SANTO DOMINGO, República Dominicana.-Al inicio resuena una risa nerviosa que causa estupefacción por venir de una joven que se enfrenta sin miedos a un poder como el que representa la Procuraduría General de la República.
Esta joven se amedrenta al lente de la cámara tras pedírsele que hable de su vida, pero no ante ataques con químicos ni posibles agresiones físicas por luchar de manera temeraria contra los actos de corrupción.
Heidy Adón, quien junto a otros marcó un precedente en el país, humildemente se define como una joven normal que quiere algo diferente para la República Dominicana. “Soy como cualquier joven que baila, sale y hace cualquier cosa como una chica normal”.
“Miedo tenemos cuando salimos de la casa que nos pueden violar, atracar o dar un tiro¨
Dice no tener miedo a los poderes, porque más ha temido a la frustración que le han traído como consecuencias las agresiones a sus derechos.
“Miedo tenemos cuando salimos de la casa que nos pueden violar, atracar o dar un tiro. Heidy Adón ha sido atracada tres veces y después que uno pasa por esos momentos en que duras meses que nadie te puede tocar por atrás o que no puede escuchar un motor que te pase por el lado porque sientes que te van a atracar, ¿a qué más le temeré?”, expresa con indignación.
Mueve las manos y mira a los lados, mientras expone sus pensamientos e ideas que dice le fueron inculcados por sus padres desde la infancia.
“Me introduje desde chiquita en los movimientos sociales, porque mis padres pertenecieron al Frente Estudiantil Flavio Suero de la UASD (Feflas). Mi mamá vino desde Puerto Plata cuando era muy joven, algo que temían sus familiares porque al ser mujer era posible que la raptaran o violaran en aquellos tiempos”, relata con entusiasmo.
“Qué bueno que hayan sido jóvenes y principalmente mujeres”.
“Ser mujer. Ser joven”
Actual presidenta del Feflas, donde inició a sus 13 años de edad, Heidy manifiesta que su papel de mujer y joven ha sido un reto en todos los actos en que participa.
“Ser mujer puede traerte muchas limitantes ante una sociedad que a pesar de que dicen que el machismo se ha erradicado, no es así. Ir a una rueda de prensa y decir que tú eres la que representarás a todos, porque eres quien ha organizado y lleva la voz campante, es un reto”, manifiesta.
Sancarleña (nacida en el sector San Carlos de Santo Domingo), la segunda de cinco hermanos y la única con pensamientos revolucionarios. “Somos cuatro hembras y un varón pequeño de 10 años. Ellos me califican como la ´revolucionaria´ que siempre está peleando por algo”.
Con una amplia y reluciente sonrisa, relata que su vida siempre ha girado en defensa de la ciudadanía porque es lo que ha visto en su hogar.
“Desde siempre mis padres han pertenecido a organizaciones sociales, la defensa de los derechos nos ha sido inculcada a pesar de que a mis hermanas no les ha llamado la atención”, agrega.
Ella quiere algo diferente. “No ver tanta inseguridad, niños en las calles durmiendo y que no tienen a nadie, porque eso te marca”.
Estudiante de Arquitectura, a sus 25 años de edad recuerda que por medio del teatro aprendió que Juan Pablo Duarte concientizó a la población por ese mismo camino.
Sin embargo dice que ha vivido experiencias que marcaron a otros jóvenes allegados. “Que nos rodearon a mí y a mis hermanas, que se dedicaron a delinquir porque ven que muchos hacen lo mismo y no les sucede nada. Yo me pregunto, ¿y eso es lo que queremos nosotros?”.
“Hay diferencia entre políticos y politiqueros”
Expresa que entre los grupos sociales siempre habrá política, pero existe una diferencia entre políticos y politiqueros.
“Hay que dividir la Ciencia Política de los politiqueros que usan la política para beneficiarse, porque es distinto”, argumenta Heidy.
Señala que como se ha hecho y se seguirá haciendo, personas manifestaran pareceres que querrán entorpecer las acciones de ayuda que ellos como estudiantes independientes a todo partido político, quieren dar a la República Dominicana.
Recordando el momento en que se introdujo junto a otros a la Procuraduría, dice sentirse satisfecha y más aún de que ninguno de los participantes pertenecen a ningún partido movimiento ni político.
“Hemos hecho un antes y un después de que mujeres jóvenes hayamos hecho eso, que no tenemos colas que nos pisen porque no pertenecemos ni le debemos a nadie”, señala Adón Vargas.
Heydi recalca en varias ocasiones y con una sonrisa en todo su esplendor, que a pesar de todo no lamenta exponer su vida ante posibles situaciones de peligro si eso implica seguir con la lucha de los derechos de los dominicanos.