Quito, Ecuador (EFE).- El presidente de República Dominicana, Danilo Medina, señaló este miércoles que recibe la presidencia temporal de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) de manos de Ecuador, en momentos de "enormes desafíos" para la región y el mundo.
"Asumimos la presidencia pro témpore en un año en el que el mundo y América Latina, en particular, afrontan inmensos desafíos", dijo al señalar entre ellos a situaciones económicas, sociales, ambientales e ideológicos.
Es, dijo, "una suma inmensa de desafíos y de dificultades. Es una red compleja con tantos problemas entrelazados, que solo la política podrá resolverlas", indicó en su discurso de posesión en la sede la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), en Quito al término de la IV cumbre de la Celac.
Opinó que "más que nunca" el mundo pide una salida política, que "no vendrá dada por los mismos métodos y los mismos caminos".
"Es en este escenario en que la Celac, en lugar de sentirse pequeña, debe sentirse grande; en lugar de sentirse desplazada del eje de las soluciones, de los problemas del mundo, debe sentirse fuerte, creativa como para buscar respuestas", añadió.
"Ahora es el momento de reflexionar sobre los próximos pasos, sobre nuestro papel en una realidad cambiante, pero que necesita más que nunca esa visión humanista, innovadora y única que sumamos todos los miembros de esta comunidad"
Señaló que el objetivo de la Celac ha sido siempre trazar una visión de paz, igualdad, solidaridad y crecimiento con justicia social.
"Ahora es el momento de reflexionar sobre los próximos pasos, sobre nuestro papel en una realidad cambiante, pero que necesita más que nunca esa visión humanista, innovadora y única que sumamos todos los miembros de esta comunidad", indicó.
Consideró que es el momento de hacer que la voz de la Celac se escuche en aquellos espacios internacionales que sean de mayor relevancia "para llevar soluciones a los grandes problemas que aún aquejan a las grandes mayorías populares" en la región y en gran parte del mundo.
Dijo que pese a los grandes avances logrados por la región, "aún son grandísimos los retos" que enfrenta.
Por ello, agregó, el desafío es urgente y doble: buscar respuestas para los problemas de la región y "ayudar a abrir nuevos caminos para el mundo".
Indicó que la región es una de las áreas de más desigualdad del mundo y que ese problema es uno de los desafíos que deben afrontar.
Se refirió también a la importancia de afrontar el problema de las drogas.
"Desde Suramérica hasta México, pasando por Centroamérica, la República Dominicana y todo el Caribe, el tránsito de drogas con destino a su consumo mayoritariamente en los países ricos es un desafío constante a la estabilidad de nuestra democracia y a la vida de nuestros ciudadanos", señaló.
Por ello, agregó, urge que en el marco de las Naciones Unidas se encuentren políticas y medidas sobre droga que avancen en enfoques para la reducción no solo de la oferta sino también, y muy especialmente, de la demanda de drogas.
"Ha llegado la hora de que los países más afectados por los flujos del narcotráfico hagamos oír nuestra voz", señaló.
Se comprometió a trabajar para que en 2017, cuanto entregue la presidencia del grupo, la Celac sea un espacio "aún mas integrado, más operativo y aún más reconocido en el escenario global".
La Celac está integrada por Antigua y Barbuda, Argentina, Bahamas, Barbados, Belice, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, República Dominicana, Dominica, Ecuador y El Salvador.
Además, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Santa Lucía, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Surinam, Trinidad y Tobago, Uruguay y Venezuela. EFE