El Gobierno no solicitó al Congreso una nueva extensión del estado de emergencia y dejó vencer el plazo que tenía para ello hasta este miércoles, lo que abre paso a poner fin desde el lunes al toque de queda en todo el país y mantener en vigor otras medidas sanitarias menos restrictivas para encarar la pandemia, informó el consultor jurídico del Ejecutivo, Antoliano Peralta.
El país vive bajo el estado de emergencia desde el 20 de julio del año 2020 y desde entonces rige el toque de queda en diferentes horarios, levantado del todo solo en el Distrito Nacional y las provincias La Altagracia y Pedernales, debido a sus índices de personas vacunadas superiores al 70%.
La decisión de acabar con estas restricciones se produce en momentos en los que se registran incrementos en el número de infectados en el país, donde circula ya la variante delta, pero donde la vacunación supera el 60% de la población y pronto arrancará la aplicación de dosis a niños desde los 5 años.
Hasta la fecha, 4,9 millones de personas han recibido dos dosis. Además, el país aplica desde julio una tercera dosis de refuerzo, que ya han recibido casi un millón de personas, según cifras oficiales actualizadas al 5 de octubre.
“Puesto que la adopción de las medidas a ser tomadas no requiere de la vigencia de un estado de emergencia, el Gobierno ha decidido no solicitar nuevamente la autorización para mantener tal estado de excepción”, confirmó Peralta.
Indicó que el fin del estado de emergencia trae consigo efectivamente la eliminación del toque de queda y otras restricciones asociadas, entre ellas a libertad de tránsito, asociación y reunión.
Peralta indicó que el Gobierno adoptará y anunciará esta misma semana medidas alternativas en virtud de lo que establece la Organización Mundial de la Salud, atendiendo al avance que ha tenido en el país el Plan Nacional de Vacunación.
Adelantó que “se mantendrá el uso de mascarillas y los protocolos de distanciamiento físico”, así como la campaña de vacunación.