Hace varias semanas nos llegó a la redacción de Acento, una correspondencia de un lector, que tenía como destinatario nada más y nada menos que a LeBron James y fue publicada.
Luego de la salida de República Dominicana del Mundial de Baloncesto, este fanático nos envió este texto, solicitándonos que hiciéramos el mismo servicio con él, y nos vemos en la obligación quizás hasta patriótica de publicarla.
A continuación la carta:
Distinguidos señores de Acento,
Al ver que publicaron la carta que envió aquel fanático a LeBron James, espero que puedan hacer lo mismo con la mía.
Quien o más bien quienes quiero que la reciban, hace que sea un poco menos complicado y más accesible. Aquí va mi mensaje:
Este texto está dirigido a los nuevos patriotas, los que defienden nuestros colores sin armas y ponen nuestra bandera en alto. Es un mensaje de agradecimiento.
Admirados jugadores de la Selección Nacional de Baloncesto.
Gracias:
Porque aunque sea por esas horas en las que defendían a la patria en el tabloncillo, nos hicieron olvidar de la inseguridad, de lo caro de los colegios y de que los combustibles los frisan para no bajarlos.
Por demostrarnos que el trabajo, la organización y la visión, junto al esfuerzo y la entregan, dan resultados.
Porque en cada partido del Mundial de Baloncesto, cargaron en sus hombros a todos los dominicanos que gritábamos “¡vamo’ co&*o!” con cada punto, con cada triple de Francisco, con cada tapón de Eloy, o con cualquier rebote de Jack Michael.
Estoy –igual que todos los dominicanos– agradecido de todos, pero en especial:
Gracias Francisco, porque con tu liderazgo y garra, sacaste la cabeza por tu país.
Gracias Jack Michael, por nunca decirle que no a tu país. Porque has sabido evolucionar como jugador y como ser humano, ese ha sido tú mayor aporte al equipo.
De igual manera, gracias, Coronado, James, ‘Mañe’, Edward, Victor, Orlando, Eulis, Eloy, Edgar y Ronald.
Por supuesto, gracias FEDOMBAL y Southgate Sports, por trabajar de la manera correcta y poner resultados.
Pero no puedo ser mezquino, también hay que agradecer a quienes no estuvieron en el Mundial pero fueron parte de la evolución de la Selección. De una manera u otra, merecen algo de crédito.
Lo más importante es que estén conscientes de la importancia de lo que han logrado, han hecho que regrese el sentimiento de orgullo dominicano que mucha gente no recordaba que tenía. Eso vale más que cualquier medalla que hayan podido haber ganado.
En nombre del país, ¡gracias!
Firma, un fanático dominicano en nombre de un país orgulloso.