SANTO DOMINGO, República Dominicana.-Un cable de la Embajada de Estados Unidos en Santo Domingo, enviado a Washington en el año 2006, resalta las contradicciones entre los entonces secretarios de Turismo, Félix Jiménez (Felucho), y Medio Ambiente, Max Puig, por la posible explotación comercial de las playas de Bahía de las Águilas, Pedernales.

El informe confidencial, fechado el 21 de abril de 2006, y numerado 001355, aunque califica de “supuesta pelea” y habla de que la prensa dramatizó el hecho, sostiene que las contradicciones entre los dos funcionarios del gobierno del presidente Leonel Fernández son viejas. Este cable forma parte de los más de 2 mil documentos sobre República Dominicana puestos a disposición del público por Wikileaks.

Puig era un veterano dirigente comunista que luego se hizo liberal y sumó su pequeño Partido Socialista al Partido de la Liberación Dominicana (PLD), en 1982. Debido a contradicciones internas, en 1992 Puig y otros altos dirigentes dejaron las filas del PLD para fundar la Alianza por la Democracia (APD).

A partir de su primera alianza con el PLD, para los comicios de 1996, Puig ha sostenido un discurso liberal, pero en los hechos ha asumido las prácticas de la derecha y los grupos más conservadores, sumándose en varias ocasiones a la coalición que apoya al presidente Fernández, que incluye a los derechistas Partido Reformista, Partido Quisqueyano Demócrata y Fuerza Nacional Progresista. Además de ministro de Medio Ambiente, hizo de ministro de Trabajo, cargo al que renunció recientemente para dedicarse a promoverse para candidato presidencial por su pequeño partido.

El cable afirma que al presentarse la idea de una posible explotación comercial de las hermosas playas de Bahía de las Águilas, por parte de una compañía francesa llamada Mogador, el entonces secretario de Turismo, Félix Jiménez, respaldó con entusiasmo el acuerdo y promocionó las grandes perspectivas de desarrollo, mientras que en Medio Ambiente, Max Puig, se manifestó abiertamente sospechoso sobre la evolución de los parques.

“Cuando la potencial inversión turística se anunció por primera vez, varios periódicos dijeron que Puig estaba indignado por haberse enterado del plan de desarrollo por la prensa. Jiménez, según la prensa local, dijo entonces que el Secretario de Medio Ambiente optó por no ser informado sobre el proyecto. Reporteros dicen que incluso él llamó a Puig un "anti-turista" que fue el único que lo desaprobó por su ideología política” (no especifica a qué se refiere por la “ideología política de Puig)”, expone el cable.
Detalla que la compañía francesa Mogador declaró su interés en coordinar la construcción de cinco a seis hoteles ecológicos de 70 habitaciones en la zona de Bahía de las Águilas, lugar que define el cable como un tramo desierto de playa virgen en el extremo suroeste del país, cerca de Haití.

“Bahía de las Águilas es el hogar de varias tortugas indígenas raras, de mangle y otra flora y fauna únicas. La playa se encuentra dentro del Parque Nacional Jaragua, que fue designado Reserva de la Biosfera de la UNESCO, en 2002”, indica.

Resalta que el embajador de Francia, Pozzo di Borgo, comentó a otros diplomáticos que Mogador es una empresa de arquitectura, no un operador hotelero, lo que implica que el proyecto estabar todavía en el nivel de una propuesta, no de un plan de financiación completo.

“Cuando los promotores programaron una discusión semi pública en Santo Domingo el 20 de abril, se mantuvo alejada. El presidente Fernández estaba allí, al igual que los secretarios, conceptualmente divergentes, de Turismo (Félix Jiménez) y de Recursos Naturales y Medio Ambiente (Max Puig). A la prensa se le permitió estar presente durante los primeros momentos, pero fue excluida de la presentación real, lo que generó descontento”, añade el cable.

Sostiene que aunque los periodistas convirtieron las diferencias entre Jiménez y Puig en un espectáculo, había existido una larga diferencia visceral entre ambos sobre el tema de Bahía de las Águilas.

“En febrero, Puig le dijo al Embajador (de EE.UU) que él se quedó horrorizado al descubrir muy tarde, que en los últimos días de 2005 Jiménez había conseguido la firma de (Leonel) Fernández para decretos relativos a los parques, sin haber consultado a Puig. Uno de ellos creaba una comisión especial integrada por Jiménez, Puig, y el empresario Marino Ginebra, para decidir los procedimientos concernientes a los parques naturales, incluyendo la autorización de planes para su explotación. Puig dijo que intentó pedirle a Fernández que revocara el decreto. Pero de eso no ha salido hada”, precisa el informe.

