"Nadie puede aterrorizar a toda una nación, a menos que todos nosotros seamos sus cómplices "Edward. R. Murrow

Hace apenas 10 meses, todo aquel que tenía sentimientos pro  Francia ante el terrorismo era Charlie Hebdo, aquel lugar donde asesinaron a un encantador personaje llamado George Wolonki, caricaturista y fumador de puros de la República Dominicana, mejor amigo y ser brillante. En aquella ocasión hice un artículo en Acento de igual manera  publiqué otro artículo en el suplemento Areito de Hoy, dedicado a mi amigo George Wolinski.

En otras palabras, al margen de toda posición crítica ante  los asuntos oficiales franceses, el dolor ante lo que acaba de acontecer la noche del 13 de noviembre del 2015 y toda la madrugada del 14 de noviembre, 2015, muestra una vez más que la barbarie fanática toma la escena de las calles de Francia, para asesinar de nuevo inocentes, para robarle la vida y la paz a la población civil.

Una escena con algunas de las víctimas de los atentados

¿ Es un acto de guerra ?. Sí es un acto de guerra puro y franco  que además tiene por objetivo dividir a los franceses y hacer presión pública al  débil gobierno de Francois Hollande.

UN RETO AL GOBIERNO Y AL PUEBO FRANCES 

Con un presidente sin una aceptación alta y con dificultades de percepción por la población, el acto terrorista masivo en las calles y en un estadio deportivo en París, es un reto al gobierno próximo a unas elecciones regionales importantes en Francia.

Este brutal acto terrorista, pondrá de manifiesto cuál es la lectura de la clase política y una vez más pondrá  a prueba el liderazgo del Presidente Francois Hollande, quien por cierto en el manejo de la crisis de enero, cuando los atentados y crímenes en Charlie Hebdo, pudor sortear la crisis con una alta aceptación general.

Hoy a las 11 de la mañana, hora de Francia, se ha dirigido a la nación el ex presidente Nicolas Sarkozy, quien ha hablado prácticamente mezclando sus conocimientos de antiguo ministro de interior, político que busca retorno y al mismo tiempo ha hecho un llamado a la determinación contra un acto de guerra Yihadista. Fue cauto y ofreció apoyó señalando la línea a seguir. No habrá que olvidar que en materia migratoria y seguridad, Nicolas Sarkozy es de línea dura.

Pero lo importante es que ha dado un tono de unidad y creo que esas palabras ya apuntan a que las mismas son  serán el tono general de una clase política que frente a hechos tan graves, no puede politiquear abandonando el sentido de unidad nacional, que en este momento es básico, para que el país frente al mundo se muestre unido en su dolor.

Identificación de los lugares en París donde ocurrieron los atentados

Pero los nuevos actos terroristas en Francia, son un reto deliberado al gobierno y al pueblo francés, quien lo sufre directamente, porque probablemente, influya en un cambio hábito y vida cotidiana de los parisinos, muy acostumbrados a salir en masa los fines de semana por su gran ciudad. Los controles e interpelaciones futuras darán la impresión de una ciudad en conflicto. ¿ No será más la imagen de aquella ciudad tranquila y burguesa del disfrute ?. El  terrorismo eso pretende.

El Presidente Francois Hollande en el día de hoy recibirá delegaciones y muestras de respeto y condolencias y esos encuentros incluyen a la clase política. La situación es tan grave, que se sospecha que hasta Marine Le Pen, quien  no se unió al duelo de Charlie Hebdo por razones personales e ideológicas, esta vez quizás vaya al palacio de los Campos Elíseos, eso aún está  por verse.

El gobierno francés, a propósito de duelo , ha declarado tres días de duelo nacional, por las víctimas del atentado.

YAHADISMO, EUROPA Y LOS ATENTADOS DE PARIS : ¿ LABORATORIO TERRORISTA?

En los últimos días se ha confirmado en España un gran trasiego de células terroristas durmientes, muchos de sus militantes han sido descubiertos y puesto a  disposición del rigor de las leyes especiales contra el terrorismo  en España, cuya alerta  ahora está en 4 de 5.

Lo que ha pasado en Francia, desde Enero hasta  ayer, pone en evidencia que el sistema de ataque empleado es el  de guerra de guerrilla, un modus operandi que rompe en las ciudades europea un estilo cotidiano de vida, una forma libre de abordar los espacios urbanos por ciudadanas y ciudadanos y esa situación de pérdida de la libertad colectiva por miedo al terror en falso nombre de Alá, repercute de modo negativo en quienes gobiernan, especialmente si clase política en cuestión, en este caso me refiero a Francia , no tiene escrúpulos y manipula una grave situación de duelo.

Los atentados también amenazan y quieren poner fin a formas de vida, a la libertad ciudadana en general y están llamados a crear el miedo en nombre de la peor barbarie y el crimen a mansalva, lo cual es inaceptable.

El presidente francés, François Hollande recibiendo la noticia

Las coordinaciones y la simultaneidad con fueron cometidos, muestran una organicidad de los terroristas y un conocimiento pleno del espacio donde los hechos han acaecidos.

En ciudades donde la gente se cree segura, convertirlas en campo de batalla de guerra de guerillas, ello puede quebrar el sentimiento de libertad y  movimiento de los ciudadanos, que en principio y deber, debe estar garantizado por el estado.

"No olvidemos nunca que el terrorismo es, en el fondo, en su naturaleza maligna, una guerra psicológica " ha dicho Norm Coleman  y cuando lo afirma nos recuerda el tema del Yahadismo y la libertad ciudadana.        

Francia, Alemania, España e Inglaterra, deben poner su barbas en remojo, porque nada descarta que un escenario sangriento como el de París, hacia el futuro, no pueda  perpetrase en las capítales de algunos de los países citados, especialmente España y Alemania, la primera porque tiene en las islas de Ceuta y Melilla una puerta posible de entrada de los terroristas y la segunda que por tener una vieja y extraña relación con Turquía, tiene en su suelo, se sospecha células durmientes como la ha tenido  Madrid y Londres.

Es un claro proyecto del terror, lo de París es el modelo perceptible , es hacer imposible la vida cotidiana en las ciudades europeas, convertirlas en un campo de batalla, para crear el miedo, la inseguridad y las grandes tristezas familiares, como las que vimos en enero en Francia y como la vemos ahora en el mismo lugar de su capital, París.

A estas horas todos los servicios de inteligencia y contrainteligencia, todos los servicios de espionaje internacional, están en alerta roja, porque a ciencia cierta nadie sabe lo que pudiera pasar en las próximas horas o en los próximos días.

Creo que esta fuera de toda discusión : el objetivo es Europa y el sangrientto laboratorio Yihadista es París, una vez más.

Una realidad es cierta: los servicios de seguridad no saben por dónde comenzar, no es muy fácil lidiar con un enemigo que en la propia Francia tiene muchos rostros porque lo  peor de todo, a propósito de la idea  anterior : es que no sea una célula que vino del exterior y se infiltró para cometer el atentado, en Francia, el enemigo está dentro y ello obliga con inteligencia y cautela a separar a los musulmanes de culto y espíritu, de los musulmanes que instrumentan la religión para ocultar su verdadero carácter asesino y letal.

En estos momentos difíciles, hay  estar con el corazón abierto al dolor de Francia, porque además nunca se había visto un atentado que vaya a la calle a buscar víctimas ajenas a  todo, mientras disfrutaban de un derecho a la vida, de un derecho a estar en la calle en plan amistoso y  ese es el mayor peligro del modus operandi de este virulento ataque a la población civil francesa, por las calles de París. (CFE)