SANTO DOMINGO, República Dominicana.-El dirigente de la izquierda revolucionaria Narciso Isa Conde declaró que el ex presidente Leonel Fernández mintió de manera descarada en el discurso que dirigió al país el pasado lunes 19.
Asimismo, sostuvo que la pugna interna del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), que encabezan los grupos liderados por el presidente Danilo Medina y el ex presidente Leonel Fernández, no hay principios ni ideología, sino ambiciones personales y grupales por el control del Estado.
Narciso Isa Conde dijo que Leonel Fernández mintió descaradamente, en su reciente discurso, cuando se define como un político de principios y convicciones, libre de ambiciones personales, boschista medular, injustamente calumniado, protegido de Jehová y defensor de los más elevados preceptos constitucional.
“Tres administraciones corruptas y corruptoras -incluso narco-corruptas- y dos intentos frustrados de re-postulación, no son precisamente señales de modestia y desprendimiento”, subrayó el coordinador de los Círculos Caamañistas y dirigene de Izquierda Revolucionaria.
Argumentó que Leonel Fernández no se reeligió en el 2000 y en el 2012 porque no pudo, porque tenía todas las circunstancias en contra.
“Tres administraciones corruptas y corruptoras -incluso narco-corruptas- y dos intentos frustrados de re-postulación, no son precisamente señales de modestia y desprendimiento”, subrayó al analizar el discurso de Leonel Fernández
Indicó que igual se vio obligado a apoyar a Danilo Medina, situando a Margarita Cedeño, su esposa, en la Vicepresidencia, porque no tenía otra opción.
“Ahora está intentando repostularse de nuevo y a eso, y no a otra cosa, se debe su actitud de ponerle todos los obstáculos a la repostulación de Danilo, ya sea con argumentos válidos o con explicaciones acomodaticias”, precisó.
No ve diferencias
Isa Conde insistió en que las diferencias entre leonelistas y danilistas no obedecen a principios ni a propuestas políticas de fondo, sino a las ambiciones.
“En esa pugna no hay bondades, no hay principios, no hay diferencias conceptuales ni proyectos de Estado, país, nación y sociedad realmente diferentes. Las palabras sobran frente a hechos demasiado elocuentes. La dictadura institucional, conformada desde la Constitución del 2010 y el Senado actual, podría servirle a cualquiera de las dos facciones y lo que está en esa disputa intensa no va más allá del control de la misma”, expresó.
Indicó que no hay diferencias conceptuales ni principios opuestos en este “mach” entre danilistas y leonelista, como no las hubo ni las hay en las diversas crisis que se han tragado o “metamorfoseado” para menor y peor al PRSC y el PRD, ambos en vía de extinción electoral. Incluso, dijo que tampoco existen diferencias conceptuales e ideológicas en la conformación del PRM, de la llamada Convergencia y el “pretendido frente opositor”, en el que hablan de incluir al PRD (¿??), al PRSC (???) y “otras franquicias-escorias, todas en venta al mejor postor”.
A juicio de Narciso Isa Conde, la reciente presentación televisiva de Leonel Fernández confirma que ahora le ha tocado a la partidocracia peledeísta exhibir en mayor dimensión y con peores consecuencias la crisis que corroe el sistema tradicional de partido y las instituciones estatales, casi todas bajo control morado.
“El PLD ha pasado de la fase soterrada de su crisis, a un periodo de despliegue abierto de una implosión que por el momento se expresa en el choque agudo entre sus dos principales dirigentes clientelista por el control de la continuidad de la manipulación del Estado y del partido; pero que habrá de multiplicarse y complejizarse antes y/o después del 2016”, precisó.
Sostuvo que priman las ambiciones personales y grupales dentro de esquemas parecidos de poder, partido y Estado, desatadas desde una cultura en la que domina la concepción del Estado como patrimonio de funcionarios asociados a grupos y corporaciones capitalistas del sector privado.
Agregó que el PLD ha convertido a la ciudadanía en clientela y se ha valido de la corrupción estatal como mecanismo de acumulación de riqueza y de poder y la constitución de facciones y micro-facciones acaudilladas por cabecillas menores y medianas que se suman a las mayores; “ahora principalmente alrededor de Danilo y de Leonel en el PLD, y de Abinader e Hipólito en el PRM”.
Acusó a los líderes de los grupos y partidos tradicionales de ser personeros adheridos al modelo capitalista-imperialista dominante en cada periodo, dependientes respecto a EEUU y a los grandes centros capitalistas y la condición de neo-gobernadores de colonia, cómplices de los megamillonarios de viejo y nuevo tipo.