SANTIAGO DE LOS CABALLEROS, República Dominicana.- En quince años ha visto fracasar a 19 generales y ha registrado 22 cambios de directores locales de la Policía.

Unos se han dedicado a confiscar bocinas en los colmados, otros a imponer códigos de vestimentas a las mujeres que acuden a la policía en busca de algún servicio ciudadano, y otros han hecho más promoción personal que los políticos profesionales.

Mientras tanto, la ciudadanía sigue sufriendo la ineficiencia policial y se queja de la inseguridad que afecta a Santiago en los espacios públicos, en las zonas de comercio y en los hogares.

Esta es la III parte de esta serie especial de Acento.com.do

Francisco Abreu Montes de Oca

El general Francisco Abreu Montes de Oca pasó rápido sin glorias pero con muchas penas en su gestión como responsable de la Dirección Cibao Central de la Policía Nacional, sobre todo para la ciudad de Santiago.

No pudo garantizar  la tranquilidad  en su estada  de siete meses y 3 días en la llamada Ciudad Corazón.

De su gestión, de triste recordación, resaltan la muerte del joven promotor de espectáculos Junior Félix (Huracán), asesinado el 23 de febrero del 2009.

El 20 de marzo, para espanto de toda la ciudadanía, fueron hallados  en bolsa plástica, los cadáveres de dos personas, en las Tres Cruces de Jacagua, la Policía identificó a las víctimas como Eduardo Plácido Padilla y Jorge Luis Acevedo Mena.

En Navarrete aún reclaman el esclarecimiento de la muerte del joven de 21 años de edad, José Aquiles González, baleado y luego arrastrado por agentes policiales. Este hecho ocurrió el 17 de junio del 2009

En esa misma fecha, murió tras varios disparos durante un presunto asalto el acordeonista Máximo Dionisio de la Rosa (Dioni).

Otro asesinato durante la administración del general Montes de Oca tuvo como víctima al promotor  artístico Alfred Diloné Abreu, asesinado en la urbanización Cerro Alto, el 6 de mayo del 2009. Diloné era el manejador del reconocido grupo Braho.

Asimismo, la muerte de José Francisco Ramírez (Kico), cuyo cuerpo fue hallado descuartizado  y esparcido por distintos puntos del Centro Histórico, el 27 de marzo del 2009.

Otro crimen ocurrido durante la gestión de Monte de Oca fue la   muerte del taxista Andrés Florentino, unidad 14 de Taxi Monumental, quien  presuntamente habría sido asesinado por pasajeros que contrataron sus servicios la noche de 29 de marzo del 2009, en el sector Jardines del Oeste.

En Navarrete aún reclaman el esclarecimiento de la muerte del joven de 21 años de edad, José Aquiles González, baleado y luego arrastrado por agentes policiales. Este hecho ocurrió el 17 de junio del 2009.

Montes de Oca  fue quien  encabezó un operativo en Licey y presentó un saco de armas en público, las cuales  presuntamente habrían sido incautadas a los dirigentes populares, pero después de un intenso despliegue mediático, la Policía no sometió a la justicia a ninguna persona.

Un caso especialmente conmovedor fue la muerte de la joven de 21 años Kenny Confesora García Luzón, alcanzada por un disparo en medio de una trifulca, en las gradas d la Arena del Cibao, el 25 de abril del 2009.

El responsable de disparar fue señalado como el sargento Santo Rodríguez González, de la Policía Nacional, quien  estaba allí en un servicio contratado por la empresa de seguridad privada Proninja, propiedad del coronel de la Policía Nacional, Juan Guzmán Badía.

Aunque en un vídeo se ve al policía disparar hacia las gradas donde estaba la joven que resultó muerta, el caso se quedó en el olvido.

Tras registrarse decenas de muertes violentas, en muchas de las cuales participó la Policía, el general Montes de Oca fue obligado el 20 de agosto del 2009 a devolver la antorcha a quien se la había entregado el 17 de enero de ese mismo año, el general Eduardo Alberto Then.

