SANTO DOMINGO, República Dominicana.-No es una novedad decir que la política se nutre de realidades y conveniencias, aunque hay dirigentes aplican las políticas de acuerdo a sus conveniencias, antes de ver las realidades. Se trata de una perogrullada, ciertamente, pero es algo concreto y verdadero, válido para la República Dominicana como para otros países.
Los políticos dominicanos que aspiran a la Presidencia deberían mirarse en el espejo roto de lo que sucede en España y Bolivia, para citar solamente dos casos. En España, los impagos de numerosas empresas y particulares, por efectos de la crisis económica, junto a la mala gestión, han llevado a la intervención de algunas entidades financieras por parte del Estado. (Hasta ahora, ninguna empresa estatal dominicana donde predomina la mala gestión ha sido intervenida, a pesar de ser verdaderos “elefantes blancos”)
En Bolivia, el presidente Evo Morales se ha apartado de su base social indigenista, como veremos más adelante.
Hay una discusión latente sobre las razones de que el desempleo haya aumentado mucho más en España: incremento de la población activa o excesiva rigidez laboral. Otros buscan las causas del crash financiero en los salarios de los altos ejecutivos o la ausencia de eficacia de los organismos reguladores. (Cualquier parecido con lo que ocurre en la República Dominicana es a propósito)
La situación perjudica a miles de los casi 66.000 dominicanos empadronados en España, pues forman parte de la tasa de paro, que el año pasado se situaba en el 20,05%, la peor desde 1997. El número de parados asciende a 4.612.700 personas, es decir, 286.200 más que a finales de 2009 (4.326.500), según datos de la Encuesta de Población Activa. Hay cientos de dominicanos que regresaron al país o están preparándose para ello, pues el desempleo no les permite vivir dignamente, por lo menos con comida asegurada y pago de renta.
Esto quizás explique los miles de “indignados”, jóvenes que desde hace meses ocupan plazas, calles y parques para protestar por los recortes en el gasto de los servicios, recomendados por el Fondo Monetario Internacional (FMI). Igualito que aquí, aunque los “indignados” locales no han tomado acción alguna, excepto protestas con ocultos sedimentos políticos disfrazados de “sociedad civil”, sobre la necesidad de que el Gobierno disponga de un 4% del Producto Interno Bruto (PIB) para la educación
La crisis española, por otra parte, tiene enorme repercusión en las comunidades autónomas. El nuevo presidente de la Comunidad Valenciana está dispuesto a recortar un 10% el sueldo de 150.000 empleados, amén de una rebaja de 1.500 millones en los Presupuestos de 2012.
He aquí algunos datos publicados en España:
La Comunidad Valencia, gobernada por el Partido Popular y con el cuarto mayor presupuesto de todas las comunidades, anunció un recorte de 1.500 millones de euros en sus cuentas de 2012, de los que 600 corresponden a capítulo de personal.
Esa medida implica a una media del 10% en la rebaja media del sueldo de los empleados públicos, lo que afecta a 150.000 trabajadores. El ahorro es equivalente a la nómina en un año de 15.000 empleados. En Baleares, se eliminaron 92 empresas y se despidieron 800 empleados para ahorrar 115 millones de euros, mientras que en Navarra el gobierno aprobó un duro plan para ahorrar 294 millones de antes de fin de año.
(Esto quizás explique los miles de “indignados”, jóvenes que desde hace meses ocupan plazas, calles y parques para protestar por los recortes en el gasto de los servicios, recomendados por el Fondo Monetario Internacional (FMI). Igualito que aquí, aunque los “indignados” locales no han tomado acción alguna, excepto protestas con ocultos sedimentos políticos disfrazados de “sociedad civil”, sobre la necesidad de que el Gobierno disponga de un 4% del Producto Interno Bruto (PIB) para la educación).
Es obvio que la crisis de España y otros países de la llamada “zona euro”, con repercusiones en América Latina, tienen sus raíces en los Estados Unidos, que se inició en 2008 y aún persiste, pese a las múltiples medidas de salvamento de bancos y empresas aplicadas por el gobierno de Obama.
