SANTO DOMINGO, República Dominicana.-La República Dominicana quedó mal parada ante los países integrantes de la Alianza para el Gobierno Abierto (AGA) durante una reunión celebrada recientemente en San José, Costa Rica, debido a la cerrazón del funcionario que encabezó la delegación dominicana, Marino Vinicio Castillo (Vincho), director general de Ética e Integridad Gubernamental.
Al funcionario dominicano no le gustó que se hiciera referencia en la reunión a la necesidad de proteger las libertades ciudadanas en República Dominicana, recordando los recientes incidentes en los cuales paleros que se identificaron como seguidores del ex presidente Leonel Fernández golpearon ciudadanos, entre ellos a una señora, y a periodistas, a los cuales les robaron equipos de trabajo y pertenencias personales.
Vincho Castillo participó en un panel para reflexionar sobre el ejercicio del Gobierno Abierto en la República Dominicana, al cual estuvo invitado Carlos Pimentel F., activista social y experto en la temática, y Trajano Vidal Potentini, en calidad de Investigador Nacional de Mecanismos Independiente de Revisión (IRM).
A continuación el relato de lo acontecido, gracias a la colaboración una de las personas que estuvo presente en la reunión internacional:
“Hace unas semanas, la Alianza de Gobierno abierto (AGA) celebró su Reunión Regional anual de las Américas en San José, Costa Rica. En la referida reunión se desarrollaron múltiples encuentros de intercambio de información y de experiencia entre los Estados y las organizaciones de la sociedad civil que realizan esfuerzos de promoción de compromisos y políticas de Gobierno Abierto.
“Estos intercambios se realizan en el interés de identificar áreas de mejoras y puntos de colaboración entre los diferentes sectores y actores que asumen los principios fundamentales de la AGA, para buscar una retroalimentación amplia y profunda en torno a los retos pendiente en sociedades cerradas y en las que todavía hay rasgos de autoritarismo, como ocurre en República Dominicana. En este tipo de sociedades algunos actores gubernamentales no interiorizan prácticas que permitan potenciar la participación de la sociedad civil en este proceso de apertura, de manera que se pueda construir un dialogo franco entre actores y aumentar la colaboración Estado-ciudadanía.
“En el caso de la República Dominicana, para promover políticas de Gobierno Abierto, acceso a la información, participación de la ciudadanía, rendición de cuentas, el Gobierno del Presidente Danilo Medina, se hizo representar en este encuentro internacional por el Dr. Marino Vinicio Castillo, Director General de Ética e Integridad Gubernamental, órgano rector en materia de transparencia, Gobierno Abierto y lucha contra la corrupción.
“En el referido panel organizado para el dialogo, el intercambio de ideas se tornó muy tenso, por la incomprensión del Dr. Castillo sobre la temática y los principios de gobierno abierto, en el cual la participación de la ciudadanía es fundamental e innegociable. La discrepancia y la intolerancia estuvieron presentes con el uso constante de argumentos, acusaciones y juicios que desentonaron el ambiente de lo que debió ser este ejercicio y no fue, un dialogo democrático y abierto con un representación del Estado dominicano en un evento internacional, precisamente para hablar de apertura y políticas de gobierno abierto.
“Los planteamientos y recomendaciones en torno a las políticas de gobierno abierto que manifestó Carlos Pimentel, y que desataron las marcadas diferencias con Vincho Castillo, fueron:
"El Estado dominicano y el órgano rector la Dirección General de Ética e Integridad Gubernamental (DIGEIG) deben estar abiertos a las críticas, al diálogo franco y abierto, deben tener mayor nivel de receptividad a las observaciones y recomendaciones que realiza el Mecanismo de Revisión Independiente (IRM).
"La DIGEIG debe tener presente la Comunicación Oficial de la Unidad de Apoyo de la AGA dirigida al Estado dominicano, en la cual hace una advertencia porque el Estado dominicano “actuó de manera contraria al proceso de la Alianza para el Gobierno Abierto (OGP, por sus siglas en inglés) en su último ciclo de Plan de Acción Nacional, al no hallar evidencia -fuera de línea o en línea- de la consulta con la sociedad civil en materia de transparencia y ética gubernamental”.
"En su participación, Pimentel puntualizó que el riego de la separación del país de la AGA/OGP, luego de esa primera advertencia, era muy alto. Sugirió tomar medidas profundas para mejorar la situación de República Dominicana en materia de Gobierno Abierto.
"Tener en cuenta y prestar atención a los requisitos y condiciones para formar parte de AGA, para evitar la separación del país por violación a los acuerdos establecidos. Entre estos acuerdos están:
"1. Mayor cumplimiento del derecho a la información,
"2. Generar apertura del órgano rector a las organizaciones sociales,
"3. La protección de las libertades civiles (Como ejemplo se citó y llamó la atención en relación al caso de los paleros peledeístas que golpearon a periodistas y a otros ciudadanos en el acto de una conferencia del ex presidente Leonel Fernández),
"4. Garantizar la protección de los derechos humanos (se aprovechó y señalo la intención de algunos actores gubernamentales de promover el retiro de la República Dominicana del Sistema Interamericano de Protección de los Derechos Humanos y la Corte Interamericana de los Derechos Humanos. Un Estado que tome una decisión de esa naturaleza no puede ser parte de ninguna Alianza de Gobierno Abierto, pues se estaría cerrando en asunto tan importante como los derechos humanos).
"Urge desarrollar una reflexión en torno a la AGA, sobre la fundamentación teórica y los principios, para poder desarrollar diálogos y consultas con una participación de mayor calidad de funcionarios públicos y de ciudadanía.
"Impedir la instrumentalización de relaciones Estado-Sociedad en el proceso de construcción y evaluación de los Planes de Acción de Gobierno Abierto. Fundamental es que no se excluya a sectores por sus posiciones beligerantes, sus reclamos y sus críticas al Estado.
“Lamentablemente esta recomendaciones no fueron atendidas, ni entendidas, se rompió el dialogo y el espíritu del panel. Se evidenció la incomprensión sobre lo que el Gobierno Abierto busca promover y sobre la necesidad de involucrar a las organizaciones de la sociedad civil, como actores claves y sujeto protagónico en el proceso de construcción de gobiernos abiertos. Contrario a los paneles que se desarrollaron para análisis de otros Estados representados en la reunión, en el caso de la República Dominicana se limitó e imposibilitó la amplitud y la profundidad del debate. Los otros debates fueron inmensamente útiles, no así el correspondiente a la República Dominicana”.