Ciudad del Vaticano, 24 dic (EFE).- El papa pidió hoy paz para todo el mundo, en especial para aquellas pueblos que sufren conflictos, y que sean liberadas los religiosos y fieles secuestrados, en su mensaje tras el rezo del Ángelus desde el palacio pontificio en plaza de San Pedro.

Francisco recordó que hoy los católicos celebran el nacimiento del "Príncipe de la paz" e invocó "el don de la paz para todo el mundo".

El pontífice renovó su llamamiento para que en ocasión de la Navidad, "las personas secuestradas, sacerdotes, religiosos y religiosas y fieles laicos, puedan ser liberados y volver a sus casas".

También instó a los fieles a que, en estas horas que preceden la Navidad, se detengan en silencio en oración delante del Nacimiento para "adorar en el corazón del misterio la verdadera Navidad, la de Jesús que se acerca a nosotros con amor, humildad y ternura".

"Acordaros también de rezar por mi", pidió asimismo Francisco.

Esta noche, el papa presidirá en la basílica de San Pedro la misa del Gallo, la quinta de su pontificado.

Pidió oraciones por la población de Mindanao

El papa pidió además oraciones por la población de la isla de Mindanao, en Filipinas, que ha sufrido una tormenta tropical que ha causado al menos 200 muertos y decenas de desaparecidos, y enorme devastación.

Francisco oró por la población de Mindanao y pidió que "Dios acoja las almas de los difuntos y dé conforto a todos los que sufren".

El papa pidió a los fieles reunidos en la Plaza de San Pedro que rezaran por toda esta población y guardó silencio durante algunos segundos.

La tormenta tropical Tembin salió hoy de Filipinas reforzada hasta la categoría de tifón y tras dejar detrás de sí alrededor de 200 muertos y decenas de desaparecidos en la isla de Mindanao, en el sur del país asiático. EFE