Los que aspiran a la Presidencia de la República Dominicana deberían aprender las lecciones políticas de mirarse en un espejo roto. Si lo hacen, lo que se reflejaría sería una imagen distorsionada de sí mismos. Los más inteligentes sabrán lo que quiero decir
Según economistas, entre los principales factores causantes de la crisis estarían los altos precios de las materias primas, la sobrevalorización del producto, una crisis alimentaria mundial y energética, una elevada inflación planetaria y la amenaza de una recesión en todo el mundo, así como una crisis crediticia, hipotecaria y de confianza en los mercados. [
La crisis iniciada en el 2008 ha sido señalada por muchos especialistas internacionales como la «crisis de los países desarrollados», ya que sus consecuencias se observan fundamentalmente en los países más ricos del mundo.
Los empresarios dominicanos también deberían verse en ese “espejo roto”, para que inviertan mejor sus dineros, apartándose de la especulación y de inversionistas con capitales de dudoso origen, sean nacionales o extranjeros.
En cuanto a Bolivia, los políticos deberían aprender la lección: el presidente Evo Morales, que llegó al Poder con un discurso ecológico y de defensa a los indígenas, rompió con su base política de sustentación al no consultar con ellos sobre la construcción de una carretera que rompería la Reserva Natural donde viven. Morales enarboló la whipala, la bandera indígena, para tener el apoyo de esa mitad de la población que, justificadamente, siempre se sintió marginada.
Según el periódico El País, de España, el pasado 26 de octubre, “para ganar su apoyo, Morales recuperó sus raíces originarias, consagró en la Constitución de Bolivia el Estado Plurinacional y reconoció como oficiales 36 idiomas indígenas, además del castellano. Hizo el presidente una cerrada defensa de la Pachamama (madre tierra) -fue reconocido en la ONU por ello- y estableció en la ley fundamental del país el derecho de los pueblos y naciones indígenas a la autonomía y el autogobierno y a ser consultados cuando el Gobierno tome decisiones que afectan a sus territorio.
“Nunca había hecho Morales distinción alguna entre los pueblos. Se alzó como portavoz de todos y recibió el apoyo de todos. Pero ahora su discurso está en entredicho, pues un proyecto de carretera que impulsa el Gobierno y que atraviesa un parque natural en la Amazonia beneficia sobre todo a los productores de coca del Chapare, de los que Morales sigue siendo su máximo dirigente y a los que prometió más tierras”, dijo el diario.
La protesta indígena no se hizo esperar. Iniciaron una marcha hacia La Paz, duramente reprimida por la Policía, sin reparar que en la misma participaban mujeres, ancianos y niños, lo que llevó a Morales a decir que no fue él quien impartió la orden. Pero los indígenas no le creen. Funcionarios del gobierno se echan recíprocamente la culpa, como si nadie en Bolivia supiera lo que pasó.
“El plan de la carretera demuestra que Morales es por encima de todo un dirigente sindical y que su plan para el desarrollo no pasa por el respeto sin fisuras del medio ambiente”, dijo el diario El País.
El presidente ya ha perdido el apoyo de tres de las cinco grandes agrupaciones indígenas que lo auparon en el poder en 2006. Su mayor fuerza reside ahora en los llamados colonizadores -indígenas del Altiplano a quienes se les han prometido tierras de labriego-, que creen que grandes extensiones de tierra cultivable en el oeste del país están en manos de muy pocos "hermanos". El parque natural objeto del conflicto tiene 1,2 millones de hectáreas y está habitado por unas 15.000 personas de tres etnias.
No se sabe qué pasará ahora, pues líderes de las principales organizaciones sindicales y populares llamaron a una huelga general, de la cual podrían aprovecharse los adversarios de Morales, tanto nacionales como extranjeros, para desestabilizar el gobierno socialista, por no decir otra cosa.
Los que aspiran a la Presidencia de la República Dominicana deberían aprender las lecciones políticas de mirarse en un espejo roto. Si lo hacen, lo que se reflejaría sería una imagen distorsionada de sí mismos. Los más inteligentes sabrán lo que quiero decir.