SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El expresidente Hipólito Mejía afirmó que José Francisco Peña Gómez mantuvo viva la llama de la lucha por la democracia y contra la represión desatada en el país luego de la gesta de abril de 1965.
Al hablar durante la inauguración del nuevo local del Instituto José Francisco Peña Gómez, ubicado en la calle Santiago de Santo Domingo, el exmandatario destacó los aportes de Peña Gómez en la construcción de una verdadera democracia en la República Dominicana.
Resaltó que el líder perredeísta luchó contra todas las adversidades desde su niñez y logró formarse como un gran político nacional e internacional.
Asimismo, señaló la humilidad y la solidaridad que caracterizaron al doctor Peña Gómez.
A continuación el discurso íntegro de Mejía:
“En este día nos hemos congregado para ser testigos de la apertura del nuevo local del Instituto de Formación Política Dr. José Francisco Peña Gómez, institución que ya lleva más de quince años haciendo aportes sustanciales para la formación política de los jóvenes dominicanos y de otros países.
“Quiero resaltar el hecho de que este acto coincide con la celebración del Día Internacional de la Mujer. Aprovecho la ocasión para enviar mi saludo solidario a todas las mujeres dominicanas con quienes me solidarizo en su lucha por la igualdad de derechos.
“Al hablar de los aportes que hace este centro de formación, quiero dedicar mis palabras a recordar el nacimiento del líder cuya vida inspiró la existencia de esta institución.
“Hablo, por supuesto, del hombre a quien todos los presentes conocimos, estimamos y seguimos como nuestro líder indiscutible: el doctor José Francisco Peña Gómez, quien en esta fecha hubiese alcanzado la edad de ochenta y cuatro años.
“¿Por qué debemos recordar hoy y siempre a nuestro querido José Francisco Peña Gómez?
“Para empezar, deseo destacar el extraordinario ser humano que fue el inolvidable José Francisco, quien desde sus humildes orígenes logró convertirse en un referente internacional que encarnó como pocos la lucha por la democracia y la justicia social.
“En efecto, el niño que nació en un apartado lugar de nuestra geografía, pudo superar la aparente condena a la invisibilidad para crecer y brillar con luz propia a lo largo de toda su vida.
“Ese testimonio de vida es, sin lugar a dudas, un mensaje que desde su eterna morada, Peña Gómez envía a la juventud dominicana sobre el valor de la educación, el trabajo tesonero, el compromiso social y la solidaridad para ser verdaderos ciudadanos.
“Otra importante dimensión que queremos recordar en el día de hoy es su aporte a la construcción de una verdadera democracia en la República Dominicana.
“En ese camino, el primer paso a destacar es su incorporación al Partido Revolucionario Dominicano desde la llegada de sus primeros dirigentes al país.
“Fue Peña Gómez quien, con su astucia política, comenzó a sintonizar al partido con los actores políticos más importantes de ese momento, y muy especialmente con el pueblo humilde y desposeído.
“Es por ese motivo que Peña Gómez se convirtió en la figura política que mejor representaba la defensa de la democracia al ocurrir el golpe de estado del 25 de septiembre de 1963.
“Su lucha por el retorno a la democracia lo llevó a ser la voz que llamó al pueblo dominicano a unirse para luchar contra los golpistas en el glorioso 24 de abril de 1965.
“La estatura política de Peña Gómez se agigantó cuando tomó las riendas del Partido Revolucionario Dominicano para consolidarlo, darle presencia en todo el territorio nacional y convertirlo en la más poderosa organización política de todo el país.
“Como hombre de ideas y de acción, Peña Gómez se convirtió en un educador de masas a través de sus alocuciones diarias por los medios de comunicación disponibles en la época, especialmente por el programa radial Tribuna Democrática.
“De esa manera, mantuvo viva la llama de la lucha por la democracia y contra la represión desatada en el país luego de la gesta de abril.
“Un momento destacado de ese trascendental aporte lo constituyó la decisión de Peña Gómez de llevar hasta Washington la voz de protesta al hostigamiento que sufrían los militantes y dirigentes opositores en el país.
