Las actividades de esta ciudad se encuentran paralizadas, acogiéndose al llamado formulado por numerosas organizaciones comunitarias que exigen del gobierno el cumplimiento de promesas de obras de interés general y de mejoría servicios.
El paro convocado por 46 horas se cumple de manera total en el comercio, al igual que en el trasporte público.
En la parte céntrica de la ciudad se observaron algunos vehículos privados circulando. Empero en las principales avenidas y barrios populares el transporte público se encuentra totalmente paralizado.
En un recorrido realizado por las principales arterias comerciales se comprobó que el cierre de los establecimientos es total, incluyendo las céntricas calles San Francisco, Papi Olivier, Ingeniero Guzmán Abreu, Billini, entre otras.
Efectivos del Ejército y de la Policía, han sido apostados en distintos lugares, en previsión de desórdenes. En la tarde de ayer estudiantes de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y del liceo Ercilia Pepín protagonizaron movilizaciones en respaldo a la huelga.
Hasta media mañana no se han reportado incidentes, aunque en las primeras horas de la mañana se escucharon detonaciones de bombas de fabricación casera en distintos sectores barriales.
La avenida Bienvenido Fuertes Duarte, en el sector San Martin de Porres, luce repleta de escombros y algunos neumáticos incendiados.
Entre las organizaciones convocantes del paro por 48 horas figuran el Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO); la Unión de Junta de Vecinos, La Federación Campesina de Cuesta Blanca, la Federación de Estudiantes, entre otras entidades aglutinadas en la Coordinación del Movimiento Popular.
Los reclamos que formulan son la construcción de la avenida de circunvalación, la construcción del Hospital de Especialidades Médicas del Nordeste; la construcción de la Plaza de la Cultura, el asfaltado de las calles de diversos sectores barriales, instalación del circuito 24 horas para los sectores Vista al Valle, Pueblo Nuevo, San Vicente, Los Maestros y Ugamba, entre otros.
También exigen poner fin a los problemas que genera la llamada “Cañada del Diablo”, la terminación de los trabajos de construcción de escuelas y el politécnico, cuyos trabajos actualmente están paralizados.
También reclaman la entregan de los locales de la Plaza Comercial Juan Pablo Duarte a los comerciantes que perdieron sus establecimientos en el siniestro que consumió las instalaciones del llamado Mercado Viejo.
Raúl Monegro, vocero del Frente Amplio de Lucha Popular (FALPO), advirtió que la lucha no será detenida hasta que el Presidente Danilo Medina cumpla con la ejecución de las obras, las cuales prometió en la pasada campaña electoral.