A pesar de que la variante Delta del virus Sars-Cov-2 se encuentra presente en 27 provincias del territorio nacional y que es considerada de alta preocupación a nivel mundial, su presencia en el país no ha causado grandes estragos.
El pasado miércoles las autoridades de salud informaron que con Delta el país vivió “una cuarta ola pero más corta, menos grave y con menos casos reportados”.
Salud Pública indicó que para la semana 48 el país contaba con una tasa de 0.86% de transmisibilidad, la más baja en la historia.
Ronald Skewes, director general de Epidemiología atribuyó el paso lento de la variante Delta a la protección de las vacunas para el COVID-19, por lo que garantizó que si se amplía la cobertura de vacunación también aumentarían las probabilidades de que las próximas olas sean cada vez más pequeñas.
La variante Delta fue identificada en muestras recolectadas entre el 25 de octubre y 8 de noviembre y posteriormente enviadas a Panamá para su análisis.
De las 70 muestras analizadas solo en 65 se encontró la variante Delta, mientras que las otras cinco no pudieron ser ampliadas.
Ante la presencia de Delta en el país se mantiene la recomendación del uso de mascarillas, lavado constante de manos, distanciamiento físico y completar el esquema de vacunación.