SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Los medicamentos contienen los llamados 'ingredientes inactivos', elementos conservantes, colorantes y aglutinantes que no están destinados a curar y que más bien enferman.
Así lo estableció un estudio sobre más de 42 mil píldoras recetadas con mayor frecuencia en EEUU y elaborado por investigadores del Brigham and Women’s Hospital y del prestigioso central académico Massachusetts Institute of Technology (MIT).
“Las formas orales de medicamentos contienen ingredientes inactivos para mejorar sus propiedades físicas. Mediante el análisis de datos, caracterizamos la abundancia y complejidad de estos en los medicamentos aprobados. La mayoría contiene ingredientes que podrían causar reacciones adversas, lo que subraya la necesidad de maximizar la seguridad”, se lee en el estudio publicado la víspera en la revista científica Science.
Todos los medicamentos orales cuentan con dos componentes: el ingrediente activo, que ejerce efectos terapéuticos, y una mezcla de ingredientes inactivos, llamados excipientes, que alteran el ingrediente activo para hacerlo más eficaz o fácil de absorber, entre otros atributos.
Estos ingredientes inactivos pueden causar reacciones alérgicas o problemas gastrointestinales en algunos pacientes. A la luz de este estudio habrá que corregir esta realidad debido a que, efectivamente, las pastillas así producidas tienen el poder de enfermar o al menos de causar alguna reacción adversa.
Los autores de este trabajo analizaron exactamente 42,052 pastillas de las medicinas orales más recetadas en Estados Unidos y encontraron 354,597 ingredientes inactivos; es decir, más de ocho por gragea.
El 71% de la masa de cada medicamento es de lactosa, gluten y maní
Entre estos ingredientes, que representaron el 71% de la masa de estos medicamentos, los más problemáticos son la lactosa, encontrada en casi la mitad de las pastillas analizadas, el gluten y el aceite de maní (cacahuete), que pueden causar efectos adversos en pacientes con afecciones como intolerancia a la lactosa o alergias a los alimentos.
La mayoría de los ingredientes inactivos tienen un registro de seguridad, pero según la investigación se trata de compuestos que podrían estar causando efectos en la salud que no están siendo detectados con los actuales métodos de detección de toxicología preclínica.
«Lo último que quiere hacer un médico es recetar un medicamento que podría causar una reacción adversa o reacción alérgica en un paciente», remarcó Giovanni Traverso, uno de los autores del estudio.
El científico dijo que este trabajo fue inspirado en un paciente con enfermedad celíaca al que se le recetó un medicamento con gluten.
“Queríamos entender el problema y profundizar para caracterizar el universo de ingredientes inactivos a través de miles de fármacos», declaró este profesional miembro del equipo de gastroenterología del Brigham and Women’s Hospital.