Santo Domingo, 29 jul (EFE).- El Gobierno dominicano respondió hoy a la Organización de Estados Americanos (OEA) que no requiere de su "intermediación" para resolver la crisis migratoria con Haití porque actualmente "no existe un conflicto que amerite tal cosa".

"La República Dominicana reafirma que no ha solicitado ni requiere de la intermediación de la Secretaría General de la OEA por entender, primero, que no existe actualmente un conflicto entre ambos países que amerite tal cosa", afirmó en una rueda de prensa en la sede de la Presidencia Nacional, el canciller Andrés Navarro.

Segundo, dijo, que la política migratoria dominicana y sus mecanismos de aplicación "son de la exclusiva competencia de nuestro Estado y no son objeto de negociaciones".

En tercer lugar, aseguró, que existen los mecanismos de diálogo bilateral con Haití, que se podrán restablecer, afirmó, "tan pronto como el gobierno haitiano deponga su actitud de desacreditar a la República Dominicana, como mecanismo de evasión de su responsabilidad para con la población haitiana".

"Finalmente, el gobierno de la República Dominicana reitera su compromiso de seguir trabajando por la debida identificación y regularización de quienes habitan en su territorio, y por la protección y garantía de los derechos de todas las personas", subrayó.

Navarro se refirió al informe presentado hoy por el secretario general de la OEA, Luis Almagro, elaborado por la misión de la organización que visitó este mes el país y Haití para evaluar la crisis migratoria que enfrenta a ambas naciones.

La OEA se ofreció hoy a facilitar un diálogo entre la República Dominicana y Haití por la crisis migratoria y recomendó que se organice un encuentro bilateral para encontrar "vías de solución a las dificultades presentes".

La oferta la hizo Almagro al presentar en una sesión del Consejo Permanente el informe con observaciones y recomendaciones elaborado por la misión del organismo que visitó la República Dominicana y Haití este mes.

En el capítulo de observaciones del informe, la misión de la OEA reconoce la existencia de desplazados que "sobreviven en condiciones precarias" a causa de la crisis migratoria entre la República Dominicana y Haití, y alerta también de que hay personas "en riesgo de no contar con ninguna nacionalidad reconocida".

Asimismo, la misión asegura que es "difícil" confirmar las cifras de personas que han cruzado la frontera entre los países.

El informe reconoce, además, que la República Dominicana "tiene el derecho, como país soberano, de establecer e implementar su propia política migratoria".

A la vez, las autoridades de Haití "reconocen este derecho" pero señalan que "cualquier traslado de personas debe llevarse a cabo según los estándares internacionales previamente establecidos y consensuados", según recoge el informe.

En sus declaraciones, Navarro dijo que el país reconoce la labor técnica realizada por el equipo de la misión de la OEA, pero señaló que no existe correspondencia entre el contenido descriptivo del informe, y el conjunto de conclusiones y propuestas que plantea.

La parte descriptiva del informe, aseveró, "es una clara demostración de que las acusaciones que se han vertido durante las últimas semanas contra la República Dominicana son falsas e infundadas, en específico las referidas a una inexistente crisis humanitaria y de supuestas violaciones sistemáticas de derechos humanos".

Navarro afirmó, que las conclusiones y recomendaciones "parten de premisas no sustentadas por el propio informe, por ejemplo, retomando la mencionada situación humanitaria y sugiriendo la necesidad de una mediación entre ambos países para resolver "disputas migratorias". EFE