SAN FRANCISCO DE MACORÍS.- El Rector de la Universidad Católica Nordestana (UCNE), abogó por el desarrollo de nuestra región, para lo cual sólo falta coraje, valentía, convicción y decisión.
Monseñor Fausto Ramón Mejía Vallejo expuso que esta región tiene una riqueza incalculable, es tierra no de apache, sino una tierra virgen, donde tenemos el mejor cacao del mundo; una de las bahías y península más hermosa: Samaná; una región eco turística por vocación; y por encima de eso,” lo tenemos a ustedes jóvenes profesionales, inteligentes y de buena voluntad”.
Al pronunciar el discurso central de la Vigésima Novena Graduación Ordinaria de la UCNE, donde 285 profesionales y técnicos recibieron sus títulos en diversas áreas del saber humano, el Rector universitario entiende que debemos cambiar el chip mental del subdesarrollo y de inmediato introducir el chip del optimismo que les martillee a cada minuto diciéndoles: Podemos”.
Exhortó a los nuevos profesionales y técnicos a revestirse con el traje de la innovación, basado en la creatividad innata que cada uno posee; “no les tengan miedo a los cambios y háganse conscientes de que la innovación se le puede aplicar a todas las actividades que realizamos; si quieren comiencen con algo tan sencillo que es la forma de presentar nuestros alimentos”.
“Ejemplo: ¿Por qué tenemos que aburrirnos hasta que nos dé golgoritos, en cocinar el huevo siempre de la misma manera; si se puede presentar hasta de 30 formas diferentes. Eso se llama inventar y votar la rutina, para disfrutar de un modo diferente”, explicó.
Monseñor Fausto Ramón Mejía Vallejo, hizo la reflexión tras señalar que existen algunas ciudades que a lo largo del tiempo se han ido convirtiendo en ciudades universitarias, donde los profesionales que salen de ahí, se convierten de inmediato en agentes de desarrollo, progreso y de paz social.
“Pensemos en Alcalá de Henares, que fue una de las primeras universidades de España; la ciudad de Tubinga en Alemania que tantos pensadores ha producido; el Estado de Massachusset, cuya capital es Boston, que aloja la mejor universidad del mundo que es Harvard y muchos otros centros de educación superior como son la universidad de Boston, o William Colledge, de donde han salido muchos premios Nobel”, recordó.
Citó además que en México está el Instituto Tecnológico de Monterrey, y en Israel el Technion de Haifa; estos dos centros albergan los grandes gurúes de la física, de las matemáticas y de las ingenierías.
A seguida el señaló que “seguro que ya ustedes comienzan a preguntarse y qué yo estoy insinuando con eso… sí, sí, eso mismo que usted está pensando, que San Francisco de Macorís puede convertirse en una ciudad universitaria, si es que ustedes no dejan de soñar”.
“Con esos dos pensamientos les estamos diciendo, que ustedes tienen que seguir trabajando fuerte para triunfar, y colaborar con su triunfo a que nuestra sociedad se convierta en un jardín. Por eso quiero lanzarles un reto que ahora puede parecer una gran utopía, sí, es una utopía, pero en el sentido moderno que es algo que podemos realizar”. Señaló-
Dijo que el mundo cambió y cambió para bien; cada vez más tenemos un mundo globalizado con una cultura planetaria; un mundo que se hace cada día más pequeño por la mundialización de los medios de comunicación social (aldea global al decir de Marshall M¨cLuhan); donde la tecnología es el brazo derecho del desarrollo sostenible.
El Rector y Gran Canciller de la UCNE, en su discurso central refirió que hace poco que el Dr. Javier Cabo, que presidió la comisión para la evaluación de nuestra escuela de medicina, “nos hacía partícipes con un gran dejo de satisfacción, que desde una sala de cirugía en España, había operado un paciente que se encontraba en Dubai; ya que él es cirujano cardio vascular, especialista en robótica y nanotecnología, y quien tiene un Oscar de Hollywood, al producir un softward de simulación, que se utiliza para la filmación de cualquier película que utilice todo lo relativo al agua.
Sentenció que la riqueza de hoy está en el conocimiento.
Significó que elementos imprescindibles para alcanzar que San Francisco de Macorís sea una ciudad universitaria y un centro de desarrollo sostenible: Necesitamos primero: conocimiento, tecnología y autoridades con voluntad política.
Un caso reciente que puede ser un paradigma de eso: Singapur, una isla perdida en el archipiélago de Malasia, nadie la quería, porque no tenía ni agua, ni recursos naturales. En 1965 apareció Lee Kuan Yew, que acababa de regresar de terminar sus estudios en la universidad de Cambridge, logró la independencia de esa isla y ha hecho de ella uno de los centros financieros más importantes del mundo
Dijo que es el ú nico país donde no hay un pobre y donde el 97% tiene casa propia. El ejerció un liderazgo autoritario, es verdad, donde la ley y el orden han estado en el centro.
Privilegió la educación de la juventud y para eso entregó el 15% del PIB a la educación y dio facilidad a la inversión de los empresarios, con el solo convenio de que tienen que dar el 10% de su ganancia para la educación.
Su máxima era “Nosotros decidimos lo que es correcto, no importa lo que la gente piensa… los norteamericanos valoran las libertades individuales, nosotros abogamos por un gobierno honesto, eficaz y eficiente”.
Planteó que necesitamos profesionales con mentalidad emprendedora, con pensamientos prospectivos, que sueñen, se esfuercen, luchen y que amen su pueblo y su país.
“Hombres y mujeres emprendedores que entiendan que hay tres caminos para triunfar y para el éxito: La Anticipación, la Innovación y la Excelencia”, significó.
Cree que hay que incursionar mucho más en el mundo de la tecnología, que nos abre a un mundo inimaginable; utilicen ese teléfono inteligente, no para quedarse en el chateo y calentarse las orejas hablando tonterías; naveguen por el mundo de la cultura, cerciórense de lo que pasa en muchos rincones del mundo; aproxímense a las nuevas Telépolis o nuevas ciudades a distancia, cibernética y digital, y así sabrán lo que está pasando en muchos países del Asia; adéntrense en lo que pasa en el Sillicom¨s Valley de California o en InterInside de Israel, donde hay más de 15 mil científicos investigando y dando lo mejor de sí.
“Si les parece lejano, vayan a la Fabril de Santiago para que vean cómo funciona una empresa automatizada”.
Monseñor Dr. Fausto Ramón Mejía Vallejo entiende que lo que plantea no es fácil, porque las cosas grandes y hermosas, hay que pagar el precio del esfuerzo, del sacrificio y del trabajo.
Instó a los nuevos profesionales a quitarse el traje del pesimismo y aprender a buscar las oportunidades.