Populismo como intento de acercar la PN a la población

El general de brigada Juan Ramón De la Cruz Martínez, quien ya tenía experiencia en el trato hacia los medios de comunicación y la ciudadanía por su paso por la Dirección de Relaciones Públicas de la Policía Nacional, además de haber dirigido otras comandancias en diversas regiones del país,  llegó a Santiago con la idea de lavar la imagen de una institución que vivía momentos de pérdida de confianza y crédito público.

General Juan Ramón de la Cruz Martínez (fallecido)
General Juan Ramón de la Cruz Martínez (fallecido)

Juan Ramón De la Cruz Martínez, de quien amplios sectores nacionales lamentaron su trágico fallecimiento en un accidente de tránsito, el 13 de enero del 2014, en Bonao, trató de mantener relaciones armoniosas y cercanas con los barrios populares.

Para lograr esta meta se valió de su destreza y facilidad de palabra, su trato afable y la puesta en práctica de encuentros comunitarios. En un ejercicio que muchos calificaron de populista, llevó a cabo un "compartir" comunitario con un "cocinao" en varios barrios populares, en momentos en que se llevaba a cabo una huelga general liderada por el FALPO en reclamo de atención del gobierno a las comunidades más pobres de Santiago.

No obstante, no pudo controlar la delincuencia ni la inseguridad. Durante su gestión se produjeron crímenes que estremecieron a Santiago,  como la muerte del joven estudiante de economía de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), Alfredo  Gómez (Yito), asesinado por agentes policiales Swat en el cruce de  Moca-Canca la Reyna, el 10 de octubre del 2010. Una semana después murió baleado el cabo Expedito Báez, en Navarrete, durante una protesta para exigir reclamaba  justicia por la muerte del estudiante Gómez (Yito).

El 17 de octubre del 2011, falleció el recluta Luis Manuel Cabrera Peralta, (Pelukita), baleado por un compañero suyo, de "manera accidental", según la versión de la Policía. El responsable de disparar el arma de fuego fue el también alistado Franlkyn Guzmán González,  hijo del coronel de la Policía Juan Guzmán Badía, hoy vocero del Comando Cibao Central.

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Durante la gestión de De la Cruz Martínez fue asesinado el ciudadano español Pablo  Franjul, cuando caminaba  próximo al parque, Eduardo León Jimenes. Asimismo, fue asesinado el transportista Ismael Sandoval, secretario general, de la ruta G, quien fue baleado tras su salida del club Mambuiche, de Gurabo, el 10 de junio del 2010.

También  fueron asesinados los colombianos,  Carlos Arturo  Pedraza García, Serafín Alvarado Bautista y Héctor Elías Peña García, así como el venezolano, Silvio César Sánchez Monterrosa, el 26 de agosto del 2011, en una casa, próximo a los Cerros de Gurabo, en un caso que se atribuyó al narcotráfico internacional, y que nunca fue aclarado del todo.

También ocurrió la muerte a tiros del vigilante Antonio Vargas, de 39 años de edad,  que prestaba servicio en una sucursal de la cooperativa de ahorros y créditos San Miguel, en Hato del Yaque.

Asimismo, la muerte de la joven  Ana Sunilda Gil Báez, impactada  por un disparo de un policía de los llamados Swat. La joven, presuntamente, trataba de disolver una reyerta entre varias personas en la comunidad de Matanzas, y el agente disparó sin medir las consecuencias.

Como un punto a su favor se registra que el 3 de octubre 2010 el jefe de la Unidad Antinarcóticos de la Policía Nacional en Santiago, coronel Franklin A. Peralta González, fue apresado y enviado a prisión acusado de encabezar una banda que produjo un  presunto “tumbe” de drogas en el municipio Licey al Medio, lo que ocasionó varias muertes violentas.

Además del oficial policial, se apresaron a otra 13 personas.

El 25 de marzo del 2011 encabezó un operativo entre los  choferes del concho y recolectó decenas de machetes, todo con previa invitación para cobertura de los medios de comunicación.

Un hecho que afectó su gestión fue que en diciembre 2010, su hijo Juan Ramón de la Cruz Taveras, teniente coronel, fue acusado de agredir a la sargento Mildred Cepeda, quien se habría negado a entregarle de manera irregular un detenido en el cuartel del Ensanche Espaillat.

