Camilo Sesto ha decidido poner fin a 50 años de carrera musical con Camilo sinfónico. Con más de 40 producciones discográficas, varios discos de platino, cientos de composiciones y más de 180 millones de discos vendidos en todo el mundo, el rey del amor se reinventa por enésima vez.
Desde 1975 vive en la misma casa, un chalé en una urbanización de lujo en las afueras de Madrid, con jardín, piscina y rejas en las ventanas.
La adquirió después del éxito de Jesucristo Superstar, un musical que originó problemas con católicos exaltados y con el que demostró que su voz aguda era capaz de alcanzar cualquier registro.
Desmontó también el mito del "Camilito guapo" con el que le tildaban algunos detractores. Cantante, compositor y productor musical, sus obras han cubierto géneros como la balada, el pop y el rock. Algo de mí, lanzado como un single en 1970, se convirtió inmediatamente en número uno. Fue su primer éxito.
Su capacidad creativa se reflejó durante las décadas de los setenta y los ochenta, en las que llegó a publicar un disco al año.
¿Le faltaba el acompañamiento orquestal para completar una vida de éxitos artísticos? Era el momento ideal. Ya lo había hecho todo, pero no tenía un elepé sinfónico. Las canciones daban de sí para eso y mucho más.
Chile, Perú, Colombia, Puerto Rico, México, Estados Unidos e incluso Japón se han rendido a sus pies. ¿Siente que ha sido mejor público que el español? No sé por qué me quieren tanto. Lo cierto es que hay un respeto brutal por mi música. En Japón me fijaba en la nuca del que trabajaba conmigo porque de cara los veía a todos iguales. Me decía: “Esta nuca es la que debo seguir para no perderme”.
¿Cuál es su visión de la música actual? ¿Y de la forma de escucharla, con listas de reproducción en el móvil? Bueno, ahora ponen una canción y ya no la escuchan más; la música de ahora, con perdón, es una mierda. A qué hora del día la escuchas para que te levante, te anime o te estimule. Pero bueno, yo a los jóvenes les digo que, si tienen éxito, que lo aprovechen, que eso no pasa todos los días. A mí me gustaba Antonio Molina desde que era pequeño, ese para mí sí era un gran cantante.
La entrevista completa en el siguiente enlance: