Washington, 13 nov (EFE).- El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, exigió al Congreso estadounidense que "considere" a la isla en la reforma fiscal que se está negociando, así como en los paquetes de ayuda destinados a la reconstrucción tras los recientes huracanes.
"Lo importante de todo esto es reconocer que Puerto Rico es parte de Estados Unidos, si el objeto de la reforma es que se creen más empleos, si Puerto Rico no es considerado, terminaría mucho peor de lo que está hoy día", indicó el gobernador tras ser preguntado sobre la preocupación en la isla ante la reforma fiscal en ciernes.
"Si se olvida a Puerto Rico en este proceso, estaríamos dando un cantazo; el mensaje principal, entre tanta variación (de propuestas) que hay (en el Congreso) es que Puerto Rico es Estados Unidos", agregó.
Rosselló, que compareció ante la prensa en la Asociación Nacional de Gobernadores (NGA) de Washington, destacó el trabajo en este sentido de la comisionada residente de Puerto Rico Jenniffer González-Colón en el Capitolio.
"En términos de la política pública de la reforma contributiva, la comisionada y este servidor pensamos que Puerto Rico debe ser tratado como Estados Unidos, si se quiere crear más empleos en Estados Unidos y traer más industria, que Puerto Rico esté dentro y que sea considerado y que esté en una mejor posición", subrayó.
El gobernador y la comisionada también urgieron al Congreso y a la Casa Blanca a que tengan en cuenta la devastación histórica que han causado en la isla los huracanes Irma y María en los paquetes de ayuda destinados a las últimas catástrofes naturales en el país.
En un primer informe de evaluación de daños, enviado a la Casa Blanca y el Congreso, Rosselló pidió más de 94.000 millones de dólares en asistencia para "reparar y reconstruir" la isla.
"Este informe no va a ser quizás el final, vamos a continuar con la evaluación de daños", precisó la comisionada, para insistir en que no solo se trata de reparar, sino también de "reconstruir" de manera que la isla termine con una "mejor tecnología e infraestructura" que antes de los huracanes.
La Gobernación de Puerto Rico, tras un trabajo "diligente" de inventario de daños, ha determinado que estos superan los 94.000 millones de dólares y, por tanto, piden este monto a la Casa Blanca y al Congreso, repartido para las distintas áreas afectadas.
Se trata, entre otras, de "vivienda, energía eléctrica, agricultura, infraestructuras, servicios sociales, sanidad y educación", enumeró Rosselló.
Todo ello lo ha especificado en un documento enviado a la Casa Blanca y al Congreso que ha sido elaborado por las agencias de su Gobernación en colaboración con la Fundación Ford, el estado de Nueva York y diferentes universidades.
"Este es un paso clave hacia adelante, no solo queremos reconstruir a como estaba antes (de los huracanes) sino que queremos una isla más fuerte y mucho más resiliente", dijo, para subrayar que se compromete a que "este sea el esfuerzo de recuperación más transparente de la historia de Estados Unidos". EFE