reporte presentado por los técnicos de la Sociedad Santiago Somos Todos (SST), el cual está basado en el estudio del la Universidad ISA.
En el levantamiento hecho la tarde del miércoles 11 de marzo del 2015, por la arquitecta María Isabel Serrano Diná y otros técnicos de SST, en la zona devastada, también se establece que 22 especies debían recibir tratamiento debido al maltrato sufrido en podas anteriores, grietas y raíces apretadas.
Los resultados del censo dan cuenta de que de 27 árboles saludables que tenía el parque Duarte, se eliminaron 18.
De los recomendados para tratamiento y remplazo paulatino a mediano plazo, que eran 22, fueron eliminados 9, mientras que de los 7 árboles para remplazar se eliminaron 6 y los 2 sugeridos para remover por su estado crítico fueron removidos.
En esta solicitud que hizo el Ayuntamiento, entregada luego de empezar el corte de las especies, solo se menciona la necesidad de cortar 3 acacias amarillas, 5 laureles, 1 gravilea, 1 neem y 1 javilla. Es decir, que solicitó cortar 11 árboles, pero se eliminaron 35, en una franca violación a la ley 64-00.
“Las especies eliminadas fueron 7 frijolitos, 4 laureles, 4 rompevientos o cassias, 1 grevillea o gravilea, 3 cabras, 4 chacha, 1 neem, 3 caobas, 2 robles, 1 mango, 1 carolina, 1 jobo, 1 sauco amarillo, 1 javilla y 1 samán pequeño”, refiere SST, en su reporte, el cual fue presentado la noche del jueves 12 de marzo, en el consejo directivo de la Sociedad Ecológica del Cibao (Cibao).
Otros detalles
Según lo planteado por Serrano Diná, en el levantamiento, en el estudio de ISA, estableció que al alto valor ambiental de los árboles del Parque Duarte (microclima, sombra y filtración del aire) que dan al parque su importancia como pulmón del centro histórico, su atractivo visual, y también como referente histórico, los remplazos a corto y mediano plazo debían hacerse gradualmente y con especies del mismo valor ambiental.
“Sobre los ejemplares de Frijolito destacamos que el Parque Duarte es uno de los escasos referentes de ubicación de esta especie nativa en Santiago, además de su valor ambiental, sus frutos son alimento de aves, en especial de nuestra ave nacional la Cigua Palmera”, refieren los técnicos en el estudio.
Valoran la alteración del equilibrio ecosistémico y el valor ambiental de los árboles traerán graves consecuencias a nivel de microclima, anidación de aves y calidad ambiental/paisajística de la zona.