Mi abuela me decía que “Con Palmera o con Manuela todos los curas guayan”.
Por ello, en estos tiempos de escándalos sexuales traigo remedios para el clero, remedios que les envía la virgen santa para que apaguen su fálico fuego, encendido quizás por el Santo Prepucio, por esta santa reliquia y culto, entregado por Juan el Bautista (No me refiero a Grimaldi) a María Magdalena, amada por Cristo, cuando fue circuncidado (Ver Santo Prepucio http://es.wikipedia.org/wiki/Santo_Prepucio )
Monseñor Meriño
Se dice que Meriño, como los curas de ayer y los de hoy “Oficiaba más misas en su cama que en los altares de Cristo.”
Sin embargo por ignorar nuestra historia (la oculta) muchos se han sorprendido de los escándalos sexuales de la actual Iglesia criolla, no así nuestro profesor “FM”, quien más o menos nos decía: “ Hasta la mitad del siglo XX aquí no había un cura sin mujer o con familia creada”; traducido: “En aquellos tiempos idos todos los curas guayaban”.
Y lo sabía Roma
Y lo sabía Roma pues desde aquí le reportaban del desastre de este clero criollo cuyos miembros “solían quejarse en sus camas durante toda la noche creyendo el vecindario que andaban de penitencia por los lares del infierno, a decir de los gritos y malas palabras que escuchaban.”
Aunque, por lo que se ha destapado aquí (y lo todavía tapado), podemos decir que las cosas han continuado de mal en grave y ya nadie se salva de esta plaga de pederastas, pues ahora, para ir a Misa seguros debemos taponarnos el pedúnculo ¡Su’ santísima!
Desconozco los detalles
Sin embargo, aun habiendo investigado los más notables casos clericales de nuestra historia, debo confesar a mis lectores que desconocía que Monseñor Meriño había acosado sexualmente, y luego embarazado, a María Nicolasa, la hermana del Padre Billini, su discípulo del seminario.
Y, aunque también desconozco los detalles de la tragedia familiar, puedo imaginarme el lío que se armó entre aquella clase clerical cuyos santos ímpetus cabrios infernales podrían llevarlos al colmo de irrespetar a un hermano sacerdote y a su familia, acosándole sexualmente a su querida hermana. Para ese entonces: el escándalo del siglo.
¡Maña vieja no es costumbre!
Pero ¿Cómo lo manejó la Iglesia? ¿Cómo debió proceder para evitar su desprestigio? ¿Se fue a favor de la abusada dama? ¿O acaso prefirió proteger al monseñor de alto rango en vez de al Padre Billini?… Por lo visto son los mismos métodos de ahora: encubridores y cómplices del delito ¡Maña vieja no es costumbre!
Por su permanencia en el cargo, podemos deducir que, como hoy se hizo con el nuncio Wesolowski, monseñor Meriño fue protegido sin llevarlo a la justicia civil o a la canónica.
El padre Billini
Por otro lado desconocemos la postura que tomó el padre Billini, ignoramos si llegó a solicitar juicio civil o canónico contra el acosador de su hermana o prefirió guardar silencio para proteger a su nueva sobrina, el producto de aquel santo desvarío de su hermano en Cristo.
Para tener una idea del escándalo imagine que aquí el más connotado monseñor u obispo criollo se le ocurra acosar y embarazar a la hija de otro notable cura compañero.
Vieja canción popular de autor anónimo
A la mujer del sacristán
la llaman la sacristana
por que suele amanecer
repicando la campana.
Sugiero que los capen
Y me pregunto ¿si supuestamente castos, los curas no hacen uso de su órgano (no el musical) por qué no se modifica el Canon y, en la misma ceremonia de consagración, se les levanta la sotana, se les descubren las campanas y se les da un fuerte golpecito en sus santos granos para dejarlos capados?
Lo creo un buen remedio, creo que así se evitaría la tragedia de ver a la Iglesia desprestigiada, obligada a proteger a estos degenerados sexuales y pederastas que, no conformes con desgraciar a los menores, se dedican a coger (como el caso de Meriño) a las hermanas de sus colegas sacerdotes y de sus fieles creyentes…
Y para los que ya son curas…
Y para los que ya son curas y no han sido sometidos a este “canon capador”, que le apliquen la CONFIRMACION y le pregunten:
“Jura usted seguir siendo ser casto para el resto de su vida sacerdotal”
Y ante positiva respuesta y confirmación, suministrarle un calmante para que luego proceder a darle con un martillo a sus consagrados granos.
¡Y santo remedio! No hay que hablar más de curas abusadores y pederastas que dañan a la Iglesia católica. ¡Ah! sin olvidar que a los obispos debemos darle un doble repique de campana: un doble golpe en el mismo centro de sus purpurados granos.
Qué no me castren la Voz
Total, si yo fuese cura prefería que me castren el género macho y no La Voz de Montesinos como pretende hacerle el general clerical Nicolás al noble jesuita Serrano.
Aunque no nos imaginamos a este último actor de marras cantando misa en su Catedral con voz castrati, artificialmente aflautada, mariconiada a causa de un certero golpe patriótico dado con un martillo de oro a sus cardenalicios y santos granos, y, sobre todo, ejecutado por las negras manos de un nuncio africano que habla el creole haitiano,el que ha llegado aquí para tener escuchar las “diplomáticas” acusaciones chismáticas cardenalicias del eminentísimo embajador Grimaldi ( Juan el Bautista) al papa y en contra de Wally, el conspirador americano.
Repitamos como mi abuela “Con Palmera o con Manuela todos los curas guayan”
REFERENCIAS:
A)
Ángela Peña
http://hoy.com.do/calles-y-avenidas-profesora-maria-nicolasa-billini/
Espinal Hernández
http://www.idg.org.do/capsulas/junio2006/junio200624.htm
B) Artículos Guido Riggio:
http://www.acento.com.do/index.php/blog/5242/78/Depredadoris-monaguillense-El-cura-de-Bonao.html
http://www.acento.com.do/index.php/blog/4836/78/Mas-que-un-obispo-un-gallo.html
http://www.acento.com.do/index.php/blog/4209/78/El-cardenal-y-su-marido.html
http://www.acento.com.do/index.php/blog/4960/78/Te-lo-saco-o-lo-dejo-adentro.html
C) “Descendencias Sacerdotales” por Edwin Espinal Hernández
1 http://www.idg.org.do/capsulas/mayo2006/mayo200620.htm
2 http://www.idg.org.do/capsulas/mayo2006/mayo200627.htm
3 http://www.idg.org.do/capsulas/junio2006/junio20063.htm
4 http://www.idg.org.do/capsulas/junio2006/junio200610.htm
5 http://www.idg.org.do/capsulas/junio2006/junio200617.htm
6 http://www.idg.org.do/capsulas/junio2006/junio200624.htm
7 http://www.idg.org.do/capsulas/julio2006/julio20061.htm
8 http://www.idg.org.do/capsulas/julio2006/julio20068.htm
9 http://idg.org.do/capsulas/julio2006/julio200615.htm
10 http://idg.org.do/capsulas/julio2006/julio200622.htm
EPILOGO