Ciudad de Panamá, Panamá.- La ONU instó este lunes a las autoridades de El Salvador, Honduras y México "a intensificar los esfuerzos para la investigación" de la desaparición y asesinato hace 10 años de 72 migrantes en el estado mexicano de Tamaulipas, conocida como "la masacre de San Fernando".

Esa investigación debe reforzarse "con la cooperación y participación de los familiares de las víctimas y organizaciones de la sociedad civil, a fin de garantizar el acceso a la verdad y la justicia", dijeron las Oficinas del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) en México, Honduras y la Oficina Regional para América Central y República Dominicana.

Tras 10 años de la masacre las oficinas de ONU-DH "reconocen los esfuerzos de las autoridades mexicanas para avanzar en la investigación de los delitos cometidos contra personas migrantes y la búsqueda de estas que hayan desaparecido, y también de los países de Centroamérica y México para impulsar los procesos de identificación y repatriación de restos de las víctimas.

Pero "se requiere ahora de esfuerzos adicionales para atender las demandas y reclamos de los comités de familiares de personas migrantes desaparecidas de la región", resaltaron los entes internacionales.

"ONU-DH llama a los Estados de la región a retomar los compromisos asumidos con el Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular (…)  incluyendo establecer canales de coordinación transnacionales (…) para la búsqueda de migrantes desaparecidos y para facilitar la identificación de restos y la entrega digna a las familias, así como el intercambio de información".

Los organismos de Naciones Unidas expresaron "su solidaridad con todas las víctimas y familias" afectadas, y reiteraron "su disponibilidad para seguir acompañando los procesos de búsqueda, identificación e investigación, así como todos los esfuerzos conjuntos para acceder a la verdad, la justicia, la reparación integral y la implementación de garantías de no repetición".

LA MASACRE DE SAN FERNANDO

Los entes de la ONU recordaron que el 24 de agosto de 2010 las autoridades mexicanas tuvieron conocimiento de la desaparición y asesinato de 72 personas migrantes en San Fernando, Tamaulipas, México.

Entre las víctimas, asesinados y sus restos abandonados a la intemperie, había 24 hondureñas, 14 salvadoreñas, 13 guatemaltecas, cinco ecuatorianas, tres brasileñas y una persona de la India.

"Este caso evidenció la situación de extrema vulnerabilidad en la que se encuentra la población migrante en su tránsito por los países de la región y las graves violaciones de derechos humanos a las que con frecuencia se enfrenta. Hechos similares se repitieron en San Fernando en 2011 y en Cadereyta, Nuevo León, México, en 2012″, dijeron este lunes las oficinas de la ONU.

Destacaron los esfuerzos de investigación de México a través de la creación de la Comisión Forense, la Unidad de investigación de delitos para personas migrantes de la Fiscalía General de la República, y el Mecanismo de Apoyo Exterior de Búsqueda e Investigación, con la participación de las organizaciones de la sociedad civil y las familias de las víctimas.

De acuerdo con los datos oficiales, las autoridades mexicanas han detenido hasta el momento a unas 80 personas relacionadas con el asesinato de los 72 migrantes.

Organizaciones civiles colocaron el sábado pasado frente a la embajada estadounidense en la Ciudad de México un "antimonumento" en forma de +72 para conmemorar la "masacre de San Fernando".

En un comunicado, las organizaciones afirmaron que a este número que simboliza a las víctimas de esa masacre le han añadido el + para que se tomen en cuenta los miles de migrantes que han sido desaparecidos y asesinados durante su paso por el país con dirección a Estados Unidos.

Señalaron que Estados Unidos, frente a cuya embajada ha sido puesto el 'antimonumento' también es responsable porque no solo durante la gestión del presidente Donald Trump, persigue y criminaliza a los migrantes. EFE