El cabe se refiere también a conversaciones sostenidas por personal de la Embajada de EE.UU con otros funcionarios de Medio Ambiente, que restaron importancia a las contradicciones entre Puig y Felucho Jiménez, además de resaltar la labor llevada a cabo por el primer secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, el historiador Frank Moya Pons, un gran conocedor del tema de medio ambiente y estudioso profundo de la geografía dominicana.

(Ver los Wikileaks sobre Repúbica Dominicana)

El cable

UNCLAS SANTO DOMINGO 001355 SUBJECT: COMMERCE VS. STEWARDSHIP: BATTLE OF THE DOMINICAN

NATIONAL PARKS

2006-04-21 21:07

Asunto: comercio vs. administración: la batalla de los parques nacionales de República Dominicana

1. (U) Durante el reciente viaje a Europa del presidente Fernández, inversionistas  franceses le propusieron una inversión de US$600 millones en el turismo de Bahía de las Águilas, un área de prístinas playas sin desarrollar ubicado dentro del protegido Parque Nacional Jaragua, en el suroeste. El secretario dominicano de Turismo, Félix "Felucho" Jiménez, dice que el proyecto creará miles de empleos directos e indirectos en esa región empobrecida en el suroeste del país. Grupos defensores del medio ambiente rechazan la idea, y el más escéptico, el secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Max Puig, está esperando su momento. Un encuentro similar entre el comercio y la administración se produjo en los últimos días del gobierno de Mejía, cuando el secretario de Medio Ambiente, Frank Moya Pons, atajó los daños. Tras una presentación a cargo de los franceses en Santo Domingo el 20 de abril, el presidente Fernández comentó que el suyo era “un concepto, no un plan todavía."

El proyecto propuesto

2. (U) La compañía francesa Mogador declaró su interés en coordinar la construcción de cinco a seis hoteles ecológicos de 70 habitaciones en la zona de Bahía de las Águilas, un tramo desierto de playa virgen en el extremo suroeste del país, cerca de Haití. Bahía de las Águilas es el hogar de varias tortugas indígenas raras, de mangle y otra flora y fauna únicas. La playa se encuentra dentro del Parque Nacional Jaragua, que fue designado Reserva de la Biosfera de la UNESCO, en 2002. La Ley de 2004 sobre parques nacionales, como finalmente quedó modificada siguiendo las objeciones específicas del presidente Mejía a las firmes sugerencias de su ministro de Medio Ambiente, Frank Moya Pons, clasifica algunas zonas de playa en los parques nacionales como apropiadas para el desarrollo del turismo sostenible.

3. (SBU) El Embajador de Francia, Pozzo di Borgo, ha comentado a otros diplomáticos que Mogador es una empresa de arquitectura, no un operador hotelero, lo que implica que el proyecto está todavía en el nivel de una propuesta, no de un plan de financiación completo. Cuando los promotores programaron una discusión semipública en Santo Domingo el 20 de abril, se mantuvo alejada. El presidente Fernández estaba allí, al igual que los secretarios, conceptualmente divergentes, de Turismo (Félix Jiménez) y de Recursos Naturales y Medio Ambiente (Max Puig). A la prensa se le permitió estar presente durante los primeros momentos, pero fue excluida de la presentación real, lo que generó descontento.

4. (U) Los promotores de la inversión de Mogador dicen que traerán 4,000 puestos de trabajo a la empobrecida región. El secretario Jiménez dijo a las fuentes noticiosas locales que cada hotel necesitará entre cinco y seis empleados por habitación debido a que estos hoteles ofrecen servicios especializados. Esta empresa también aprovechará el  subutilizado aeropuerto internacional "María Montez" de Barahona, que está prácticamente vacío desde su apertura.

5. (U) En una entrevista en el programa de televisión El Día, Jiménez negó que la inversión hotelera tenga un impacto negativo al medio ambiente. "Bahía de las Águilas es  la riqueza esencial del lugar; dañar el medioambiente con un desarrollo imprudente sería un delito contra el Estado".

