Mario Vargas Llosa advirtió que el peor delito que puede cometer un político es aprovechar la democracia para ganar el poder y luego destruir esa democracia.

El Premio Nobel y Premio Cervantes hizo la advertencia en referencia a los comicios presidenciales de su país, que se celebrarán el próximo 5 de junio. Advirtió del peligro de que Kieko Fujimori resulte la ganadora.

Al respecto opinó tanto de la candidatura de Keiko Fujimori, con la que se mostró contrario, como de su encarcelado padre, el exmandatario Alberto Fujimori (1990-2000).

"Él (Alberto Fujimori) ganó una elección libremente y a los dos años dio un golpe de Estado, el peor delito que puede cometer un político que ha aprovechado la democracia para llegar al poder, destruirla", remarcó.

En ese sentido, afirmó creer que "recordarles eso a los peruanos no es malo" en circunstancias "como las actuales", en las que "una hija del dictador" tiene "muchas posibilidades de llegar al poder, no a través de un golpe de estado sino mediante un proceso electoral limpio".

Vargas Llosa recordó los tiempos en los que se introdujo en política en su país, y evocó el hecho de que Fujimori le hiciera "un gran favor personal" al ganarle las elecciones en 1990, ya que de esa forma "le devolvió a la literatura", su verdadera vocación.

"Una de las cosas que yo descubrí siendo candidato es que no tenía ninguna vocación política, que realmente mi vocación era la literatura y que me había visto en cierta forma empujado a este papel", sentenció.

Sobre Donald Trump y el papa Francisco

El autor de "La fiesta del chivo" también se refirió al precandidato republicano a la Presidencia de Estados Unidos Donald Trump.

"Es un señor que dice cosas que son completamente ridículas, absurdas. Ha llamado a los mexicanos violadores, piojosos… ha dicho cosas que no puede tener conciencia de que son disparates pero son disparates que toca en algunos bajos instintos de la gente y que explican su popularidad", subrayó.

A su juicio, esa "demagogia y esas payasadas" de Donald Trump le han dado una popularidad que es "sumamente inquietante" y consideró que no cree que vaya a llegar nunca a la Presidencia, pero que si así fuera, en EEUU "hay muchas defensas y un presidente no puede convertirse en un caudillo", contrapesos al Poder Ejecutivo.

Del papa Francisco reiteró que es una "figura simpática" cuyos gestos "parecen muy buenos", pero que son "solo gestos", ya que "cambios reales no hay", debido "seguramente" a que la maquinaria de la iglesia es "muy difícil, muy lenta" y está "muy inmovilizada por actitudes muy conservadoras".

"Lo que impresiona en el que las cosas que dice son muy realistas. Lo que es extraño es que en la iglesia solo se diga ahora y no antes que los divorciados no son unos monstruos. Nosotros lo sabíamos hace mucho tiempo, ahora, que lo diga un papa ya es una cosa interesante", aseveró.

También criticó el populismo y la corrupción y defendió la economía de mercado, que si se aplica "honestamente" funciona y enriquece "enormemente" a los países y crea "mejores oportunidades para todos".

"No hay que engañarse: no hay otro modelo. Los otros modelos no traen prosperidad, ni mayor libertad. En muchos casos lo que Traen es coerción, una falta de libertad que llega a crear verdaderos infiernos en la tierra", destacó. EFE