Santiago, República Dominicana.-El 11 de mayo de 1964, el presidente de los Estados Unidos, Lyndon B. Johnson, envió una carta al Triunvirato donde le planteaba un acuerdo de préstamo de 4 millones 600 mil dólares para la construcción de viviendas para las familias pobres.
El presidente Johnson estaba muy preocupado por el deterioro económico y social del país, que podrían convertir a la República Dominicana en otra Cuba.
Este es un fragmento de la carta:
LA CASA BLANCA
Washington
Estimado Sr. Embajador:
“Tengo el placer de informarle que basado en la propuesta previamente sometida, la Agencia para El Desarrollo Internacional ha autorizado la expedición, dentro de un período razonable, de una garantía al Chase Manhattan Bank de una suma que no deberá exceder de “4, 600, 000 (cuatro millones seiscientos mil dólares), con protección contra pérdidas que no deben exceder de un 100% de una inversión hecha por el Chase Manhattan Bank a la Compañía de Inversiones y Fomento, C. por A. (COINFO), o la una Corporación Subsidiaria propiedad absoluta de COINFO, paro un financiamiento privado de vivienda en Santo Domingo, República Dominicana”.
“El proyecto consiste en la construcción de 400 casas de dos y tres dormitorios que oscilen entre 927 a 924 pies cuadrados en tamaño y entre $8, 690 a $9, 100 dólares en precio. Las hipotecas serán a 20 años con pagos equivalentes a $65 aproximadamente, y serán aseguradas por una institución del Gobierno Dominicano. Las hipotecas individuales estarán a cargo de la Asociación Popular de Ahorros y Préstamos, una asociación privada de ahorros y préstamos, y la primera que será establecida bajo la supervisión del Banco Nacional de la Vivienda, que ha recibido asistencia técnica y financiera de la A.I.D.”(Fragmento).
El 14 de junio de 1964, el embajador dominicano en Estados Unidos, J. A. Bonilla Atiles dirigió una comunicación escrita al canciller dominicano donde afirma haber recibido la propuesta del presidente Lyndon B. Johnson para un préstamo de 4, 600, 000 dólares para la construcción de viviendas de bajos costos.
16 de junio de 1964
No. 0 221
Al: Secretario de Estado de Relaciones Exteriores
Santo Domingo, D.N., República Dominicana
Asunto: Préstamo acordado a la República Dominicana por Agencia para El Desarrollo Internacional (AID)
Anexo: El Documento mediante el cual el Presidente Lindon B. Johnson Comunica a quien Suscribe La Concesión del Referido Préstamo
“Cúmpleme remitir a esa Cancillería, para los fines correspondiente, el documento original que recibí de manos del Presidente de los Estados Unidos, Excelentísimo Señor Lyndon B. Johnson, mediante el cual me informa la concesión hecha a la República Dominicana por la Agencia para El Desarrollo Internacional de un préstamo de $4, 600, 000.00 a largo plazo, destinado a un programa de construcciones de viviendas en nuestro país”.
“La entrega de este documento se verificó en el curso de una reunión promovida por la Casa Blanca similares para el anuncio oficial por el Presidente Johnson de facilidades crediticias acordadas por la AID a doce países latinoamericanos, cuyos embajadores recibieron, al igual que quien suscribe, sendos documentos en los cuales se consigan las modalidades de los respectivos créditos acordados”.
- A. BONILLA ATILES
Embajador
John Bushnell, Oficial de Economía de la USAID y de la CIA, durante el período 1963-1965, relata la forma como la AID apoyaba al gobierno dominicano después de la muerte de Trujillo en 1961.
“Trabajando con el gobierno dominicano y con la USAID, a menudo iba al Palacio Nacional, al Ministerio de Finanzas y al Banco Central casi todos los días. A menudo, fui a los tres lugares en un solo día. Rara vez fui a reuniones internas de la Embajada. Traté de asistir a las reuniones semanales de la USAID, ya que eran más relevantes para lo que estaba haciendo y se suponía que debía llevar a la embajada un sombrero lleno de ayudas. Supongo que el personal de la CIA estaba fuera, haciendo su cosa, pero no me encontré con ellos. Había un par de estadounidenses que trabajaban para ayudar al Triunvirato en asuntos económicos que yo sentía podrían tener relación con la inteligencia estadounidense. Fuimos mutuamente útiles, ya que teníamos el mismo objetivo, fortalecer al Triunvirato”.
“Los oficiales de la USAID, dice Bushnell, estaban librando una gran lucha porque estaban tratando de conquistar mucho talento dominicano para trabajar y acercarlos a los contratistas de los EEUU. que estaban tratando de construir escuelas y no tenían a ningún dominicano disponible que pudiera diseñar esas escuelas y los contratos para su construcción. Por eso trajeron a contratistas estadounidenses para diseñar y construir las escuelas. Estaban construyendo una importante participación de los Estados Unidos, pero centrado en estos proyectos específicos, no en la política económica general”.
“El Director de la USAID fue William Ide y su asesor John Nepple. Tuve largas conversaciones con la USAID para integrar los técnicos dominicanos que regresaran a la República Dominicana, ya que había muchos dominicanos de clase media que vivían en Estados Unidos y que habían dejado su país a lo largo de los años. Mi pensamiento era que en lugar de traer costosos contratistas estadounidenses, alentar los técnicos dominicanos a regresar a casa”.
“En la República Dominicana había una oligarquía que era la gente con dinero y la tierra y en muchos aspectos estaba relacionada con los militares. Pero había personas que tenían empleo durante toda su vida, aunque con bajos salarios, en los ministerios del gobierno que eran aún más resistentes al cambio. Tenían alianzas con la oligarquía, pero no eran calificados y estaban atados de maneras tradicionales a la oligarquía”.
“La mayor dificultad en implementar cualquier cambio era en la burocracia, porque los burócratas constituían una especie de vacío. Había un Triunvirato no elegido, con sólo dos miembros cuando llegué allí. Donald Reid, quien había sido un exitoso concesionario de automóviles y antes ministro de Relaciones Exteriores, y Ramón Cáceres, abogado”.
“Crear un gobierno que funcione y pasar a elecciones libres era prácticamente imposible por la magnitud de los problemas a los que se enfrentaban, y tenían poca ayuda y había pocas personas capaces. Estaban en la estela de Trujillo”.
“Con frecuencia me reuní con ellos para discutir problemas económicos. Al principio acompañaría al Embajador Bennett o al director de la USAID, pero pronto un ayudante me llamó y me pidió que viniera a verlo. Entonces él me llevó a ver a Cáceres y a veces Reid o ambos sin darme tiempo para llamar a la Embajada. El Embajador quería que él mismo o un oficial estuviera en las reuniones con los miembros del Triunvirato”.
FONDOS DISPONIBLES DE LA ALIANZA PARA EL PROGRESO
1964 (Millones de dólares)
Pequeños Créditos Agrícolas 12, 000, 000.00
Créditos a Empresarios Agrícolas 8, 000, 000.00
Caminos Vecinales 8, 338, 000.00
Ampliación de la Reforma Agraria 8, 100, 000.00
Fomento de Pequeñas Industrias 1, 000, 000.00
Banco Nacional de La vivienda 1, 000, 000.00
Banco Agrícola 2, 500. 00.00