SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Los miembros del Partido Revolucionario Social Demócrata (PRSD), denunciaron que el Gobierno invierte casi el 60 por ciento de sus ingresos en el pago de intereses de la deuda pública.
Rafael Gamundi Cordero y Luis Miguel Decamps, presidentes y secretario general, argumentaron que dichos intereses rondaban los US$33 mil millones en octubre del 2016 igual a un 47.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Destacaron que entre el 2016 y el 2017 por cada 100 pesos que aumentó el gasto público 56 se fueron al pago de intereses de la deuda, hecho que provocó un incremento en los niveles de pobreza e inequidad social en que se desenvuelve la sociedad dominicana.
“Esos recursos deben estar destinados al aumento del empleo, a mejorar los servicios de agua potable, de salud y el sistema de seguridad social”
“El Gobierno del presidente Danilo Medina está pagando la deuda, pero a costa de bajar cada vez más la calidad de vida de los dominicanos más pobres y de la clase media”, indicaron.
Aseguraron que la deuda pública del país constituye la principal traba para el bienestar social de la mayoría de las familias dominicanas y reducir los altos niveles de inseguridad ciudadana.
“Esos recursos deben estar destinados al aumento del empleo, a mejorar los servicios de agua potable, de salud, el sistema de seguridad social y de las oportunidades para que la juventud adquiera una preparación de alto nivel, indispensable para el desarrollo del país”, agregaron.
Asimismo, indicaron que mientras el nivel de desempleo supere el 20 por ciento será cada vez mayor el número de ciudadanos sin acceso a la vivienda, al transporte de calidad y a un ambiente sano y seguro.
Manifestaron que no es posible mejorar la seguridad ciudadana en un país donde la juventud no vislumbra un panorama claro sobre su futuro.
Insistieron en que los altos niveles de pobreza y desempleo generan violencia a todos los niveles, colocando al país al borde de una explosión social.
Consideraron que lo recomendable es que las autoridades detengan el “desenfrenado” gasto público en renglones que no son prioritarios para el bienestar general.
Asimismo, calificaron de impostergable detener la carrera de endeudamiento público que, a su juicio ha alcanzado niveles alarmantes.
Pidieron detener corrupción en la administración pública, que se ha visto envuelta en actos tan vergonzosos como la compra de los aviones Tucanos, la construcción de las plantas de Punta Catalina, la reparación de los hospitales públicos, el soborno de Odebrecht y otros que engrosan una larga lista.