Un protegido del poder político

Si se quiere poner un ejemplo  de un director de la Dirección Cibao Central de la Policía Nacional bien conectado políticamente, hay que mencionar al general de brigada Francisco Rhomel López.

Este oficial dirigió esta comandancia durante 11 meses y 20 días. Llegó  revestido del poder político, vínculos familiares.

General Francisco Rhomel López.
General Francisco Rhomel López.

El general López puso de moda las entregas de canastillas a mujeres embarazadas. Estos operativos de entrega de dádivas los hacía en compañía de su señora esposa Thelma Eusebio, una funcionaria bien enllavada en las alturas del peledeísmo, y de algunos  legisladores.

La Soga y otros escándalos

La  gestión Rhomel López  estuvo marcada por los  escalándolos internos, al punto de que agentes policiales del departamento de Homicidios montaron una huelga, el 3 de noviembre del 2011, por diferencias entre el coronel de investigaciones criminales, Gabriel  Melo Santos, y el responsable de Homicidios, Rafael Salcedo.

En su gestión se produjo la deserción o desaparición (hasta hoy) del  teniente Fernando de los Santos (La Soga), conocido por su crueldad y la larga lista de ejecuciones y torturas de ciudadanos que se le atribuyen.

Tras su desaparición, debido a que las autoridades del Ministerio Público lo requerían por crímenes que se le imputan, La Soga supuestamente fue buscado por investigadores policiales “hasta debajo de las piedras”. La última ocasión en que se supo de él fue el 22 de octubre del 2011. De los Santos (La Soga) es señalado como responsable de  una banda interna de la Policía que mató a decenas de personas por encargo y a cambio de dinero.

Fernando de los Santos (La Soga)
Fernando de los Santos (La Soga)

Asimismo, durante la gestión de Rhomel López se informó en principio que el cantante de música típica Narciso Francisco fue  apresado con drogas. Luego fue liberado sin cargos. Se destapó entonces el escándalo de que el artista habría obtenido su libertad pagando RD$ 50, 000.00, al segundo teniente, Samuel Pascual Pérez, al sargento mayor Ramón Antonio Reyes Jiménez (Azulito), al mayor Simplicio Santos Laureano, al mayor Llulis De Jesús Guzmán Díaz y al sargento Kelvin De León Montero,según reveló una investigación interna de la Policía.

El invierno del general Rhomel López

La ciudad de Santiago comenzó a asistir a casos de asesinatos con una frecuencia y una expresión de crueldad nunca vistas, lo que mermó la popularidad del general Rhomel López.

El 26 de noviembre del 2011, se reportó la muerte de  Inés de la Cruz, de 35 años, empleada doméstica de la familia Jiménez Jiménez,  en la urbanización Cerro Hermoso.

Reclamo de paz y seguridad en el barrio Hato Mayor, de Santiago.
Reclamo de paz y seguridad en el barrio Hato Mayor, de Santiago.

Días después fue  encontrado en la Loma del Chivo, de la comunidad de Jacagua, el cadáver del raso de la Policía Malvin Miguel Henríquez De la Cruz, un mes después que sus familiares notificaran sus desaparición.  El cuerpo tenía un impacto de bala en la frente, la Policía  reportó que se trató de un suicidio, versión que nunca convenció a la familia ni a la opinión pública.

El 13 de diciembre del 2011 fue hallado asesinado el ciudadano holandés, Johanne Willen Den Dulk, de 53 años, en su residencia, en Guasumal, Tamboril. Este caso se atribuyó a ladrones.

El 14 de diciembre del 2011 fue hallada muerta en el canal de riego de Estancia del Yaque, con señales de violencia, la joven Miosotis Cabrera Hernández, de 26 años, quien laboraba como promotora, en un centro comercial.

El 6 y 14 de diciembre del 2011 las autoridades levantaron dos cadáveres de las aguas del río Yaque del Norte.

El 15 de diciembre se halló el cadáver del niño, JhonWilmy Ovalles Martínez (Yimmy), en un canal de riego de la comunidad La Delgada-Villa González, con signos de violencia.

La gente se llenó de miedo y no quería salir de su casa más allá de lo estrictamente necesario.

Perdido su "encanto" frente a la ciudadanía, el general Rhomel López, fue sustituido por el general Héctor García Cuevas.

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