El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, criticó hoy con dureza la propuesta del virtual candidato republicano presidencial, Donald Trump, sobre prohibir la entrada temporal a los musulmanes en el país y mantener bajo vigilancia a las comunidades islámicas como posibles amenazas.
"Los estadounidenses musulmanes son ciudadanos estadounidenses. ¿Vamos a empezar a tratar a todos los estadounidenses musulmanes de manera diferente? (…) Eso es una traición a nuestro valores", afirmó el mandatario en un contundente discurso en el que abordó los avances de la investigación sobre la matanza de Orlando (Florida).
Obama apeló directamente a las propuestas de Trump, que a su juicio tendrían un resultado "devastador" y alimentarían el radicalismo tanto dentro como fuera del país. "No voy a dejar que eso pase", aseveró el presidente.
"Escuchamos un lenguaje que marca diferencias con los inmigrantes y sugiere que comunidades religiosas enteras son cómplices de la violencia", alertó Obama, visiblemente enfadado.
"¿Dónde va a parar esto? El asesino de Orlando, uno de los asesinos de San Bernardino, el asesino de Fort Hood -enumeró tres de los últimos tiroteos masivos del país-, todos ellos eran ciudadanos estadounidenses".
Obama se preguntó también si los dirigentes republicanos están de acuerdo con este tipo de retórica, e insistió en que ese no es el país que los estadounidenses quieren construir.
"Hacer que los musulmanes estadounidenses sientan que su Gobierno les está traicionando. Traicionar los mismos valores que representan Estados Unidos. Hemos pasado por momentos de nuestra historia antes donde hemos reaccionado por miedo, y nos acabamos arrepintiendo", advirtió.
"Hemos visto a nuestro Gobierno maltratar a nuestros conciudadanos. Y ha sido una parte vergonzosa de nuestra historia", reiteró el presidente.
Obama recordó que Estados Unidos es un país "fundado sobre las libertades fundamentales, incluida la libertad religiosa", y reiteró que la Constitución es muy clara al respecto.
"Y si alguna vez se nos olvidan esos valores, no solo provocaríamos que sea mucho más fácil que la gente se radicalice aquí y en el resto del mundo, sino que habremos traicionado las mismas cosas que estamos tratando de proteger", añadió.
El mandatario consideró que, en ese caso, Estados Unidos acabaría con el pluralismo, la diversidad y la aceptación, "las mismas cosas que hacen grande" al país, "las mismas cosas que lo hacen excepcional, y los terroristas habrían ganado".
Trump reiteró este lunes su propuesta, ya planteada el año pasado, de prohibir la entrada a los musulmanes tras la matanza perpetrada el pasado domingo por un musulmán estadounidense de origen afgano en una discoteca frecuentada por homosexuales de Orlando.
Antes de la matanza, que causó 49 muertos y más de 40 heridos, el presunto autor de los disparos había jurado lealtad al grupo yihadista Estado Islámico (EI), aunque las investigaciones apuntan a que no tenía ningún vínculo directo con la organización terrorista, sino que actuó en solitario.
A causa del ataque, el magnate inmobiliario amplió incluso esa prohibición a todas las zonas del mundo con un historial probado de terrorismo dirigido contra Estados Unidos. EFE