SANTO DOMINGO, República Dominicana.- “Al iniciar el año 2017, cifras publicadas evidenciaron que los casos de feminicidios en países de América Latina aumentaron con respecto al año 2015 y República Dominicana no fue la excepción”, estableció un estudio presentado por el Observatorio Político Dominicano (OPD) de manos de Flor Batista Polo, coordinadora de la Unidad de Poder Legislativo del OPD-Funglode.
La Unidad de Sociedad Civil (USC) del Observatorio Político Dominicano (OPD), una iniciativa de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (FUNGLODE), presentó un cuadernillo denominado “Feminicidios en República Dominicana durante 2016” la pasada semana.
Estableció que durante el año 2016, 2,958 mujeres y niñas perdieron la vida víctimas de la violencia machista en 18 de los 42 países que integran América Latina y el Caribe. Sin embargo, dada la diversidad en la clasificación se presume que la cifra es más alta.
Mientras que en República Dominicana, indicó que en el año 2016 el país registró 111 feminicidios de los cuales 88 eran íntimos.
Sustentó que el grupo etario más vulnerable en este fenómeno es el de mujeres que se encuentran en edad reproductiva, de 17 a 36 años de edad; al registrarse que el 24.3 % de las víctimas era ama de casa y no realizaba ningún tipo de trabajo remunerado.
La investigadora agregó que el 9 % de los feminicidas pertenecía a alguna de las instituciones castrenses como la Policía Nacional, las Fuerzas Armadas, el Ejército y la Armada de la República Dominicana, mientras que el 23 % de los victimarios se suicidó una vez cometieron el hecho.
También, el estudio arrojó que 116 menores de edad perdieron a uno o los dos padres a causa de los feminicidios reportados en 2016.
En tanto, en cuanto a la ocupación de los agresores, destacó que los medios de comunicación y las instituciones que trabajan en la prevención y la erradicación de la violencia contra la mujer en Funglode registra que el 12 % de los por hombres procesados por feminicidios se dedicaba a la actividad comercial, el 9% eran miembros de la Armada Dominicana y de la Policía Nacional; el 5 % laboraba como seguridad privada y el 4 % se desempeñaba como taxistas y choferes del transporte público.
En el estudio del 2011, el 17 % estaba en el ámbito comercial y el 17 % eran agentes, taxistas y conductores.
Preparación académica de las victimas
El estudio reveló que las mujeres que sufrieron estos delitos son estudiantes desde básicas hasta universitarias. El 8 % alcanzó estudios profesionales en medicina, psicología y educación.
Contrario a los asesinos por feminicidas, que el 5 2% no tenía estudios primarios, el 33 % era bachiller y ninguno tuvo nivel universitario.
Termino “feminicidio”
La serie “Feminicidios en República Dominicana” es un estudio documental de carácter descriptivo, señaló que no fue hasta el año 1992, cuando se definió un marco conceptual más específico y se comenzó a hablar abiertamente de los femicidios o feminicidios.
Explicó con el paso del tiempo, al concepto de “femicidios” utilizados por estas dos investigadoras se les fueron agregando otros elementos que denotaban la violencia estigmatizada por el género. Una de las definiciones e investigaciones más conocidas, especialmente, en toda Latinoamérica y el Caribe, fue precisamente la desarrollada por Marcela Lagarde, quien le dio un nuevo significado a la palabra “femicidio” bajo la denominación “feminicidio”.