Jesús Vásquez/ Especial para Acento.com.do

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La vicepresidenta de la República, Margarita Cedeño se mostró indignada ante la suspensión de las elecciones municipales y afirmó que quienes apuestan al caos y al desorden “no merecen llamarse dominicanos”.

La dirigente peledeísta aseguró que “el daño que se ha hecho hoy (ayer) a nuestra democracia es vergonzoso, es motivo de total indignación y debe investigarse hasta las últimas consecuencias”.

“Quienes apuestan al caos y al desorden no merecen llamarse dominicanos, por el contrario, deben ser sancionados de manera ejemplar”, agregó.

Cedeño exclamó a través de su cuenta de Twitter que hay que respetar los derechos de las personas y que los ciudadanos merecen confiar en la democracia.

“¡Quieren jugar con la paz y la prosperidad de un pueblo! Nuestro país y nuestra gente quiere estabilidad y se merece confiar en la democracia. ¡Hay que respetar la voluntad popular!” precisó.

A cuatro horas de iniciadas las elecciones municipales en todo el país, ayer el presidente de la Junta Central Electoral, Julio César Castaños Guzmán suspendió los comicios por presentar irregularidades, anomalías y fallas técnicas en el sistema de elección.

El presidente de la JCE informó ayer que se realizará una investigación para determinar qué ocurrió durante el proceso.

Esta interrupción ha causado bastante tensión en el panorama político nacional porque es la primera vez en la historia dominicana en la que se suspenden unas elecciones.

En este sentido, la mayoría actores políticos ha emitido una dura posición exigiendo, desde respuestas por lo sucedido hasta la renuncia del presidente de la JCE y todo el pleno.

El partido opositor Alianza País (AlPaís) llevó a cabo una vigilia frente a la sede de la JCE para exigir la dimisión inmediata del pleno tras calificar como un “atolladero electoral” el proceso organizado el pasado domingo 16 de febrero.

AlPaís reclamó la renuncia de los miembros de la Junta Central Electoral (JCE) y una solución a la crisis política e institucional surgida por el colapso del proceso electivo.