SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Silencio ha sido la repuesta del gobierno de Danilo Medina sobre la investigación llevada a cabo en España, la cual confirmó hizo en 2011 una donación ilegal de dinero para la campaña del mandatario dominicano, cuando aspiraba a la presidencia por Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Miguel Sebastián, titular del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio de España, imputado por corrupción, dio una ayuda de 500.000 dólares al Gobierno de la República Dominicana y un donativo electoral de 500.000 pesos dominicanos -equivalentes a unos 10.000 euros- al actual presidente del país, explica el periódico español El Confidencial.
El funcionario donó, según las autoridades españolas de manera irregular, US$ 500 mil para el Gobierno de República Dominicana, con la supuesta finalidad de entrenar el personal que trabajaría en el Merca Santo Domingo, proyecto que construyó la compañía española Mercasa. Los hechos descubiertos abarcan el periodo 2000-2017.
Adicionalmente, una empresa vincula al exministro español, ha desarrollado varios proyectos en la República Dominicana.
Según informaciones publicadas en su página web, Incatema Consulting, ha desarrollado siete proyectos importantes en República Dominicana, desde al año 2002 hasta el más reciente en el año 2017.
Índice de Competitividad
El Poder Ejecutivo tampoco se ha pronunciado sobre la posición de República Dominicana en el Índice Global de Competitividad, luego de que se anunciara que había avanzado 22 posiciones respecto al año anterior, para pasar al puesto 82, pese a que para la comparación se tomaron como referencia informes con un cambio metodológico y nuevos parámetros para la medición.
En el 2017, el país caribeño se colocó en el peldaño 104 de 137, en el informe anterior – antes de los cambios en la metodología –.
El informe publicado el miércoles por el Foro Económico Mundial indica que en la edición del 2017, al aplicar los cambios en la metodología para obtener los resultados, la posición alcanzada por República Dominicana fue la 82 de 135, y no el 104 como se publicó el año pasado.
Para la medición del 2018, cuando se hizo el cambio metodológico, se ubicó la nación en el puesto 82 de 140.
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