SANTIAGO DE LOS CABALLEROS, República Dominicana.- El presidente de la coalición política Frente Amplio, Julián Serulle, abogó por una mayor responsabilidad de las autoridades y el liderazgo político en general para enfrentar el epidemia del cólera, que está afectando a los dominicanos que viven los lugares más pobres y carentes de servicio de agua potable y saneamiento público.

“Tenemos que asumir un rol con alta responsabilidad, esperamos que las autoridades de educación, de salud pública, y todos aquellos que tienen que ver con el agua, intervengan con precisión y en defensa de la población indefensa, para bien de la patria, para bien de toda la sociedad dominicana”, expresó.

Dijo que ante la pobreza extrema y la falta de educación, sumado al alto índice de analfabetismo, la prevención del cólera se logra con medidas de control y una amplia campaña de orientación.

“Las medidas para prevenir el cólera deben orientarse a utilizar solo agua que haya sido hervida o desinfectada químicamente, para beber, o preparar bebidas, tales como el te o el café, el chocolate; lavarse bien los dientes, lavarse la cara y las manos, lavar las frutas y los vegetales, lavar los utensilios para comer y el equipo para la preparación y conserva de los alimentos”, sugirió Julián Serulle en su alocución radial semanal.

“El control de calidad en los alimentos tiene que existir, no podemos descuidarnos, no tenemos que ser alarmistas, pero tampoco podemos dejar de hacer lo que tenemos que hacer. Son cosas que el pueblo necesita que se hable y se le diga, las 24 horas del día, tiene que existir un bombardeo para que llegue a cada hogar, a cada familia, a cada ser viviente, debemos tomar las medidas preventivas mediante cápsulas en la televisión, a través de la radio, a través de los periódicos, en las escuelas, en los hospitales, en las plazas públicas, no olviden que hay experiencia de lo que esto ha significado en otras naciones”, explicó el presidente del Frente Amplio.

Dijo que en muchos lugares de República Dominicana los animales que  mueren en los canales, y del agua de esos canales, consumen y beben los campesinos. Asimismo, dijo que la falta de alcantarillados también propicia el desarrollo de la enfermedad.