Alianzas políticas

6. (U) Desde el anuncio del interés de los franceses en Bahía de las Águilas, las fuentes de noticias locales han estado dramatizando una supuesta pelea entre el secretario de
Medio Ambiente y Recursos Naturales y la Secretaría de Turismo. Por el lado del turismo, Félix Jiménez respalda con entusiasmo el acuerdo y promociona las grandes perspectivas de desarrollo, mientras que en Medio Ambiente, Max Puig, se ha manifestado abiertamente sospechoso sobre la evolución de los parques. Cuando la potencial inversión turística se anunció por primera vez, varios periódicos dijeron que Puig estaba indignado por haberse enterado del plan de desarrollo por la prensa. Jiménez, según la prensa local, dijo entonces que el Secretario de Medio Ambiente optó por no ser informado sobre el proyecto. Reporteros dicen que incluso él llamó a Puig un "anti-turista" que fue el único que lo desaprobó por su ideología política.

7. (C) Los periodistas han convertido este hecho en un espectáculo, "Felucho y Max", como “Punch y Judy”, si bien ha existido una larga diferencia visceral entre ambos sobre este tema. En febrero, Puig le dijo al Embajador (de EE.UU.) que él se quedó horrorizado al descubrir muy tarde, que en los últimos días de 2005 Jiménez había conseguido la firma de Fernández para decretos relativos a los parques, sin haber consultado a Puig. Uno de ellos creaba una comisión especial integrada por Jiménez, Puig, y el empresario Marino Ginebra, para decidir los procedimientos concernientes a los parques naturales, incluyendo la autorización de planes para su explotación. Puig dijo que intentó pedirle a Fernández que revocara el decreto. Pero de eso no ha salido hada.

8. (SBU) Contactos de la Embajada en ambos ministerios mantienen que los medios de comunicación abordaron las diferencias de manera desproporcionada. La subsecretaría de Turismo, Iris Pérez, dijo a Econoff (el funcionario económico de la Embajada de EE.UU.) que no existen problemas entre ambos ministerios. Funcionarios de Medio Ambiente han reiterado que ellos no pueden aprobar el proyecto hasta que hayan examinado la propuesta. Pérez dijo que Mogador tiene una larga relación con el Ministerio de Turismo y que pronto presentará su propuesta y la documentación. Afirmó que el desarrollo de la Bahía de las Águilas podría ser sostenible y beneficioso, y un medio para avanzar en el Objetivo de Desarrollo del Milenio de reducir la pobreza.

9. (SBU) La subsecretaria de Medio Ambiente, Zoila González,  dijo a Econoff que los ministros han acordado reunirse en abril para discutir el proyecto de turismo. González dijo que hay ciertas áreas que no se pueden desarrollar debido a la presencia de los manglares y las tortugas, pero que otras zonas pueden ser exploradas. González confía en que la administración "hablará con una sola voz".

10. (SBU) Las diferencias entre los dos ministros son de larga data. En 1992, el secretario Puig y diez representantes en el Congreso renunciaron del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y crearon la Alianza por la Democracia (Partido Alianza Democrática). La Alianza ha apoyado a Fernández en sus campañas electorales. El secretario Puig ha estado cerca de Fernández y sirvió como la Coordinador Nacional para el Fondo Europeo de Desarrollo (Convenio de Lomé) en el primer gobierno de Fernández. Jiménez, por su parte, ha sido uno de los principales dirigentes del PLD desde 1979, director de la campaña presidencial más reciente, y organizador de las festividades de toma de posesión. En la actualidad, continúa su trabajo como ministro de Turismo, la misma responsabilidad que tenía en la primera administración de Fernández.

Desarrollo en el Parque Nacional

11. (SBU) Daneris Santana, subsecretaria de Áreas Protegidas y Biodiversidad de la Secretaría de Medio Ambiente, confirmó a un funcionario de la USAID que Bahía de las Águilas está bajo protección, porque está situada en el Parque Nacional Jaragua, bajo la Ley para las Áreas Protegidas aprobada en julio de 2004. En respuesta a una pregunta acerca de lo que se dice de las "áreas liberadas" en el parque, Santana dijo que ninguna área está libre o liberada ‒aunque las zonas de playa y los terrenos contiguos hasta un kilómetro tierra adentro en el Parque Nacional Jaragua y en el Parque del Este en el sureste, cerca de Bayahíbe, fueron clasificados como "áreas recreativas nacionales." Estas áreas están sujetas al plan de gestión de la Secretaría de Medio Ambiente aprobado, y  las decisiones sobre el área protegida se toman de acuerdo con las regulaciones ambientales. Santana comentó que la Secretaría no quieren seguir alimentando la "confrontación de la prensa" entre ambos ministerios.

