Washington, 18 oct (Lucía Leal/EFE).- El continente americano sigue con atención la carrera para reemplazar a José Miguel Insulza al frente de la OEA, pero, por ahora, la mayoría de países evita respaldar a uno de los dos candidatos que se han presentado hasta el momento, conscientes de que el proceso está aún "muy abierto" y es probable que surjan nuevos aspirantes.
El exvicepresidente de Guatemala Eduardo Stein y el canciller de Uruguay, Luis Almagro, se disputan la secretaría general de la Organización de Estados Americanos (OEA) sin competencia, por ahora, tras la retirada este mes del candidato peruano, Diego García Sayán.
Pero ninguno de los dos ha emergido como favorito entre los países del continente, que mantiene una actitud de espera en una elección que, a día de hoy, no tiene una fecha establecida y en la que, si se repiten los patrones del pasado, no sería raro que surgieran candidaturas a última hora.
"Es muy posible" que surjan nuevos candidatos, dijo Stein en una entrevista con Efe este jueves en Washington.
"No está reglamentado de ninguna manera cuándo es la fecha final tras la que no habría más candidaturas. De hecho, ya ocurrió en anteriores ocasiones, que el día antes de la elección surge una candidatura nueva cuando en negociaciones discretas o secretas no se alcanzan los votos necesarios para las ya formalizadas", añadió.
El ejemplo más claro es el del expresidente de Colombia César Gaviria, que presentó su candidatura a la OEA semanas antes de la elección en 1994, y logró imponerse a los dos candidatos en liza, el costarricense Bernd Niehaus y el venezolano Miguel Angel Burelli.
"Aún es muy temprano en el proceso, y ciertamente pueden aparecer otros candidatos. En este momento, la carrera todavía está muy abierta", opinó el presidente del centro de estudios Diálogo Americano, Michael Shifter, en declaraciones a Efe.
Con él coincide Cynthia Arnson, que dirige el programa de Latinoamérica en el centro Woodrow Wilson y ha organizado dos conferencias para que Almagro y Stein presentaran sus campañas.
"Aún es muy temprano en el proceso, y ciertamente pueden aparecer otros candidatos. En este momento, la carrera todavía está muy abierta", opinó el presidente del centro de estudios Diálogo Americano, Michael Shifter, en declaraciones a Efe
"Falta mucho tiempo antes de la elección, y creo que varios países se están tomando su tiempo para decidir por quién van a votar", indicó Arnson a Efe
Stein asegura contar con el respaldo de El Salvador, Honduras, Costa Rica, Panamá y República Dominicana para su candidatura, pero, hasta ahora, solo los Gobiernos panameño y costarricense han emitido declaraciones públicas de alto nivel al respecto.
Almagro, por su parte, tiene el apoyo expreso de Brasil, Chile, Belice y Paraguay, según el Gobierno uruguayo.
Según observadores consultados por Efe, es especialmente revelador el silencio de los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) y del Caribe, cuyos apoyos pueden inclinar la balanza en unas elecciones que serán por mayoría simple, es decir, de 18 votos de entre los 34 Estados de la OEA.
"Por ahora, no han sumado fuerzas en apoyo a Almagro", que a priori sería su candidato más afín, "lo cual significa que podrían tener interés o bien en sacar un candidato, o en apoyar alguna otra iniciativa que se vaya a presentar", apuntó a Efe un analista que conoce de cerca el tema y que pidió el anonimato.
En los últimos días, ha llegado a los pasillos de la OEA el rumor de una posible candidatura del expresidente panameño Martín Torrijos (2004-2009), pero hay quien dice "que tiene interés en volver a ser presidente de su país", lo que alejaría esa opción, según el analista.
Torrijos sería un "candidato potable para los países de Suramérica", pero no satisfaría "del todo a EE.UU. y Canadá", opinó.
Otro nombre que ha sonado es el del presidente del Banco de Desarrollo de Latinoamérica (CAF), el boliviano Enrique García, quien, de presentarse a la OEA, debería abandonar esa institución que se comprometió a dirigir hasta 2016.
Muchos, incluyendo el propio Stein, creen que la mexicana Alicia Bárcena, actual secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), haría un gran trabajo como primera mujer al frente de la OEA; y también se ha rumoreado sobre el actual embajador de México ante el organismo, Emilio Rabasa.
El 25 de mayo de 2015 será el último día en la OEA de Insulza, que ya ha cumplido dos mandatos como titular del organismo, y al diplomático chileno le gustaría tener una elección en febrero o marzo para disponer de un tiempo de transición con su sucesor.
No obstante, según Stein, hay quienes quieren retrasar la elección hasta después de la Cumbre de las Américas que se celebrará en Panamá en abril, algo que tanto el candidato guatemalteco como Insulza esperan que no ocurra.
"Ojalá se busque una fecha que no entorpezca el trabajo de la Cumbre. Hacerlo después de la Cumbre, tiene el problema de que el plazo entre la Cumbre y la salida del secretario general está demasiado cerca", afirmó Insulza a periodistas este jueves. EFE