SANTURCE, Puerto Rico.- Con una emotiva misa, los dominicanos residentes en la isla de Puerto Rico celebraron el día de su protectora espiritual la Virgen de la Altagracia.

La homilía musicalizada por el coro Sociedad Sagrada, fue celebrada en la iglesia San Mateo, por el párroco Luciano Frías, quien es de origen dominicano y quién pertenece a la Parroquia San Vicente de Paúl del mismo sector de Santurce.

Durante la misa con motivo del Día de la Virgen de la Altagracia, el párroco Frías, hizo un llamado a los 'feligreses a acogerse a la  palabra de Dios', e invitó a unirse como hermanos y amarse los unos a los otros.

“Felicito a todas aquellas mujeres que llevan el nombre de la protectora espiritual Altagracia, esta noche quiero exaltar la figura de la mujer y les exhorto a todos a que sigan asistiendo como cada año a esta fiesta en honor a nuestra Virgen y en todos los lugares donde exista un dominicano devoto de ella”, expresó.

En la emotiva misa, el padre hizo mención del origen y la importancia que tiene para los dominicanos que viven en la isla el conmemorar el día de la Virgen de la Altagracia. Expresó que, “Tradicionalmente los dominicanos celebran el 21 de enero el Día de la Altagracia, madre protectora y espiritual del pueblo dominicano, y en esta ocasión  aprovecha la comunidad católica para hacer cultos y rendirle tributo en honor a su patrona”.

Asimismo, el padre Olin Pierre párroco actual de esta iglesia, dijo que en su pueblo Haití, muchos compatriotas asisten también cada año a la cuidad de Higüey , dónde esta virgen tiene su templo (La Basílica), lugar visitado además por miles de turistas que llegan hasta allí para conocer a la protectora de todos los dominicanos.

Igualmente, el vicecónsul Frank Nicómedes Pérez, estuvo en representación del Consulado Dominicano en San Juan, y manifestó que cada día ésta fiesta a la virgen es mayor.

Dijo alegrarse de que este 21 de enero se realizaran varias misas simultáneas en sectores de Santurce, Barrio Obrero, y pueblos como Mayagüez, Bayamón, Río Piedras, Caguas, Canóvanas entre otros.

A la homilía que también asistieron puertorriqueños, contó con una asistencia masiva de devotos de la virgen, entre ellos organizaciones dominicanas sin fines de lucro en la isla, quienes al final de la misa, compartieron en hermandad, y degustaron comidas quisqueyanas, a ritmo de güira, tambora y acordeón.