SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El vocero de la familia de Marino Vinicio Castillo, director de ética e integridad gubernamental del gobierno, es el diputado por designación Vinicio Castillo Semán, quien conminó la pasada semana al presidente Danilo Medina a no promulgar el reglamento de la ley 169-14, de naturalización, porque de hacerlo a los dirigentes de la Fuerza Nacional Progresista no les quedaba otro camino que el rompimiento de sus relaciones con el Partido de la Liberación Dominicana, y de paso con el actual Gobierno.
La razón del rompimiento no sería el Presidente, sino el Ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo, a quien acusaba de haber conducido al presidente a un callejón sin salida en la presentación de un reglamento de ley antinacional, contrario a la identidad de los dominicanos y sujeto a las presiones internacionales.
Marino Vinicio Castillo, como hemos dicho, director de ética y presidente del grupo denominado Fuerza Nacional Progresista, ya había tronado contra el presidente Danilo Medina, cuando dijo del reglamento que era “inconstitucional, desastroso, peligroso e insostenible” y que tiene el objetivo de destruir ”la identidad nacional”.
En el equipo de abogados que trabajó con la presidencia de la República, por invitación del presidente Medina, se encuentran juristas de la calidad e integridad de Flavio Darío Espinal y Olivo Rodríguez Huertas. Conocen la Constitución, conocen como pocos la ley de naturalización 169-14, porque formaron parte del equipo de redactores.
Las diferencias parecen irreconciliables. Y el vocero de la familia de Vincho Castillo ha sido bien claro al fijar su posición sobre el tema y decir que si el presidente Medina firma el reglamento habrá rompimiento de las relaciones. El presidente está obligado por ley a promulgar el reglamento, a menos que el primer mandatario reconozca -como afirmara Vinicio Castillo- que el responsable del triunfo de Danilo Medina es la FNP y decida hacerle caso, no promulgar el reglamento y meterse las manos entre las piernas.
Lo que dijo Castillo Semán fue lo siguiente:
“Es que si él (el presidente Medina) se lleva de Gustavo Montalvo (Ministro de la Presidencia) y firma esa TRAICION, nosotros no tendríamos espacio para estar en el Gobierno, siempre ha sido nuestra posición como partido”.
Y de paso, es una posición consensuada entre los miembros de la familia Castillo, porque el padre del diputado postizo Castillo Semán había afirmado apenas unas horas antes que el presidente no debía firmar el reglamento de la ley 169-14.
“A mí me luce que es un extravío, algo peligroso, no querría pensar en las consecuencias políticas y la responsabilidad histórica… del presidente Danilo Medina”, había expuesto Vincho Castillo.
Para que la FNP no tenga que cargar con ese fardo histórico, y para contribuir con la higiene que necesita el gobierno uniendo las voluntades de pelafustanes antinacionales como Gustavo Montalvo con ministros verdaderos y éticos como Pelegrín Castillo Semán, Acento comenzó a contar las horas para esperar la renuncia de los señores de la FNP del gobierno.
Este miércoles es la fecha límite para la firma del reglamento de la ley 169-14, y aunque aún no se ha firmado o no se ha dado a conocer su firma, hemos fijado para las 10 de la mañana la hora de renuncia de los miembros de la FNP que se encuentran en posiciones en el gobierno.
El único que no renunciará es el diputado Vinicio Castillo Semán, porque ocupa una posición electiva, designada por el pueblo mediante el voto directo en las urnas. En su caso no fue electo, pero fue designado en la posición que ocupó su hermano como diputado, que fue en la boleta del PLD. Nunca quedó clara la elección, porque el PLD había colocado en la posición al arquitecto Alejandro Montás, quien se dice que la ganó, pero por las peticiones que le hicieron dejaron esa diputación en manos de Pelegrín Castillo.
Quienes sí tendrían la responsabilidad de irse del gobierno son Marino Vinicio Castillo, asesor de drogas del presidente y director de ética e integridad gubernamental. También José Ricardo Taveras Blanco, secretario general de la FNP y Director General de Migración. En la misma condición se encuentra el recién designado Pelegrín Castillo Semán, Ministro de Energía y Minas, quien toma decisiones designando familiares en ese inexistente ministerio.
Tendrían que renunciar Norberto Rondón, embajador encargado de los asuntos de la frontera con Haití, que es abogado y allegado íntimo de la FNP, y Pascual Prota Henríquez, dirige una entidad que se llama Autoridad Nacional de Asuntos Marítimos (Anamar), con carácter de ministerio de Estado. Prota Henríquez es el tesorero de la FNP.
Claro, que ellos como dirigentes políticos que son, tienen derecho a no renunciar y a tragarse las palabras de Vinicio Castillo Semán, que sería en único en quedarse con el cargo público que tiene.
Vea a continuación los vídeos con algunas declaraciones de los Castillo: