SANTO DOMINGO, República Dominicana. – "¿Con qué derecho y autoridad puede el gobierno exigir a la gente de los barrios que cumpla el nuevo toque de queda?", cuestionó Monseñor Jesús Castro Marte, uniéndose a los reclamos de una parte de la población que entiende que las disposiciones del gobierno para enfrentar el COVID-19, se aplican con preferencias.
Castro Marte expresó que en atención al bien común y por respeto a los ciudadanos, el gobierno debe evaluar con seriedad las medidas vigentes y proceder a rectificarlas.
"La Iglesia se ha caracterizado por asumir responsablemente todas y cada una de las medidas dispuestas por las autoridades públicas para el control de la pandemia, hasta el punto de cerrar sus templos y suspender las tradicionales celebraciones altagracianas. Sin embargo, como Pastor, debo escuchar la indignación de muchas personas a la vista de la desigualdad que representan las fiestas ajenas a los protocolos sanitarios que tienen lugar en hoteles y otros espacios turísticos y que están circulando en videos. No les falta razón", dijo el obispo de la Diócesis de Nuestra Señora de la Altagracia en Higüey.
Seguido, cuestionó "¿Con qué derecho y autoridad puede el gobierno exigir a la gente de los barrios que cumpla del nuevo toque de queda? ¿O a los policías que redoblen su esfuerzo en la lucha contra el Covid-19? ¿O al personal sanitario que gestione eficientemente la avalancha de enfermos que previsiblemente va a sobrevenirles cuando regresen a sus hogares quienes han participado en dichas fiestas turísticas?".
Para las fiestas de Año Nuevo, el Gabinete de Salud dispuso toque de queda desde las 5:00 de la tarde hasta las 5:00 de la mañana, con un plazo de dos horas para la libre circulación vehicular para evitar aglomeraciones y actividades multitudinarias en espacios públicos. Sin embargo, la noche de este jueves usuarios reportaron reuniones de personas en la espera de las 12:00 de la medianoche para celebrar la llegada del 2021.