Tremenda confusión la del PRSC

El candidato presidencial del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Federico Antún Batlle, envía un mensaje que confunde a los reformistas. Por un lado insiste en que el PRSC no ha pactado acuerdo ni alianza electoral con ningún partido. Por otro lado, muchos altos dirigentes reformistas están en el gobierno del PLD, y sus legisladores votaron por la reforma constitucional para restablecer la reelección presidencial, y allanarle el paso a la repostulación del presidente Danilo Medina.

Y no sólo votaron por la reforma pro reelección, sino que han celebrado, afirmando que con esta reforma en la que participaron de común acuerdo con el PLD y el PRD, los dos viejos antagonistas del PRSC, su extinto líder Joaquín Balaguer ha quedado reivindicado en la historia.

Federico Antún Batlle, líder del PRSC
Federico Antún Batlle, líder del PRSC

Se trata de un estrujón de cara dirigido a perredeístas y peledeístas, pero al mismo tiempo dejan en la confusión a los reformistas que hace poco pensaban que su partido competiría por el poder, y ahora observan a sus dirigentes con este coqueteo con el gobierno actual.

¿Dos nuevos bloques electorales?

Un sector de la izquierda insiste en apostar a la construcción de una tercera opción electoral fuerte, decidida a competir contra los bloques que encabezan el PLD y el PRM, a los que consideran ser parte de lo mismo.

Asimismo, dirigentes de los partidos de la izquierda revolucionaria ha advertido que el PLD y el PRM hasta ahora han reducido el debate político a pro y anti reeleccionismo, como si el pueblo dominicano no tuviera pendientes de solución graves e importantes asuntos.

El problema es que ese posible tercer bloque orientado hacia la izquierda tendría que partir de una actitud unitaria de Guillermo Moreno y sus aliados de Fuerza de la Revolución y Patria Para Todos.

Y precisamente, desde Alianza País, Patria Para Todos y Fuerza de la Revolución no se han mostrado señales claras de querer construir una coalición de unidad, amplia y diversa con miras a las elecciones del próximo año.

Y si no apuran el paso, la polarización entre la coalición oficialista, que lidera el PLD, y la opositora tradicional, que lidera el PRM, los irá disminuyendo hasta quitarles cualquier posibilidad de dar la batalla en los próximos comicios. La bola está en la cancha de AlPaís, PPT, FR, IR, Nueva Democracia, Opción Democrática, Alianza por la Democracia, entre otras organizaciones y partidos.

El cuarto bloque, la extrema derecha y otros conservadores

Un posible cuarto bloque se está tratando de construir alrededor de la Fuerza Nacional Progresista (FNP), y su discurso de ultraderecha.

Se sabe que tocan puertas tratando de convencer a Dominicanos por el Cambio (DxC), que lidera Eduardo Estrella, un hombre conservador, aunque no precisamente un ultraderechista, que ha estado más cerca de los izquierdistas moderados que la FNP.

También aspiran a convencer al PRSC, al PQDC y otros pequeños grupos conservadores, para que desista de su alianza con el PLD y formen parte de este posible cuarto bloque. Con el PRSC sería difícil, porque aunque sus dirigentes insisten en que no han pactado con el PLD ni ningún otro partido, los hechos dicen otra cosa y su gente está acomodada en el poder.

Esta coalición enfrentaría el problema de la falta de credibilidad para convencer a la población, debido a que han formado parte de los gobiernos del PLD, y no le luciría jugar ahora a la oposición luego de suscribir y apoyar todo lo que han hecho los gobiernos peledeístas, sobre todo los de Leonel Fernández, su verdadero aliado dentro del llamado Bloque Progresista.

Por ejemplo, de este grupo el único que podría tocar el tema de la corrupción sería DxC, de Eduardo Estrella, porque los demás fueron aliados y amigos fundamentales de los gobiernos de Leonel Fernández, administraciones que se encuentra entre las más corruptas de la historia de República Dominicana.

Leonel Fernández, Juárez Castillo (centro, detrás) y Marino Vinicio Castillo (derecha).
Leonel Fernández, Juárez Castillo (centro, detrás) y Marino Vinicio Castillo (derecha).

Por los mismos motivos, cualquier propuesta de estos partidos en el orden de justicia social y distribución de la economía, la salud, la vivienda o la educación, nadie la tomaría en serio.

Es casi seguro que este bloque basaría su propuesta electoral sólo en el discurso ultranacionalista, además de vender la idea de un régimen de mano dura contra la delincuencia común. Con suerte, obtendría 3 ó 4 mil votos.

PLD come con su dama y su campaña recibiría 90% del financiamiento por vía JCE

Mientras tanto el PLD, versión Danilo Medina, come con su dama. El presidente Danilo Medina será candidato reeleccionista con los tres partidos tradicionales más arraigados en el pueblo dominicano: El PLD, el PRD y el PRSC (que no le quepa duda a nadie que este partido terminará renovando su alianza con el PLD aunque ahora diga otra cosa).

Miguel Vargas Maldonado, líder del PRD.
Miguel Vargas Maldonado, líder del PRD.

Esto quiere decir que la candidatura de Danilo Medina y las demás candidaturas del PLD y aliados, recibirán para la campaña electoral 90 por ciento o más de los fondos que asigna el Estado dominicano, por vía de la Junta Central Electoral (JCE), para financiar a los partidos políticos.

Sólo hay que recordar que para el año electoral de 2012, la Junta Central Electoral entregó a los 24 partidos reconocidos en ese momento, nada más y nada menos que Mil millones 403 mil 210 pesos (RD$1, 403 mil 210). El Partido de la Liberación Dominicana (PLD), el Partido Revolucionario Dominicana (PRD) y el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) fueron beneficiados con 374 millones 189 mil 333 pesos cada uno. Los otros 21 partidos se repartieron alerdedor de 280 millones de pesos.