Santo Domingo.- La expresión latina “pro tempore”, que alude a la designación temporal o transitoria en un cargo, ha de escribirse enteramente en minúscula, con espacio intermedio, sin tilde y en cursivas, explica Fundéu Guzmán Ariza.
La República Dominicana es el país designado para ser anfitrión de la siguiente Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno a finales de 2022, por lo cual ocupará temporalmente la secretaría de la Conferencia Iberoamericana.
A propósito de ello, los medios dominicanos escriben la locución latina de distintas formas: “La República Dominicana asumirá la secretaría general pro témpore de la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno”, “RD asumirá secretaría protempore de la Cumbre de Jefes Iberoamericanos” o “El país recibirá la Secretaría Pro Tempore para ser sede de la cumbre en 2022”.
La “Ortografía de la lengua española” indica que las expresiones latinas deben tratarse como los demás extranjerismos y escribirse como se hacía en la lengua original (esto es, pro tempore, sin guion, sin tilde y sin unir los dos términos en una palabra), y en cursivas o, si no se puede usar este tipo de letra, entre comillas.
Conviene tener en cuenta, además, que el cargo que asume el próximo país anfitrión de la cumbre es la secretaría de la Conferencia Iberoamericana, de modo que sería más preciso referirse a esta denominación que a la secretaría de la Cumbre Iberoamericana.
Por lo tanto, en las frases citadas habría sido más adecuado escribir “La República Dominicana asumirá la secretaría pro tempore de la Conferencia Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno”, “RD asumirá la secretaría pro tempore de la Conferencia Iberoamericana” y “El país recibirá la secretaría pro tempore para ser sede de la cumbre en 2022”.
Fundéu Guzmán Ariza (www.fundeu.do) es una iniciativa de la Fundación Guzmán Ariza Pro Academia Dominicana de la Lengua, institución sin fines de lucro entre cuyos objetivos se encuentra impulsar el buen uso del español en los medios de comunicación de la República Dominicana. Cuenta con la asesoría de la Academia Dominicana de la Lengua, el Instituto Guzmán Ariza de Lexicografía y la FundéuRAE, así como con el patrocinio económico del bufete Guzmán Ariza.