12. (U) La USAID ha financiado un Plan de Gestión de la Reserva de la Biosfera que le proporciona al Ministerio de Medio Ambiente las herramientas para determinar qué hacer y qué no hacer en las diferentes áreas del parque. Este plan divide el área potencial en tres zonas: la Zona Nuclear, la de Amortiguación  o Zona Media, y la Zona de Transacciones. Las zonas nucleares son los parques en sí mismos. Una idea es hacer de la Bahía de las Águilas una zona protegida. La actividad económica en la zona nuclear se limita al ecoturismo de bajo impacto. Las zonas de transición son para servir como un imán, atrayendo la actividad económica, incluido el turismo tradicional de playa. Cabo Rojo (ubicado al lado de Bahía de las Águilas) sería la Zona de Transición de Bahía de las Águilas. El ecoturismo de bajo impacto (excursiones de lanzamiento) en Bahía de las Águilas podría servir como una atracción principal para los hoteles de una zona de transición de Cabo Rojo. La zona de amortiguación (zona intermedia) sería un espacio predeterminado entre el parque nacional y el área de desarrollo.

13 (U) La AID le entregó este análisis al secretario Puig en junio de 2005. El funcionario de la USAID le sugirió a Santana que la Secretaría utilice este (material) de manera activa.

14. (U) La idea de utilizar Bahía de las Águilas como un destino turístico sin el desarrollo de la infraestructura de los hoteles es compartida por la Coalición para la Defensa de las Áreas Protegidas, una agrupación de grupos ambientalistas que se oponen al desarrollo en esa zona. El presidente de la coalición, Nelson Moreno Ceballos, dijo a la prensa local que la organización no está contra el desarrollo del turismo en la región suroeste, sino más bien en contra de la construcción de hoteles en Bahía de las Águilas. La Coalición aboga por la construcción en Pedernales y el uso de Bahía de las Águilas como un área de visita solamente.

Comentario

14. (C) Los enormes parques del sureste y suroeste del país se establecieron en la década de 1990 por decisión autocrática del Presidente Balaguer, quien, confiscó básicamente las tierras en gran medida desocupadas. Había planes para aprovechar partes atractivas  de estas áreas durante el primer gobierno de Fernández, que dieron lugar a la controversia, y el proyecto de ley aprobado para administrarlas pasó sin la implementación de la legislación hasta muy avanzado el mandato del presidente Mejía. Los legisladores y los empresarios revoloteaban como las moscas sobre un frasco de miel a principios de 2004, cuando el Congreso estaba elaborando la normativa del parque, y el secretario de Medio Ambiente, Frank Moya Pons, historiador y aficionado de los recursos naturales del país, tuvo que optar por la batalla.

Moya Pons nos dijo entonces que él sabía muy bien que Mejía tendría que ceder en las zonas de playa, con el fin de ganar con sus objeciones a algunas de las otras propuestas, más abusivas con la manipulación de las tierras. Por ejemplo, en la versión que le llegó a Mejía para su consideración, simplemente excluyeron todas las tierras de la playa, al excluirlas de los parques de la periferia de la costa de tres kilómetros de ancho. La respuesta de Mejía al Congreso fue un proyecto de ley (algo similar a vetos por partidas, con propuestas de sustituciones), elaborado por Moya Pons, que acabó con los peores cambios y modificaron la apropiación de la playa mediante una reclasificación de estas como "zonas administradas especialmente" dentro de medio kilómetro de la costa. El Congreso aprobó el proyecto de ley revisado sin más cambios.

15. (C) Intelectuales ambos, tanto el historiador Moya Pons como Puig, el polemista de izquierda, se han enfrentado a la tarea de administrar los parques y otros recursos para el bien del país. Puig ha aparecido en gran medida desconectado, excepto en las maniobras políticas no basadas en la ciencia sobre los depósitos de rockash autorizada por la administración Mejía, y no parece haber estado en diálogo con Jiménez sobre los parques. Por el contrario, Moya Pons, quien le dijo al embajador que había tomado la resolución después de confirmado de "nunca renunciar ni ser forzado a salir", aplicó su aguda inteligencia para estudiar los intereses económicos y sociales, los mapas y las propuestas contradictorias en sí mismas de los legisladores, sopesando la política como el arte de lo posible.

HERTELL