SANTO DOMINGO, República Dominicana. – Acción Empresarial por la Educación (EDUCA), saludó la designación de Roberto Fulcar como futuro ministro de Educación, que fuera anunciada por el presidente electo, Luis Abinader, para formar parte de su gabinete gubernamental.

Valoró la designación como una "excelente" señal  de compromiso para enfrentar los retos que tiene por delante el sistema educativo.

“Que haya escogido dentro de sus filas a un hombre con una amplia experiencia y conocimiento del sistema educativo dominicano, y al mismo tiempo con las credenciales adecuadas para hacerle frente a los desafíos ya conocidos para traducir los esfuerzos económicos que viene haciendo la sociedad dominicana en mejores aprendizajes de sus estudiantes, muestra el valor otorgado a este sector”, expresó Samuel Conde, presidente de EDUCA .

“Sumándose a estos desafíos la dificultad que significa intentarlo en un contexto determinado por la plena vigencia de los protocolos de seguridad relacionados con la presencia de la Covid-19”, remarcó.

Del mismo modo, el empresario ofreció el apoyo de la institución para contribuir a diseñar estrategias y metodologías en procura de asegurar el equilibrio entre cuidados de la salud, prevención de la enfermedad y asegurar procesos de aprendizaje efectivos.

Destacó que en un reciente webinar de EDUCA con los partidos políticos, en el capítulo desarrollado con representantes del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Fulcar solicitó la ayuda y colaboración del sector privado por considerar que la educación es un asunto de todos y no solo de un gobierno o un partido político.

Al mismo tiempo, calificó como positiva la idea de la conformación de una comisión de transición a nivel ministerial, teniendo en cuenta el trabajo que ha realizado el Licenciado Peña Mirabal y su equipo al frente del Ministerio de Educación.

Samuel Conde concluyó diciendo que esta transición ordenada, asegurando la transferencia de programas, proyectos y procesos en marcha, no solamente es buena para la educación dominicana, sino que también constituye una lección de madurez para la democracia.