Un funcionario del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) dijo endiciembre de 2008 que las normas de seguridad estaban fuera de fecha y fuertes terremotos supondrían un "problema grave" para las centrales nucleares.
El gobierno japonés se comprometió a mejorar la seguridad en todas sus plantas nucleares, pero ahora podría ser cuestionado fuertemente sobre si hizo lo suficiente.
A pesar de que respondió a las advertencias de la construcción de un centro de respuesta de emergencia en la planta de Fukushima, éste sólo fue diseñado para soportar temblores de magnitud 7,0. Y el devastador terremoto del viernes tuvo una magnitud de 9,0 grados.
La noticia es probable que ejerza presión sobre el Primer Ministro de Japón, Naoto Kan, quien ha sido criticado por "vacilar" sobre la respuesta del país a la crisis en curso.
El pánico comenzó a extenderse por todo Japón ayer tras la noticia de que una tercera explosión en la planta podría haber dañado la cubierta protectora alrededor del núcleo del reactor, aumentando el riesgo de fugas radiactivas.
El gobierno estaba considerando el uso de helicópteros para rociar agua sobre el terreno de Fukushima para limitar la propagación de partículas radiactivas, siendo éste otro de sus intentos cada vez más desesperados por mantener la situación bajo control.
Las advertencias sobre la seguridad de las centrales nucleares en Japón, uno de los países con mayor actividad sísmica, se plantearon durante una reunión de Seguridad Nuclear del G-8 y el Grupo de Seguridad en Tokio en 2008.
Un cable de la embajada EE.UU. obtenidos por el sitio web Wikileaks y vista por "The Daily Telegraph", el cual citó a un experto no identificado que expresó su preocupación respecto a la orientación y la manera de proteger las estaciones de energía nuclear en torno a los terremotos. Éstas habían sido actualizadas sólo tres veces en los últimos 35 años.
El documento dice: "el funcionario de la IAEA explicó que las guías de seguridad para la actividad sísmica sólo se han revisado tres veces en los últimos 35 años y para el OIEA es hora de volver a examinar."
"Además, el orador señaló los recientes terremotos en algunos casos han superado la base de diseño de algunas centrales nucleares, y esto es un problema grave que está desviando el trabajo de seguridad sísmica."
Los cables también revelan cómo el gobierno japonés se opuso a una orden judicial de cerrar otra planta de energía nuclear en el oeste de Japón, debido a preocupaciones de que no podía soportar terremotos de gran alcance.
El tribunal dictaminó que existía la posibilidad de que la población local podría exponerse a la radiación de ocurrir un accidente en la planta; la cual estaba construida con las especificaciones fuera de fecha y sólo podía soportar un terremoto de magnitud 6,5-7.0 grados.
Sin embargo, un cable de marzo de 2006 informó que las preocupaciones de la corte no fueron compartidas por la agencia del país sobre seguridad nuclear.Este organismo dijo en un comunicado: " La de Seguridad Nuclear Industrial de Japón cree que el reactor es seguro y que todos los análisis de seguridad se llevaron a cabo apropiadamente."
El Gobierno anuló la resolución con éxito en 2009. Otro cable informó a Washington sobre las preocupaciones de la nación sobre nuevas estaciones de reciclaje de combustible nuclear que serían perjudiciales.
El cable, citando a un periódico local, informa: "Hay algo precario sobre la forma en todas las empresas de energía eléctrica están cayendo en una tras otra bajo la bandera de la política nacional. Hemos estado viendo demasiados casos de competitividad a través reducción, obviando y perjudicando la seguridad".
Los cables también revelan cómo Taro Kono, un miembro de alto perfil de la Cámara Baja de Japón, dijo a los diplomáticos de EE.UU. en octubre de 2008 que el gobierno estaba "encubriendo" accidentes nucleares.
Afirmó que el gobierno estaba haciendo caso omiso de las formas alternativas de energía, como la energía eólica.
El cable explica que: "Él también acusó al Ministro de Economía e Industria y Comercio de estar incubriendo accidents nucleares y ocultando los verdaderos costos y problemas asociados a la industria nuclear." Agregó que la "extensa actividad sísmica" de Japón crea preocupaciones de seguridad sobretodo si se almacenaba material nuclear.
Sr. Kan no estaba en funciones en el momento de las advertencias se hicieron. Se convirtió en Ministro de Ciencia y Tecnología en el 2009- y Primer Ministro en junio de 2010.