SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El que la mayoría de los médicos dominicanos prefiera no atender pacientes portadores del virus VIH del sida entraña una violación a los derechos de estos enfermos y a la ética médica, porque los galenos deben estar entre los primeros en rechazar la discriminación y los últimos en propiciarla.
El director ejecutivo del Consejo Nacional para el VIH y el Sida (CONAVIHSIDA), doctor Víctor Terrero, citó un estudio realizado recientemente en varios centros hospitalarios, según el cual el 56 por ciento de las profesionales de la salud consultados admitió que prefiere no atender pacientes con este mal.
“Los médicos deben ser protagonistas de los cambios que vive el sector salud, por tanto, no deben promover ni permitir la discriminación en perjuicio de las personas que viven con VIH ni de las poblaciones vulnerables”, enfatizó Terreno en una nota de prensa de CONAVIHSIDA.
Los médicos “no pueden ser cómplices de la discriminación en perjuicio de las personas con VIH”, reiteró al intervenir en un taller de capacitación dirigido a médicos del Hospital Central de las Fuerzas Armadas, Hospital General Docente de la Policía Nacional y el Centro Medico UCE.
La jornada de capacitación, que será realizada a nivel nacional, busca mejorar la relación y la atención a pacientes que deben recibir “un trato humanitario” por parte de facultativos que deben dar lo mejor de sí a los pacientes seropositivos, “sin reparar en su condición”.
La Ley de VIH/SIDA dominicana prevé una serie de sanciones y multas a quienes vulneren esos derechos y define claramente la discriminación “como todas las actitudes o prácticas que tengan por objeto o resultado disminuir o limitarlos”.
La discriminación a las personas seropositivas, insistió el doctor Terrero, es una barrera que, además, les impide el acceso a los servicios de salud.
“Juntos tenemos que trabajar para frenar esa barrera”, porque discriminar a una persona es colocarla fuera del alcance del sistema de salud, es “violar un derecho inalienable que, como tal, no puede ser negado por alguna condición de los pacientes”.
Cuando una persona es discriminada en los servicios de salud, “tiende a aislarse, a suicidarse o a enfrentar a la sociedad por alguna vía”, alertó el titular del Consejo Nacional para el VIH y el Sida.
El fin de la discriminación y el aliento a la investigación científica forma parte de la estrategia de la ONU de acabar con el SIDA en doce años.
Últimos avances en la lucha mundial contra el SIDA
En el campo de la investigación científica, los últimos avances en la lucha mundial contra el SIDA reportan una nueva inmunoterapia que suprime el virus durante unos meses, y también que extractos de tres proteínas diferentes obtenidas de una planta de arroz transgénico evitan la entrada del VIH en células humanas.
Sobre lo primero, a finales de septiembre de 2018 se informó en Londres que la nueva inmunoterapia combina dos tipos de anticuerpos y, efectivamente, logra suprimir el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), causante del sida, hasta cuatro meses.
El estudio publicado en la revista "Nature" fue efectuado por un equipo de la Universidad Rockefeller, en Estados Unidos, que estudió primero en animales y luego en personas el efecto de este tratamiento de anticuerpos neutralizadores o bNAbs, que combina dos anticuerpos conocidos contra el VIH. Estos pueden combatir el virus sin ayuda de fármacos.
Se trata de una modalidad "más segura y eficaz que cualquier otro tratamiento anterior realizado con anticuerpos", aseguraron los expertos y recordaron que estudios previos con bNAbs habían conseguido reducir el nivel del virus en la sangre, pero el efecto era limitado, pues eventualmente el VIH mutaba para oponer resistencia.
Tras probar la efectividad de la nueva terapia en animales, los expertos administraron a un grupo de personas los dos tipos de anticuerpos, tres veces durante seis semanas. En el caso de pacientes con niveles bajos del virus, el tratamiento lo suprimió durante 21 semanas de promedio. En otros casos durante 30 semanas, sin que se detectara resistencia o efectos secundarios significativos.
En un segundo estudio con pacientes "virémicos" (con el virus activamente circulando en el flujo sanguíneo), publicado también en "Nature Medicine", el compuesto con bNAbs redujo los niveles del virus durante unos tres meses o incluso cuatro.
Nada más económico: Proteínas de arroz transgénico pueden frenar el sida
El segundo gran paso lo reveló la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, que publicó en su edición de julio de 2018 el trabajo de investigadores catalanes que han obtenido por primera vez una combinación de proteínas producidas simultáneamente en semillas de arroz transgénico, que podría traducirse en un nuevo procedimiento para la producción de geles microbicidas a un costo suficientemente bajo para los países pobres.
Según el Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa que ha realizado el estudio, junto a la Universidad de Lérida-Centro Agrotecnio, ambos en Cataluña, los extractos podrían ser utilizados para la producción de microbicidas tópicos para prevenir la transmisión del VIH, que podrían ser de fácil implementación en los países de escasos recursos, por su bajo costo y la facilidad de aplicación.
Parte de las infecciones por el VIH podrían evitarse mediante la aplicación de geles microbicidas en la vagina o el recto, de manera previa a la relación sexual.
Estos fármacos, que todavía no se comercializan, pueden bloquear la infección por el VIH uniéndose a unas proteínas del virus que juegan un papel clave en su entrada en las células.
Las plataformas tradicionales de producción de proteínas -que normalmente utilizan células de mamíferos o bacterias en cultivo en el laboratorio- son demasiado caras y no tienen la capacidad de producción suficiente para abastecer a los países de recursos escasos, que son los más afectados por la pandemia.
Por este motivo, la estrategia de producción basada en arroz (las tres proteínas producidas en este estudio demostraron que los componentes del arroz potencian in vitro la unión de las tres moléculas a una proteína del VIH llamada gp120, necesaria para que el virus pueda introducirse en las células) representa una alternativa excelente que, además, proporciona una actividad microbicida más potente.
No solo reduce costos, también potencia contra diversas variantes del virus
Los investigadores observaron que los componentes del arroz incrementan la potencia contra diversas variantes del virus, lo que significa que la producción a partir de arroz de microbicidas contra el VIH no solo reduce costos en comparación con las plataformas de producción tradicional sino que también proporcionaría beneficios en términos de potencia microbicida.
"En algunos casos, los microbicidas pueden ser la única opción para las mujeres para prevenir la infección por el VIH, ya que a menudo los hombres son reacios al uso del preservativo", declaró el investigador del Instituto de Investigación Germans Trias i Pujol en IrsiCaixa Julià Blanco.
El líder de este estudio, el investigador en la Universidad de Lérida Paul Christou, manifestó que, "siendo realistas, esta estrategia innovadora es la única manera en que los cócteles microbicidas pueden ser producidos a un coste suficientemente bajo para los países que más necesitan los tratamientos de prevención del VIH".
El instituto recordó que cada año se producen 1,8 millones de nuevas infecciones por el VIH en el mundo -la mayoría de ellas en África- y que, en ausencia de una vacuna efectiva contra el virus, la investigación para parar la pandemia no se centra solo en los tratamientos contra el VIH, sino también en las medidas de prevención para reducir la transmisión del virus.