“Así se inicia la proyección internacional de Peña Gómez, quien a partir de ese momento cultivó relaciones con prominentes figuras del mundo político internacional, especialmente en Europa, América Latina, África y Norteamérica.
“El resultado trascendente de esas relaciones lo constituyó la incorporación del Partido Revolucionario Dominicano a la Internacional Socialista, de la cual alcanzó a ser vicepresidente mundial y presidente para América Latina y El Caribe.
“En ese rol, Peña Gómez logró colocar al país como un ente político beligerante en el mapa político internacional.
“Una muestra de la trascendencia de su agudeza política fue su decisión de alentar a la diáspora dominicana, especialmente a los residentes en los Estados Unidos, a incorporarse a la vida política y social de ese país para así ganar niveles de influencia que les permitieran ser protagonistas de su propio destino.
“En ese mismo camino, constituye un hito su propuesta para que la Constitución dominicana reconozca a nuestra diáspora el estatuto de la doble ciudadanía.
“Es en el contexto de las sólidas relaciones internacionales que cultivó Peña Gómez que debemos situar la transición pacífica hacia un gobierno democrático que se logró con la llegada a la presidencia del siempre recordado y querido Don Antonio Guzmán Fernández, así como del gobierno presidido por el Dr. Salvador Jorge Blanco.
“Al mirar hoy esa trayectoria de vida, por demás ejemplar, quiero también destacar otros aspectos fundamentales del extraordinario ser humano que fue nuestro José Francisco.
“En primer lugar, ese hombre cuyo nacimiento hoy recordamos, abrazó con firmeza su vocación de servicio a la gente, especialmente a los más desposeídos.
“Más aún, su pasión por el estudio y el conocimiento le permitió combinar con particular destreza los espacios de ideas y reflexión con los espacios de acción y movilización de las masas irredentas de nuestra sociedad.
2Es inolvidable la voz del inconfundible orador que siempre supo conectarse con el alma del pueblo para así luchar con inteligencia y energía por los mejores intereses del pueblo dominicano.
“Una cualidad de José Francisco Peña Gómez que ni siquiera sus más enconados detractores han podido opacar es, amigos y amigas, su acrisolada honestidad.
“En efecto, ese extraordinario ser humano esquivó con éxito las tentaciones para acumular riqueza. En cambio, su generosa solidaridad lo llevó a compartir los recursos que llegaban a sus manos.
“Un ejemplo de esa solidaridad lo fue su empeño en recaudar fondos, no solo para la actividad política en el país, sino para apoyar la lucha por la democracia en diferentes países del mundo.
“Esa solidaridad en la vida pública estuvo siempre acompañada de la práctica de la amistad en el espacio íntimo de su vida.
“Los que tuvimos el privilegio de ser sus amigos, conocimos de cerca la atención permanente de Peña Gómez por los intereses y necesidades de sus seres queridos.
Señoras y señores:
“Al concluir, quiero referirme a una de las virtudes de Peña Gómez que estuvo presente a lo largo de toda su vida. Me refiero a la nobleza.
“El Peña Gómez noble se hace evidente, además de la solidaridad que ya hemos mencionado, con su gesto público, a pocos días antes de su partida física hacia otras dimensiones, de expresar su sincero perdón a quienes infructuosamente intentaron disminuirlo como ser humano, al decirles, cito:
“Yo amo a mi país. A lo largo de toda mi vida he pagado un precio por eso. He recibido ataques feroces, a veces frontales, a veces con veneno más sutil, como ahora. Pero yo los perdono. Mis adversarios pueden contar conmigo, con mi perdón”. Fin de la cita.
“Por eso, al llegar la hora de su partida, nuestro compañero y líder solo estuvo rodeado de sus amigos y familiares, de la naturaleza que tanto defendió y quiso, y de los libros que inspiraron sus ideas.
“Es esa vida ejemplar la que honra el Instituto de Formación Política Dr. José Francisco Peña Gómez.
“En este nuevo local, que inauguramos hoy, tendrán continuidad las ideas, los valores, y la visión de ese hombre extraordinario.
“¡Peña vivirá por siempre!
Muchas gracias.
